Hacia un año tenía a Camille en mis brazos, tenía cuatro años pero parecía una pre adolescente de doce años que acababa de tener su periodo, ser tutor temporal, tener un trabajo estable, un departamento de apenas dos habitaciones y de paso una bebé de siete meses en mi mando, no fue gran idea. Emma y Camille eran mi vida después del hockey, además de mi prioridad
Camille trataba de estar siempre, casi siempre junto a mi o cerca de mi, llegando de la mano de mi asistente y jugando con su pequeña muñeca de aurora que le compre la última vez que fuimos a disfrutar unas vacaciones a Miami, Emma en cambio era una pequeña que no le importaba en lo absoluto de mi existencia cuando no quería que le cambien el pañal o quiere un biberón. Mi sobrina y mi hija eran mi responsabilidad desde hacía un año, bueno, solo Camille y después llegó a los oídos de Ericka, una ex novia de secundaria que vino a dejarme a nuestra hija cómo una si fuera un paquete internacional o un correo poniéndola en la puerta de mi departamento.
Sin embargo hoy Cam y Emma estaban tranquilas viéndome entrenas mientras mis compañeros y yo nos turnábamos para verlas desde lejos, mi entrenador nos tenia un poco de compasión y cariño por lo que a los casados nos dejaba traer a sus esposas y a los padres les debaja traer a sus hijos, en el descanso patine lo más rápido que pude y tomé a Cam de los brazos para darle un pequeño beso esquimal.
— Cuándo quieras irte solo dime para poder llamar a la niñera, ¿sí? — le avise viendo a mi asistente acercarse, Mariana, era alta como yo, castaña y podríamos decirle que era mi salvación cuando la niñera no podía venir a la pista y ver a las niñas — ¿Algo nuevo, Mariana?
— Solo tienes que llegar esta noche para la cena con la campaña que tiene la caridad y la NHL, después, encontré tres guarderías para Cam y una escuela de estimulación temprano para Emmie — Mariana caminaba a mi lado hacia las sillas que estaban en la pista un poco alejadas, Emma estaba durmiendo en su cochecito y realmente estaba dormida, solo podía pensar en lo linda que se veía
— La práctica termina en quince minutos, ¿crees que puedas llevar a las chicas a mi camerino?, así Cam puede ver un poco de televisión en mi teléfono, Emma duerme sin ruido alguno y tú piedad descansar o trabajad mas tranquila — hablé mirando a Camille tomar mi guante y jugar con las texturas, Mariana me hizo caso, se llevó a las chicas y quince minutos yo estaba pensando en que iba a hacerles para cenar a Camille
Pasar de ser un soltero que jugaba hockey a un padre soltero que jugaba a hockey para ganarse la vida y darle de comer a los humanos que ahora tiene en su cuidado, fue duro al principio, lo admito, pero cuando llame a Boo y a su esposa, Violet desesperado porque Camille no sabía hablar muy bien, supe que mi vida había cambiado
— Rhys, ¿alguna persona que quieras ver esta noche? — Liam me molestó golpeando mi hombro y yo rodé los ojos — Oh vamos, se que quieres ver a alguien
— Sí, a mi niñera esta noche, la necesito para poder ir al menos un rato a la cena de caridad y regresar a casa para contarle un cuento a Camille y darle un beso de buenas noches, hacer dormir a Emma y después hablar con mi abogado para ver cómo van los papeles de adopción — respondí sacando mi bolsa de ropa, tenía lo básico pero cuando no encontré mi desodorante supe que tenía que ir a casa para un ducha
— Violet estará en la cena hoy, si la niñera te falla ella puede cuidar a las gremlins, las ama y lo sabes — Boo, el defensa del equipo respondió sacando su bolso de su loCker — Y antes que digas algo, ella ama a las chicas y las chicas las ama a ella
Boo era mayor que yo por un año y ya estaba casado, pensando en comenzar una familia y tener un perro o gato para ser una tradicional familia americana. Todos nos cambiamos civilizadamente, a veces éramos unos niños de quince y nos quitábamos las cosas entre nosotros pero gracias a Dios no estaba pasando eso cuando Poppy, la secretaria de la casa de caridad que esta noche pasaríamos a cenar tocó la puerta
YOU ARE READING
LAVANDER HAZE
Ficção Adolescentepoppy necesita una ayuda y rhys está dispuesto a dársela solo y cuándo poppy acepte sus terminos y condiciones sin dejar afectarse por los sentimientos. poppy tiene todo controlado ¿verdad?