𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑𝐒 𝐂𝐎𝐔𝐏𝐋𝐄,cha hyun-su ✓

014, el beso

🧛🏻‍♀️

EL GRUPO FINALMENTE había llegado al apartamento 1408, Du-sik fue quien les abrió la puerta, dándoles a todos espacio para entrar y cerró la puerta poco después.

- ¿Ustedes están bien? - preguntó Hyun-su a los niños quienes estuvieron de acuerdo.

- ¿Y la señora? - preguntó Jia — ¿Dónde está ella?

Du-sik no sabía cómo contarles lo que le pasó a la mujer, así que se limitó a señalar la puerta del baño.

Jia llamó varias veces pero no recibió respuesta, así que abrió. Cuando la puerta se abrió por completo, todos pudieron ver una especie de capullo gigante, parecía como si hubiera un niño enorme adentro. Pronto todo el mundo podía oír la "voz" de un bebé, el típico ruido que hacen todos los bebés.

' Descanse en paz ' ​​- pensaron Jia y Hyun-su al mismo tiempo.

[ ... ]

Todos ya habían abandonado el apartamento y ahora estaban en el piso principal, junto con los demás residentes. Yoo-ri estaba con Gil Sub, Du-sik estaba reparando el equipo de protección, los niños estaban con la señora Jin-ok, Jia y Hyun-su ya estaban de regreso en la sala de cuarentena.

Hyun-su estaba descansando mientras Jia estaba despierta, la niña no había dormido durante más de una semana, prácticamente desde que descubrió que estaba infectada, pensó que era porque era un "vampiro".

La chica usó su reflejo increíblemente rápido y atrapó la cabeza de Hyun-su antes de que cayera al suelo, el chico ya se había quedado dormido y su cuerpo se fue hacia un lado, casi golpeando el suelo.

Choi colocó la cabeza de Hyun-su en su regazo mientras jugaba con su cabello, sus dedos pasaban fácilmente por los mechones oscuros del niño. Después de unos minutos, se abrió la puerta y apareció Eun-hyuk sosteniendo los palos de Hyun-su y Jia.

El de lentes no parecía muy feliz de ver cómo estaban Hyun-su y Jia, pero a la chica eso no le importó, solo movió levemente a Hyun-su, haciéndolo despertar.

Ambos se levantaron y recogieron sus bastones, dirigiéndose hacia la puerta que conducía a las escaleras del edificio, ambos ya tenían ojos diferentes, uno negro fuerte ocupando los ojos marrones de Hyun-su, y un amarillo vibrante ocupando los ojos marrón oscuro de Jia.

[ ... ]

El dúo ya había recogido todas las pertenencias que los residentes pidieron, Hyun-su estaba entregando las pertenencias de los residentes mientras Jia se dirigía a la sala de cámaras.

La chica entró viendo a Eun-hyuk sentado mientras analizaba las cámaras, la chica abrió agresivamente una de las mochilas provocando que miles de baterías cayeran tanto sobre la mesa como sobre el suelo.

— Por cierto — se detuvo en la puerta, todavía de espaldas — De nada.

Simplemente salió de la habitación, sintiendo la mirada de Eun-hyuk ardiendo en su espalda.

Choi ya había entregado las pertenencias de casi todos los residentes, lo único que faltaba era la señora Hye-in, quien sostenía al cachorro en su regazo.

— Pero no pedí nada — dijo Hye-in al ver a Jia revisando su bolso.

La niña no dijo nada, solo sacó una bolsa mediana de comida para perros y luego una pequeña muda de ropa y se la entregó a la señora.

— Perdón por revisar tus cosas — dijo — Pero pensé que lo necesitarías.

La niña se agachó y acarició suavemente la cabeza del perro, el cual lamió su mano felizmente y luego se levantó dispuesto a salir de allí.

— Jia – La llamó Hye-in, haciéndola girar nuevamente — Gracias.

La niña solo sonrió levemente y se inclinó levemente, dirigiéndose de regreso a la sala de cuarentena. Cuando llegó allí, encontró a Du-sik parado junto a la puerta, con las llaves en sus manos, Jia inclinó ligeramente su cuerpo y tomó delicadamente las llaves, luego abrió la puerta.

— Buenas noches, señor Du-sik — dijo antes de cerrar la puerta.

[ ... ]

Ya habían pasado unos minutos y Jia ya se había dado una ducha fría, la chica ya estaba de regreso en la sala de cuarentena y estaba viendo a Hyun-su parado en silencio en un rincón en algún lugar.

La niña se levantó del suelo y caminó hacia el niño, parándose detrás de él y abrazando su amplia espalda. El acto hizo que Hyun-su se sobresaltara y saltara un poco.

—¿Jia? - murmuró al escuchar a la chica sollozar.

— No soporto verlos usarte como esclavo sólo para conseguir estupideces – gimió — Ni siquiera necesitan todo eso.

El niño se volvió hacia Jia y lentamente la abrazó, la niña lloraba mientras su rostro estaba enterrado en el pecho de Hyun-su.

Después de que la morena finalmente logró calmar a Jia, la niña levantó la cabeza para mirar a Hyun-su y se dio cuenta de que el niño ya la estaba mirando.

Ambos estaban peligrosamente cerca el uno del otro, con la respiración alterada, los cuerpos apretados, los rostros demasiado juntos. Pero eso no les impidió acercarse aún más.

Cuando sus rostros estaban más cerca que nunca, sus labios ya se estaban tocando, y fue entonces cuando comenzó el beso.

El beso en sí se limitó a pequeños -pero prolongados- besos, fueron mínimos pero lentos y prolongados.

A Jia le encantó la sensación de los cálidos labios de Hyun-su sobre los de ella. Sus manos ahora estaban en el cabello de Hyun-su, haciendo una ligera caricia, mientras las manos del chico tocaban ligeramente la esbelta cintura de Jia.

Se separaron cuando Hyun-su necesitó respirar, la chica sin saber exactamente qué hacer, simplemente jaló a Hyun-su hacia el colchón y se acostó inmediatamente abrazando el cuerpo del hombre mayor.

Y así terminó su noche, sintiendo el calor del cuerpo del otro, aunque Jia no pudiera dormir, su noche valió la pena si estaba con Hyun-su.