Omegaverse 1.5/2

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El tiempo ha pasado, Tae-ui se encontraba en la cama, su ropa estaba tirada por el piso y tenía a su al frente una bestia; los ojos brillantes de Ilay y su sutil sonrisa, podrían expresar millones de cosas, pero tenía un significado y eso era devorar a su presa.

El beta se encontraba con sus mejillas calientes y sudando, hace rato fue atacado por besos y toques en su vientre por el alfa. Se apeno de que viera y tocaran su panza, ya que al ver que ha subido de peso y su vientre ha acumulado ''grasa'' hace un tiempo que no va al gym, pero no era para estar como está ahora. 

Pensó por un momento, ¿Se sentirá agradable para Ilay hacer esto, teniendo este físico? Más cosas negativas comenzaron a surgir en si mismo, perdiéndose y vagando por los pensamientos de inseguridad que tenía Tae-ui consigo mismo. 

''Tae, ¿En qué cosa estás pensando tanto?''

Ilay que estaba hace rato sin hacerle nada, pudo notar la desconcentración de Tae-ui por estar vagando ante sus pensamientos. Frunció el ceño cuando menciono lo que dijo.

''No, nada, no estoy pensando en nada''

Dijo el beta, de pronto sintió que una mano le apretó las muñecas y lo acorralo en el apoyo de la cama. Los labios de Ilay comenzaron a dejar marcas de besos en el cuello del beta, el suspiro caliente del alfa chocando sobre la piel de Tae-ui, le hizo sacar pequeñas risitas.

Las manos blancas y delicadas pasaban de manera pícara en la cintura de Tae-ui hasta sus nalgas, luego recorrieron en el medio de estás, hasta tocar aquel agujero de carne que andaba un poco más mojado de lo habitual. 

Una estiraba una nalga para dar espacio a la otra para juguetear la zona íntima del beta, metía y sacaba los dedos mientras soltaba un pequeño chapoteo en cada pequeña metida. Ilay fijo su mirada en sus manos, como el contrario no tenía ropa, se podía notar claramente la vista hacía la retaguardia y sus manos puestas en ellas.

Tae-ui se sostenía del cuello del alfa, andaba abrazándolo mientras gemía por cada cosquilleo que le daba en esa parte. Su rostro estaba caliente y en otros lados de su cuerpo también, sus pezones andaban salidos por sentirse excitado, y su miembro rígido esperando a que esas manos comenzaran a tocarlo y frotarlo. 

''Ilay . . . Deja de jugar . . .''

Una voz que parecía un susurro, salió de la boca del beta. Estaba en un aspecto algo pasivo, pero mandón, a Ilay no le disgustaba para nada ese comportamiento, más bien, le agradaba obedecerle, ya que significa que a Tae-ui le agradará más el momento íntimo entre ellos si lo complace en la cama.

''Tae, solo te estoy aflojando. ¿Acaso estás desesperado para recibirme?''

Dijo el de pelo gris, mientras una sonrisa se le aparecía en la comisura de sus labios, sus manos dejaron de entretenerse en ese mojado lugar y se posicionaron en la cintura del contrario. Tae-ui observó un momento, andaba esperando algo y eso era la virilidad del hombre que estaba a su al frente.

Como no vio movimiento, él accionó acercándose a los labios de este y darle un pequeño beso. Pero en el mismo momento, ambas bocas comenzaron a aumentarle la pasión y fluidez de sus lenguas, mientras se mezclaban entre ellas con la saliva del otro.

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Al día siguiente, se encontraba Tae-ui tirado en la cama, su cara parecía de no haber descansado lo suficiente; sus parpados pesados, sus ojeras eran notables, la cara de desanimado se veía a plena vista. A cambio, Ilay se encontraba durmiendo pacíficamente a su lado, mientras tenía su brazo abrazando la cintura del beta, su cara estaba perfecta como siempre, esas hermosas manos y aquellas uñas que podrían llamarse pequeños ''cristales''.

Passion // one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora