Esposa Trofeo

02

Logré ver el rostro de Violetta cuando me quede solo con Amelia, me dio un poco de lástima pero rápidamente mis pensamientos se fueron a otra parte

—Coryo?? Ella si te puede decir Coryo??— me reclama Amelia cuando ya nos encontrábamos solos

—Amelia entiende, ella es mi prometida— le respondo en un tono cansado. Mi plan había funcionado

—Hace cuanto? 20 minutos?He sido tu novia por casi 2 años y nunca me has dejado llamarte de ese modo—

Los reclamos y gritos de Amelia hicieron que comenzara a dolerme levemente mi cabeza, con molestia tomó mi cara y suelto un suspiro pesado

—Ser presidente ha sido mi objetivo desde hace mucho tiempo y lo sabes. Con una mujer como ella a mi lado podré ser un presidente digno de Panem—

—Y por que no conmigo? — reprocha ella con molestia, no pensé que le importaba tanto a Amelia

—Amelia fuiste tú quien me dejó, por qué vienes ahora?— no necesitaba respuesta a mi pregunta, era más que obvio, estaba celosa

—Estaba confundida, pero tú sabes que nadie nunca te tratará como yo lo hago o si?— habla en un tono dominante mientras apoya sus manos en mi pecho

—Amelia, ya te lo dije una vez no me hagas repetirlo— tener cerca Amelia era tentador pero tenía que pensar en mi futuro

—Vamos Coryo, crees que esa niña te hará sentir la mitad de lo que sientes conmigo??— su voz salió como un susurro mientras me empujaba lentamente contra la pared y se acercaba a mi oreja para sonar mas seductora

—A-Amelia por favor— le digo en un pequeño susurro pensando con todas mis fuerzas en lo que era correcto y en que tenía que resistir 

—Dime que no quieres esto y me detendré— respondió ella mientras rozaba sus labios con mi cuello que lentamente se convirtieron en besos y caricias

No respondí nada y a pesar de no verla sabía que tenía una sonrisa complacida por lograr su objetivo. Se alejó de mi cuello para ir hacia mis labios y besarme con desesperación y pasión, en este punto ya no me podía resistir, Amelia era una mujer muy bonita y me encantaba como me hacía sentir. No caer en la tentación era básicamente imposible
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Me mire en el espejo y me preocupe de estar bien para volver al baile

—Te falta algo— me asuste un poco al escuchar la voz de Amelia pero fingí que nada había pasado, desvié mi vista del espejo y la vi con mi corbata colgada en su cuello, ella se acerca a mi y me la coloca

—Donde tiraste mi ropa? O esperas que salga en ropa interior?— bromea nuevamente , yo respiro profundamente y con un tono serio le respondo

—Tú ropa esta en esa silla— apuntó con mi mirada mientras retoco mi corbata

—Tu me avisas cuando nos volvemos a ver?— pregunta ella con esa sonrisa que antes me encantaba tanto

—Está era la ultim- Ella me interrumpe rápidamente

—Hablemoslo después, princesita te espera para tu baile, lo recuerdas??— cuando Amelia nombró a Violetta fue cuando me acordé de ella, sin decir nada corrí rápidamente al salón donde estaban todos celebrando, al entrar al salón la veo sentada en una silla sola, se ve levemente triste mientras observa por todos lados. La culpa me come por completo, ella eran tan tierna y amable y yo era un completo idiota. Con tranquilidad me acerco a ella y cuando mis ojos se encuentran con los suyos puedo ver la emoción que creció en ella por verme

—lamentó la tardanza, prometo que no volverá a suceder— habló en un tono serio para que ella no sospeche nada

—Está bien Coryo, me imagino que debió ser algo muy importante para ausentarte tanto tiempo— busco en su tono algo de molestia pero en ella solo hay amabilidad y un poco de tristeza—Bailamos ahora?— pregunta Violetta con entusiasmo

—Oh lo lamento pero estoy muy cansado, lo dejamos para la próxima?— mis piernas apenas me sostenían, mis brazos estaban muy débiles y mi ánimo estaba por el piso

—Oh... si esta bien, será la próxima— ella trata de darme una sonrisa pero logro ver su desilusión

—¡Coriolanus por fin apareces!— Abuelatriz me grita molesta mientras camina hacia mi

—Lo lamentó Abuelatriz, estaba ocupado— digo seriamente

—Con Verónica se nos ocurrió la gran idea de que tú y Violetta vivan juntos desde ya— el tono y comportamiento de Abuelatriz cambia radicalmente a uno alegre y amable

—Mientras Violetta diga que si por mi está bien, ella será quien dejara su hogar— respondo sin importancia mientras observo a Amelia coquetear con otro hombre

—Excelente!— exclama Abuelatriz mientras camina lo más rápido que puede hacia Verónica

—Pero Coryo, tú de verdad quieres que  vivamos juntos tan pronto?— me pregunta Violetta, sus ojos están llenos de emoción y un poco de temor, le sonrió y acarició su mejilla

—Claro, quiero conocerte mejor antes de llevarte al altar— le sonrió mientras observo su rostro, sus mejillas están levemente rojas y sus ojos brillan con emoción

—Entonces yo digo si también, vivamos juntos— ella me dedica una sonrisa hermosa, se nota que está muy emocionada

—Bien, le dire a mi abuela y a tu madre, tú prepárate ya que mañana mismo vengo por ti

—Está bien, gracias Coryo— le sonrió amablemente y me propongo ir hacia las mayores pero ella me detiene con un abrazo para luego seguir hablando— Te prometo que no te arrepentirás de esto— susurra en mi oído para luego alejarse e ir con sus amigas. Yo mientras coordino todo con su madre para poder llevarme a Violetta conmigo lo antes posible, desde el otro lado del salón puedo ver a Amelia con los brazos cruzados y con el ceño fruncido— Había logrado mi objetivo.—

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Les gusta que la historia sea desde la perspectiva de Coryo y Violetta?