Fall in love (BTS y tu)

Capitulo 47

Capítulo 47

Aun continuaba con mi servicio de mesera hasta el día de mañana. Hubo varias ocaciones donde tuve mareos, necesitaba ir a un doctor pero prefería quedarme a ver si el malestar se quitaba tiempo después pero...empeoro.

-Tienes que llevar esto a la siguiente mesa...¿te encuentras bien? -preguntó Qi Yi mientras me miraba preocupada.

-Tan solo es un mareo, creo que fueron los nachos de ayer. -tomo la bandeja que contenía la comida.

-Bueno, pues solo tienes que aguantar un poco mas, falta poco para que termines tu jornada. -menciona dándome ánimos. Esboce una sonrisa asintiendo mientras me dirigía a la mesa correspondiente.

La hora donde se terminaba la jornada, la sentí eterna. Me quede dormida en el suelo con la bandeja abrazada, realmente me sentía cansada y mas por los mareos que me daban cada 20 minutos.

Me desperté por un pequeño zarandeo que me dieron en los hombros. Abrí mis ojos y lo primero que vi fue el rostro de Jin.

-¿Te encuentras bien? -tallo mis ojos mientras me estiro un poco.

-Si...tan solo fue cansancio. -respondo levantándome. Mala idea. Tapo mi boca sintiendo esa ansiedad de vomitar.

-¿Te sientes bien? -volvió a preguntar mientras me sostenía de brazo. Yo asentí.

-Si...es solo que... -no termine la oración ya que la necesidad de buscar un baño se volvió mas urgente. Me aleje de el corriendo hacia el baño mas cercano arrodillándome para vomitar.

"No vuelvo a comer nachos" me decía mientras respiraba con algo de agitación. Salí del baño recargándome en las paredes.

-¿Quieres que te lleve a casa? -asentí sin pensarlo dos veces.

{...}

Volví a quedarme dormida una vez toque la cama, los mareos no paraban. Mire una que otra vez el reloj, aun faltaba para que Tae volviera a casa. Tome una que otra pastilla para calmar los mareos pero estos solo cesaban un rato.

Tiempo después de haberme quedado dormida, no se cuanto tiempo exactamente, escuche el abrir y cerrar de la puerta. Abrí un poco los ojos levantándome para ver quien había sido.

-¿Tae...? -dije apenas audible.

-Perdón, ¿te desperté? -negué con la cabeza y el se acerco para tocar mi frente con su mano- No tienes temperatura. ¿Quieres un té?

-Si. -me levante quedando sentada. Los mareos habían cesado por completo.

-Jin me dijo que te sentías mal, por eso te habías marchado primero. -menciono el desde la cocina.

-Si...perdón. -respondí bajando la cabeza.

-No tienes porque disculparte, desde la mañana te había notado rara. -me entrega la taza con el té.

-Solo eran mareos, creo yo fueron los nachos. -le doy un sorbo a la taza.

-¿Quieres algunos días de descanso? -alejo la taza de mi boca.

-No es necesario, ya no me siento tan mal. Además ya he faltado demasiado, no creo que faltar mas sea necesario. -miro el reloj, aun es temprano- Iré al centro a comprar algo, ¿me acompañas? -el asiente. Se levanta caminando hasta el armario para cambiarse de ropa.

{...}

Necesitaba alguna distracción para Tae, y que mejor distracción que llamar a uno de sus amigos.

-Enserio te lo agradezco. -digo mientras Itzel me da palmadas en el hombro.

-No es nada, para eso están las amigas. -sonríe- y, ¿cual es el plan?

-Dentro de dos días yo y Tae cumplimos un mes, y quería regalarle algo especial.

-Entiendo, ayer fue el mío, aunque no te daré detalles de lo que paso aquella noche. -reímos las dos al mismo tiempo.

Caminamos hasta una tienda de joyería, vi varios modelos para el collar y uno en especial llamo mi atención. Una nota musical y su acompañante, me gustaba. Pregunte por el precio, era barato así que decidí comprarlo.

Aun faltaba para que ellos volvieran, así que comenzamos a platicar mientras nos sentábamos en una banca que había allí.

-Tae se pondrá feliz con su regalo. -menciono ella mirando el cielo del atardecer.

-Yo tengo cierta curiosidad en saber que le regalaste tu a Jimin en su día de aniversario. -le doy un leve codazo, ella sonríe.

-Después de haber ido al cine, de regreso nos fuimos al apartamento de el. Creí haberte dicho que un día había dormido con el. -me mira.

-Lo recuerdo.

-Bien... ese día tuvimos una cierta "platica", por así decirlo, mientras charlábamos el me dio un beso, éramos novios en aquel entonces...después de ese beso, llego a otra cosa, sabrás a lo que me refiero, ayer cumplíamos un mes, ¿sabes cuál fue su regalo? -me miro con entusiasmo.

-Creo que ese era mi motivo desde un principio. -sonreí y ella también lo hizo- Ya dime, ¿cual fue la sorpresa?

-Ayer, al entrar al apartamento, le mire fijamente a los ojos, el y yo tenemos un apartamento para nosotros dos ya que quería pasar mas tiempo conmigo, llegue al grano, le dije "feliz aniversario mi amor" el también me lo dijo, sonreí feliz, el me dio una chamarra con su nombre cocido en ella. Yo tome valor y le mire a los ojos, me quede por un momento callada y finalmente le dije "Estoy embarazada". -me quede atónita y sorprendida a la vez, ¿Itzel estaba embarazada? ¿Y si...yo...?

-¡¿Embarazada?! -grite entusiasmada por la noticia.

-Si, dos semanas lo supe. -menciono ella tocando su vientre.

-¿Y qué dijo Jimin?

-Se puso feliz, me abrazo y beso, después beso mi vientre encantado por la noticia. Ahora estamos mas unidos que nunca. -esboza una sonrisa de oreja a oreja al recordar aquel momento.

-¡Felicidades! -la abrazo- Esto es sorprendente. Ya no puedo esperar a ver que será.

-Yo quiero una niña y Jimin un niño, aun no sabemos qué será ya que hasta los cinco meses podré saberlo. Mi panza crecerá conforme el tiempo pase, mis padres están de acuerdo con que Jimin se case con migo, no por esto si no porque es un buen chico y saben que me cuidara.

Sonreía mientras miraba a Itzel tocar su vientre, creo que ese es el mayor privilegio que una mujer puede tener. Jimin llego junto con Tae, el fue directo a abrazarla mientras le daba un dulce beso en los labios. La idea de que ella tendría que estar sola por un tiempo cuando ellos fueran a debutar era algo triste.

Cuando volvimos a casa, Tae entro al baño, vi la oportunidad de guardar el collar en algún lugar donde nadie se diera cuenta.

Nos metimos entre las cobijas tratando de conciliar el sueño, pero nuevamente en la madrugada volví a levantarme para ir a vomitar. Ahora pensándome lo bien, hace tres días mi periodo llego y ahora no, comencé a preocuparme, tal vez la fecha estaba incorrecta y para la siguiente semana me tocaba.

Tome un vaso de agua, pero sentí asco y no tarde en vomitarla. Tae continuaba durmiendo, no quería despertarlo pero el sonido de mi vomitando hizo que el despertara.

-¿Te encuentras bien? -menciono el sobando mi espalda. Me reincorporo quedando sentada- Tu rostro esta pálido. Te llevare a la cama. -me carga llevándome hasta nuestra cama recostándome en ella- Iré por un té.

¿Porque los mareos continuaban? ¿Que no habían cesado? Tomo la taza con el té, le doy pequeños sorbos intentado no vomitarlos.

La noche la pase en quejidos, Tae no logro conciliar el sueño ya que se la paso sobando mi estomago, me sentí culpable a la mañana siguiente ya que por mi culpa ninguno de los dos fue a trabajar.