Capitulo 5

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Viena - Austria

-Nunca pensé en viajar con arena -

-Observa con cuidado la ciudad, ¿Puedes recordar algo?

-No creo que sea la mejor manera de recordar algo, todo es moderno. Espera... puedo hacer que vuelva como en esos tiempos

*Comienza a resplandecer su cristal y envuelve la ciudad como era durante la época de la segunda guerra mundial

-Hay demasiado silencio jefe

-Esto solo es una proyección de lo que sucedió aquí - Aclara Eileen

*Varios soldados nazis llegan y comienzan a destrozar todos los lugares, sacan a varias personas y los ponen en una fila

-¿Esos son?

-Si Mathew, son judíos

*Observan como los jalan a la fila y los comienzan a escoltar.

-Mi lady, mire

*Dianthe señala a dos jovencitos que corren por un callejón, sin que los soldados los vean y Eileen los sigue

-Sigue corriendo John, debemos llegar al punto de reunión

-Ya no puedo, mis pies me duelen, si nos atrapan estaremos perdidos

*Llegan a un puente en construcción donde hay más niños

-Caleb ¿Estás seguro de que es aquí?

- Ella dijo que vendría

*Aparecen soldados

-¡Oigan! ¡Mocosos bajen de ahí!

-Nos encontraron hermano - el niño más pequeño se aferra al brazo de su hermano mayor

-Si no bajan, lo pagarán caro

*De pronto el río comienza a elevarse y forma la otra mitad del puente para que los niños lo atraviesen

-Carajo, regresen aquí - Vas tras ellos

*Cuando los niños terminan de cruzar, el puente se deshace y los soldados caen. Eileen a lo lejos ve a una mujer con capa gris que cubre su rostro, los niños la siguen.

-¡Espera!, ¿Quién eres tú? -

*Eileen le pregunta a la mujer, pero ella solo voltea y sigue su camino

-Eileen, solo es un recuerdo - Morfeo se acerca a su lado

-Si, lo sé, pero no parece que sea mío -

-¿Sabes a donde pudieron ir? - Pregunta Morfeo

-No, pero tal vez si seguimos ese camino, pueda recordarlo -

-Phoenix, querida ¿No has logrado nada? -

-Mis señoras, mi diosa Hécate - Se agacha

-Parece que no le dijiste que no confiara en Sueño de los Eternos - Dice una mujer anciana

-Lo hice mi señora, pero su determinación es fuerte, a pesar de que no recuerde su yo verdadero -

-Mas vale que hagas algo - Dice una mujer adulta

-O el destino que buscas te llevará a la pérdida de tus poderes y hechizos - Dice una mujer joven

-Ya envié a los hechiceros -

-Eso no será suficiente -Aclara la anciana

-Te mandaremos a los perros infernales - Dice la joven

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