Parásito I y II

Capítulo 5: Secuestrando al hombre de negro.

          Aunque el parásito amante de los sujetadores resistió la enorme tentación y optó por distraer nuestra atención y huir, aun así me quedé en el callejón porque proporcionaba información importante. Una docena de cordones prometidos de copa D, lo suficientemente coloridos como para ser ensartado en una bandera arcoíris para el Desfile Anual de Gays y Lesbianas de Los Ángeles; si volverá por ella, ese es asunto suyo.

　　Al día siguiente, a altas horas de la noche, salí del baño y encontré una extraña criatura en el dormitorio.

　　He Yuanfei estaba cómodamente apoyado en mi cama, sosteniendo una computadora portátil; estirando sus largas y hermosas piernas.

　　Soy demasiado vago para preocuparme por cuestiones morales como invadir repetidamente la privacidad de otras personas. Quizá para algunos jefes demasiado controladores, los empleados son de su propiedad. ¿Pero podría dejar de ser tan presuntuoso y sustituir las sábanas negras por un rojo brillante exagerado? ¡Diablos, agrega algunos puñados de pétalos, colócalos en una forma ridícula de corazón y parecerá un lecho nupcial estándar!

　　——Basado en el carácter de este hombre, tal vez haga esto la próxima vez.

　　Pensando en esa escena, no pude evitar sentir un escalofrío. Estaba enojado listo para ir y emitir una orden de desalojo. Si él no se iba, lo empacaría y lo arrojaría junto con la deslumbrante sábana.!

　　"Mi cabello está demasiado mojado. Me dolerá la cabeza mañana si duermo así. "Me miró cuando escuchó el ruido y dijo primero: "Ven aquí, déjame limpiarlo por ti". Tomo una toalla grande y seca me tapó los ojos, él aprovechó para tirarme hacía él, me senté en sus piernas luego me frotó el cabello, ni ligero ni fuerte.

　　Presioné la toalla en mi cabeza y me la quité, "Gracias, ¿podemos volver a nuestras respectivas habitaciones ahora?" "

　　Pensé que esta era 'nuestra' habitación". He Yuanfei dijo con desaprobación: "Está bien, no te preocupes". "Estos son pequeños problemas, mira esto..." Volvió la pantalla de su computadora portátil hacia mí.

　　Había un correo electrónico arriba, con unas pocas palabras escritas simplemente: "97 Cyril Road, Covina, Área B". La firma era una araña del tamaño de la palma de la mano con el lomo cubierto de finos pelos dorados y extremidades delgadas. Los nudos brillan con un brillo intenso un brillo metálico azul, dándole una belleza feroz y brillante.

　　"Blue Star, una araña venenosa gigante que es feroz por naturaleza y le gusta perseguir a su presa". La admiré e hice clic en la línea de dirección: "¿Qué es esto?" "Cuesta 100.000 dólares estadounidenses. Esta persona llamada spider no sólo es venenosa sino "También es experto en extorsión pero es uno de los pocos piratas informáticos genios que puede entrar y salir libremente del sistema de vigilancia de comunicaciones del Ministerio de Seguridad Nacional". 

         El tono de He Yuanfei sonaba un poco enojado e impotente. Supongo que esto no tiene nada que ver con dinero, sino por las transacciones de esta naturaleza, se que pase lo que pase el control estará en sus manos.

　　"Revisé la dirección. Es un hospital psiquiátrico privado; Ryan Cruz no es una persona, sino el nombre del hospital. El área B es el área de la sala y la llamada se realizó desde un teléfono fijo".

　　Tengo buena información relevante sobre este hospital que fue recopilada de Internet, "Para entrar al área B, tenemos que encontrar un avance entre cientos de pacientes y empleados. Los pacientes necesitan obtener aprobación para entrar luego llamar y el personal médico también tiene una lista de tareas que verificar. Esto "No es difícil; puedo solicitar un voluntariado y colarme".

　　He Yuanfei asintió y dijo: "Yo también iré mañana". 

         "¿Estás bromeando?" Miré su valioso pijama de marca, "Incluso si le pongo un traje de mendigo, no puedo detenerte. Tienes un sentido de superioridad que gasta el dinero como agua. Pensarán que eres un hombre rico con excentricidades, no un filántropo rico". 

　　He Yuanfei se rió, "Tomaré esto es un cumplido", dijo descaradamente, "Me verás mañana". 

　　¿Entonces podemos separarnos primero esta noche?"

　　Respondió con lenguaje corporal, arrojando la computadora al suelo y hablando lentamente (realmente no quiero uso las palabras "llenas de" la literatura humana) Se quitó el pijama y tomó mi almohada descuidadamente.

　　¡Este intruso es extremadamente egocéntrico!

　　"No parezca que estás defendiendo tu territorio, cariño" me dijo con una sonrisa. "La cama es lo suficientemente grande. Por mucho que 'rodemos', no nos caeremos y solo quedan seis horas.

　　"... ¡Al menos cambia estas asquerosas sábanas!" 

　　" Oh! Qué lástima, creo que el rojo brillante complementa tu complexión, especialmente durante el orgasmo..." "Pero no importa, el blanco y negro también es muy impactante con tu cuerpo visualmente."

　　Quería asesinar a mi jefe...

　　Al mediodía del día siguiente, mientras estaba limpiando el piso en el pasillo del hospital psiquiátrico con un uniforme de limpiador, me encontré con el presidente He, ahora su nuevo nombre es Dr. He.

　　Con una lujosa chaqueta de traje y una bata de laboratorio blanca, fingiendo llevar un par de gafas sencillas sosteniendo una identificación falsificada, este hombre que ni siquiera podía distinguir entre enfermedad mental y una neurosis se transformó en un "conocido experto en psicología clínica".

　　"Una joven doctora rubia, balanceándose sobre tacones altos, lo recibió en su consulta y a los cinco minutos de iniciar la conversación mostró gran interés por la "monografía sobre psicología clínica que estaba escribiendo".

　　En solo unos minutos, mientras limpiaba el pasillo, la doctora ya había descrito tres casos de pacientes y se había cambiado a seis posiciones diferentes para sentarse. Su ajustada falda morada tenía buena elasticidad y seguía subiendo. Sospecho que esta tendencia continuará se convertirá en la falda más estrecha o en el cinturón más ancho en la historia de la vestimenta femenina humana.

　　El Dr. He parecía estar escuchando atentamente, anotando algo en su cuaderno de vez en cuando, ofreciendo una sonrisa bien colocada cuando era necesario y fingiendo hacer la vista gorda ante el  sexo de la mujer "accidentalmente" filtrado debajo de su falda.

　　La hipocresía del hombre y la desvergüenza de la mujer de la oficina eran una combinación perfecta, pero no tenía ningún interés en escribir una monografía sobre psicología humana, así que empaqué las herramientas de limpieza y me preparé para marcharme.

　　"... También hay una paciente que acaba de ser ingresada en el hospital. Mi jefe le diagnosticó depresión reactiva y otro médico pensó que padecía delirios persecutorios graves o hay veces en las que se encoge de miedo en un rincón y no se mueve todo el día o ella llora, suplica y maldice durante horas. Lo interesante fue lo que dijo o lo que creía pues creía firmemente que en un callejón a altas horas de la noche, había un grupo de hombres misteriosos con trajes negros."

　　De repente me detuve.

　　La doctora parpadeó con un montón de cera vegetal y sonrió al hombre apuesto, dorado y elegante de enfrente: "Sí, es lo que estás pensando ahora, como una película de "Hombres de negro", usando electricidad como una red que la atrapó, cortaron su vientre estando despierta y extrajeron el feto vivo, lo guardaron en una botella de metal. Es interesante, ¿verdad? Es como un thriller de Hollywood, su imaginación es realmente buena". "Entonces, sabemos ¿qué le pasó?

　　¿Una herida de esas que se cortan con un arma afilada?" Intervino el Dr. He y preguntó.

　　La doctora detuvo su sonrisa y le dirigió una mirada extraña: "Sí, es solo una incisión profesional dejada por la miomectomía uterina. Estaba registrada en su historial médico. Por eso mi jefe pensó que era el trauma causado por la estimulación quirúrgica. "

　　Estoy muy interesado en este caso", el Dr. He cerró su cuaderno con una sonrisa. "Si es posible, me gustaría ponerme en contacto con esta paciente".

　　"No hay problema, ella está en el pabellón 23, se llama Gothika. Oh, puede que no pueda verla hoy. La terapia ACT se ha organizado para ella por la tarde..."

　　Salí rápidamente con un balde y un trapeador antes de que se abriera la puerta de la oficina.

　　Mientras almorzaba al mediodía, recibí una llamada de He Yuanfei.

　　"Originalmente hice una cita para cenar contigo pero desafortunadamente no puedo hacerlo", dijo y su tono sonó como de arrepentimiento pero no estoy seguro si todavía estaba inmerso en el juego de roles de el ambiente en ese momento... "Sospecho que la llamada fue hecha por una paciente, lamentablemente no puedo hablar con ella hoy. Tengo que esperar hasta mañana. Para hacer esto, tengo que tratar con el médico que organizó nuestra reunión y  cenar ..." 

            Lo que puedo confirmar es que en comparación con la mesa del comedor en se momento, había una médico entusiasta que incluso quería meterse en su cama.

　　Quizá estará ocupado toda la noche.

　　Da la casualidad de que tengo planes para esta noche y no quiero que él me moleste.

　　A las doce de la noche, cuando entré furtivamente en el pabellón 23, área B del hospital psiquiátrico Lenkreuse, la mujer de cabello castaño que estaba en la cama estaba cayendo en un sueño profundo bajo la influencia de sedantes.

　　Pero no creo que durmiera tranquilamente: sus globos oculares se movían frecuente y rápidamente debajo de sus párpados, su respiración era rápida, brotaba sudor frío y sus cejas se enredaban de dolor.

　　Ella está teniendo una pesadilla.

　　Esta es una buena oportunidad. La mente subconsciente inquieta e indefensa puede aceptar fácilmente instrucciones externas, estiré un dedo y lo presioné suavemente contra su sien enviando un débil impulso nervioso a su cerebro.

　　En comparación con los trucos psicológicos que los humanos utilizan para inducir palabras u objetos, lo que hace que la conciencia de la otra persona entre en trance y distorsione su percepción, el uso de señales neuronales para estimular y controlar la actividad cerebral de una persona es la verdadera hipnosis.

　　Después de unos segundos, se sentó lentamente con expresión apagada e inmóvil,  su delgado cuerpo debajo de la bata del hospital era como un fantasma pálido y demacrado.

　　Saqué mi teléfono del bolsillo con la otra mano, lo puse en su palma y continué enviando comandos.

　　Cerró los ojos con fuerza, presionó con precisión una serie de números en el teclado con los dedos y luego se los llevó a los labios mecánicamente: "... Cavill soy yo, escapé... Mi hijo me llama, escuché que todavía está vivo, está encerrado en una botella de especímenes, rogándome que lo salve... No es un monstruo, sé que no lo es... Me escondí detrás de los árboles en el parque, temiendo que los doctores me matarían si se enteraran. Retíralo... estoyen el pequeño parque en la puerta trasera del hospital, sí... te esperaré a que vengas."

　　La llamada fue colgada, tomé el teléfono. Se alejó y se recostó sobre la almohada.

　　"Esta noche dormirás sin sueños", le dije a esta pobre mujer con las yemas de los dedos tocando sus cejas y luego salí silenciosamente de la habitación.

　　Más de media hora después, un Chevrolet negro aceleró por la carretera vacía a altas horas de la noche y estacionó junto al parque en medio de la calle, no lejos de la entrada trasera del hospital.

　　Un joven de unos veinte años salió del auto; caminó unos pasos hacia el parque oscuro. "Gothika", llamó en voz baja, "Gothika". Los árboles frente a él se sacudieron ligeramente y emitieron un sonido del crujido de ramas y hojas frotándose entre sí.

　　"Gothika, estoy aquí. No tengas miedo, dame tu mano..." Se agachó y estiró los brazos detrás de los arbustos.

　　"Hola, Sr. Hombre de Negro", agarré firmemente la mano y le sonreí cortésmente, "Ha sido secuestrado".