Nada que hablar.

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Domingo, día de carrera en Qatar, hacía mucho pero mucho calor, estaba sentada en un sillón con los ojos cerrados mientras me abanicaba con una carpeta que encontré por ahí.

Sentí con el sillón se hundió de un lado y João hablo.

- Ya no soporto el calor que hace aquí, no sé cómo pueden ponerse ese traje y subir al monoplaza sin desmayarse.

- Ya lo sé, son muy fuertes porque tienen que aguantar tanto, no sé cómo hay gente que dice que no son deportistas.

- Gente tonta mi amor que no hay que hacerles caso.

Tiene razón pero no saben cómo me enoja que haya personas que piensen que la fórmula 1 no es un deporte y que los pilotos no son deportistas, ellos trabajan muy duro y entrenan como locos para estar en condiciones de subirse a un monoplaza de esos.

El sonido de una notificación llegando a mi celular me sacó de mis pensamientos.

Charles Leclerc

- Puedes venir por Chiara, ya es hora de alistarme.

- Voy.

Chiara estaba con Charles amaba pasar tiempo con él y ahora tenía que ir a verla porque ya es hora de la carrera.

- Ya vengo, voy a ver a Chiara en Ferrari.

- Quieres que te acompañe - negué antes de hablar.

- No mi vida, vuelvo enseguida - me acerqué para dejar un beso en sus labios antes de irme.

Al llegar a Ferrari Andrea y Joris me recibieron y me dijeron que Charles estaba en la habitación así que para allá fui.

"Saludo, tomó a Chiara, me despido y me voy" es todo lo que tienes que hacer Mia, nada más.

Me puse nerviosa, otra vez, últimamente me pasaba eso al acercarme a Charles, después de hablar con Lewis algunas cosas se aclararon en mi cabeza.

Toqué la puerta y la voz de Charles sonó diciendo que podía pasar, pero al entrar solo me encontré con él, y Chiara?

- Solo estás tu - dije bastante sorprendida.

- Si, solo estoy yo - iba a preguntar por mi hija pero se adelantó - Chiara está bien, no te preocupes por ella.

- Okey - espere unos segundos a ver si me decía donde estaba - dime dónde está para ir a verla.

- No, o sea te lo diré pero después de que escuches lo que tengo para decirte. - hice un gesto de "que?"

- Mira, no tengo tiempo para estos jueguitos de "encontrar a mi hija" - dije de forma sarcástica - dime dónde está, tengo que ir a trabajar.

- Okey pero solo déjame decirte algo, por favor - pidió en tono suplicante.

"Si", queria responder pero tenía que ser contundente con lo que le dije antes.

- No, tu y yo no tenemos nada de que hablar, te dije el día de la fiesta de cumpleaños de Chiara, no me interesa lo que tengas por decirme, no lo quiero escuchar.

Ví la desepcion en sus ojos pero no flaquee.

- Es importante por favor, es de nosotros - solté una risa sarcástica.

- Nosotros? no hay un nosotros Charles y tu decidiste que así fuera, o te olvidas de como te besaste con ella cuando estábamos juntos, cuando juraste no hacerme daño y fuiste el que más daño me hizo, o cuando me pediste que me olvidará de ti porque tú ya lo hiciste conmigo - tomé aire antes de seguir - así que no, no tenemos nada de que hablar y mucho menos tenemos un nosotros, lo único que nos une ahora es Chiara, nada más.

In LOVE with YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora