5

3.7K 328 28
                                    

Ya era la hora de dormir, así que Jungkook se puso en su modo primo responsable y comenzó a ponerle el pijama al más pequeño.

Jimin no se iba a quejar, debés en cuando no estaba mal que alguien más le ayudara.

─¡Ya estoy listo para dormir! Jimin, cuentame un cuento cómo todas las noches, por favor— pidió el pequeño acomodándose en su cama.

—Mmm... Hoy estoy con poca imaginación, Tae, pero creo que alguien más podría contarnos uno...— respondió el rubio pasando su vista al pelinegro, haciendo que el pequeño haga lo mismo.

—¿Qué? ¿Yo?— preguntó Jungkook sin entender y ambos adversos asintieron— Bien, un cuento entonces...

»Habia una vez, un precioso príncipe de cabellera rubia, este venía de un país muy muy lejano, y estaba en busca del amor de su vida.
Un día el rubio llegó al pueblo de los KimsJeons, dónde vivía mucha gente, pero justo en el castillo, habitaba un pequeño duende mocoso y un caballero de brillante armadura.

A estas alturas Jimin ya entendía que hablaba de ellos, pero Tae estaba con sus ojitos muy abiertos prestando atención al relato.

»El principe un día llegó al castillo y el caballero de brillante armadura de enamoró de él de inmediato, lo invitó a salir, le dijo que si, y fueron felices para siempre, fin.

Jimin soltó una risita llena de aire, mientras el castaño estaba pensativo.

—Y-y-y ¿Que pasó con el duende?— preguntó preocupado.

—El caballero lo tiró por la ventana al conquistar al principe— explicó dándole poca importancia.

—Jungkook...

—¡No! Pobrecito— exclamó Taehyung— Jungkook, ten un poco de piedad, yo jamás te tiraría por la ventana y estoy seguro de que Mimi tampoco ¿Verdad Mimi?— le preguntó preocupado y el rubio asintió— así que dale un mejor final a tu personaje.

—Mocoso, yo no era el duende en la historia, yo era el...— Jimin lo interrumpió.

—Que le des un mejor final a tu propio personaje, Duende mocoso— atacó con gracia y Jeon suspiró.

—Bien, el duende encontró a... Otro duende rubiecito, se casaron y vivieron felices por siempre tambien— explicó con poca gana y Taehyung levantó sus brazos en victoria.

—Siii, todos felices— el pequeño abrazó a Jimin con fuerza y luego se acomodó para dormir de una vez.

—Descansa Tae, cualquier cosa estaremos en la sala esperando a que tu mamá y tu tía vuelvan, así que tú me llamas si hay algún mounstro bajo tu cama— el pequeño asintió y Jungkook salió de la habitación sin decir nada.

—Yo puedo con los mounstros, Mimi, soy valiente— respondió seguro, Jimin sonrió.

—Lo eres, Tae, te quiero mucho, buenas noches— avisó saliendo de la habitación de espaldas, acercándose a apagar la luz.

—Tambien te quiero mucho Mimi, buenas noches— el pequeño se tapó hasta sus hombro y cerro los ojos cuando el rubio apagó la luz y cerró la puerta.

Lo que Jimin no esperaba era darse la vuelta y encontrarse con el cuerpo del pelinegro tan cerca.

—Me asustaste— dijo en un susurro ya que el rostro de Jungkook estaba a menos de quince centímetros del suyo.

—Lo siento, solo observaba lo lindo que eres con Tae— habló con el mismo tono de voz— ¿Hay algo que hagas mal? ¿Tienes algún vicio malo? ¿Fumas? ¿Te drogas? Dime qué eres narcotraficante— mencionó con seriedad fingida y Jimin rió.

NIÑERO 護者 [Kookmin OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora