ㅡYa perdimos a este weon.
ㅡConfirmo, está hasta las patas por ese.. flaite..
ㅡ¡Hacela' ma' disimula po cuchurrumin!, tai hablando de mi bestia, ten cuidao.
Definitivamente si, no se explicaban como era posible que ese angelito estuviera enamorado de...
Todoroki bufó, Hanta lo tenía de la cintura, haciendo que Shoto no pudiera librarse de aquellos hermosos brazos para pegarle su merecido guate a Izuku.
ㅡEste cabro de mierda me saca canas verdes.
El bicolor le susurro a su pareja.
ㅡDe cierto modo lo entiendo, yo creo que se debería buscar a otro weon.
ㅡNo digas eso mi amorcito, que agarra papa, se pondrá peor, y tendremos que soportarlo, los dos.
Hanta baja su rostro al cuello de Shoto.
ㅡPuta el canelita.
ㅡLos oigo, saben.
Izuku se hace el ofendido mientras ve a la parejita juzgarlo.
ㅡOye pero porque este weon se flechó con... con él?
Las alarmas de la mente de Todoroki se encienden, mientras mira a Hanta le hace una señal de que no continue hablando o preguntando.
ㅡ¡Entiendanme! el culiao es medio lindo, algo excéntrico, diferente, algo ¿explosivo?, ¡No lo sé!, sigo picao por lo del montino.
ㅡQue mierda ha sido ese cambio de tema, creí que estábamos hablando sobre mi, canelita.
ㅡMierda.
Izuku se queda quieto, quiere desaparecer de la faz de la tierra, ¿Por qué le pasaba eso a él?, más encima ¡Él y su estupida bocota!
ㅡTan lindo, y tan bueno para el garabato.ㅡ Se oye una risilla del rubio cenizo, quien se ha aparecido con sus otros dos chicos. ㅡEntonces, ¿Crees que soy medio lindo?
ㅡNo, yo no fui.
ㅡ¿Qué?
Un sonoro ruido de golpe llamo la atención del trío, quienes guiaron su vista al bicolor que estaba frente a ellos.
ㅡOh, si no es nadie menos que Serito.
ㅡKats.. tiempo sin verte.
Tanto Todoroki como Izuku giran sus rostros a Hanta, quien presiente su muerte al ver las miradas tajantes que le dan.
ㅡ¿Qué?, es mi bestia de pañales, claramente lo conozco.
Shoto se ve enfadado, pero lo disimula con una sonrisa, demasiada mala. Izuku está nervioso y nadie parece notarlo, mira por lo bajo a Katsuki, quien no le ha quitado la mirada de encima.
ㅡAsí es. Ya que canelita no tiene mas que decirme nos vamos, cualquier cosa sabes cual es mi sala.
Coquetamente, Y SIN DESCARO ALGUNO se acerco a izuku, acariciándole suavemente la mejilla.
Con un peliverde en shock, y un bicolor furioso el pelinegro no tuvo nada mas que hacer que sujetar a ambos como pudo, fue así como el otro trio los dejó atrás.
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ㅡOi el culiao lindo weon, no soporté
El suspiro de colegiala enamorada se escapa de sus labios.
ㅡUy y que vai a soportar vo, tonto culiao.
Izuku, quien había estampado su rostro a la mesa, levantó la vista viendo a su compañero de clases, Monoma.
ㅡCuliao simpático, te comiste un payaso o que wea.
Monoma se sentó junto a él, porque sí, era su compañero de clases, de puesto, y de vecindario. Como una piedra en el zapato, pero mas molesto.
ㅡMaricón.
ㅡY vo'
Era el segundo recreo, el otoño comenzaba a hacerse mas helado, sopló sus manitos y se levantó para irse.
ㅡPasa maraca, pasa, pasa.
Izuku rió mientras pasaba por detrás de la silla de Monoma, se trataban mal, pero se caían bien, no tenia sentido llevarse mal con alguien que pasabas la mayoría de tu tiempo.
ㅡOye chupamedias, un rusio te andaba buscando, mas bien andaba buscando al "weon pecoso, weno pal montino" y creo que eri el único que anda llorando por un montino asi que... ojito que andai flechando canelita.
Izuku se sonrojo levemente mientras rodaba los ojos, salio del salón y fue rapidamente al segundo piso, entrando por el salón de Katsuki, y allí se encontraba él, junto con cosa uno y cosa dos.
ㅡUy, que andan fuertes los vientos.
Estaban sentados frente a frente, Katsuki y frente a él Kirishima y Kaminari. Él agarró una silla, colocándola a su lado, se sentó, ofreciendo su mano para un saludo.
ㅡSoy Izuku Midoriya, el weon obsesionado con los montinos.
Katsuki sonrió, con esa sonrisa que derretia, sus rubies brillaron intensamente.
ㅡKatsuki Bakugou, el weon medio lindo que te robo el último montino.
El rubio cenizo tomo su mano, y le dio un apretón suavemente, Izuku rió, no creyó que lo aceptara, pero lo hizo, y eso definitivamente lo había dejado flechado.
