Tu mirada.Todo empezó a finales de octubre del año pasado, asistía a clases para finalizar las pruebas del último periodo escolar, establecieron una jornada desde las 12:30 p.m hasta las 4:30 p.m, un poco menos atareada que de costumbre.
Siendo un día Martes en la mañana organicé mi rutina escolar como todos los días, guardé en mi mochila solo lo esencial y una pequeña agenda para anotar pendientes sin más me puse mi uniforme acomodando las capas de mi falda, me reflejaba en el espejo perfeccionando los últimos detalles, dejé mi cabello preferiblemente suelto, no me gustaba llevarlo atado a menos que estuviera en casa, coloqué mis medias largas acompañadas de zapatos negros, retoqué mi cabello y coloqué un poco de mi loción favorita en la nuca, muñecas y hombros; tomé mi mochila y me encaminé a la escuela, después de un trayecto un poco largo, bajo del auto, despido a mi padre con un beso en la mejilla para luego entrar a la escuela, saludé al portero con un gesto y empecé a subir las escaleras que guiaban a las aulas del segundo piso.Estando a poco de acabar se me hace ver el espectro de un chico ubicado justo por donde pasaría, levantó mi mirada hacía el sin saber que me chocaría con la suya provocando una conexión visual poco difícil de romper, sus ojos con aquel magnetismo que atraía a la mía se sentía como si el mundo dejara de girar y el tiempo se congelara en tan solo un instante...
Él luce alto, ojos rasgados, piel trigueña y un cabello largo ubicado en librito, sus labios rosados y esa mirada penetrante que se cruzaba con la mía por pura casualidad.
Éramos él y yo conectados en esa mirada que dentro de poco se esfumó.
¿ Nos vamos? - dijo una chica abrazando a aquél chico por la espalda.
No esperé mucho para retirar mi mirada e irme caminando.
- Conversación -
¿ La conoces ? - Pregúnta aquella chica al chico.
Aquel chico queda en silencio unos segundos para luego responder.
No, mm que decías?
Preguntaba si ya nos podríamos ir. - hace un gesto mirando al chico un poco extrañada.
Ah..claro - dice sin despegar su mirada.
La chica con la cual estaba acompañado notó cómo esté no dejaba de verme tornándose un poco molesta.
Mientras caminaba rumbo a mi aula sentí como aquella mirada se fijaba en mi cuerpo, como una mariposa posando una flor, aceleré mis pasos y entré al aula dejando atrás el anterior suceso.
Inicié mi jornada de clases como habitualmente hasta las 2:30 p.m, físicamente estaba en clases de matemáticas y mentalmente estaba completamente perdida en aquella mirada, no podía simplemente ignorar eso que sentí, me parece haberlo visto en algún lado, tal vez es solo una impresión, no sé quién era aquel pero algo me recordaba, me perdí en aquellos pensamientos, tratando de buscar respuestas de manera inconsciente logró recordar su mirada, aquella se marca en mi mente que no da cabida para algo más.
- suena la campana del recreo sacándome de todos esos pensamientos.
Joder.. - maldije -
Me levanté de mi asiento, tomé mi mochila y esperé a que Anne acabara de copiar lo que estaba escrito en la pizarra.
Anne es mi mejor amiga y la única que tengo, suelo ser reservada y poco social aunque media escuela me conozca, Anne es la única que no le importa mi condición social no se deja llevar por lo que ve y aunque no pertenezcamos al mismo estrato mi familia la adopta como si lo fuese, Anne tiene una personalidad atrevida, es extrovertida, es dulce con quien la merece, ella luce con cabello lacio, delgada y con un cuerpazo para envidiar, labios súper carnosos tornados de rosa pálido y unos ojazos que joder...complementan muy bien su piel canela no tan oscura.
Anne acaba y guarda sus cosas, sin más salimos y nos encaminamos a la cafetería.
¿ se te antoja algo de comer ?
Nono, todo en orden, no te preocupes. - respondí amablemente -
Ella asiente y se sienta en una de las mesas, tomó asiento junto a ella mientras que esta me sonríe, charlamos un poco.
- Anne observa su alrededor hasta fijarse en algo o en alguien -
Mierda pero guapo, a que no, anda mira para allá. - dice haciendo un gesto con su cabeza para que observe a esa dirección.
- miro disimuladamente para donde indica y giro mi cabeza de vuelta a ella -
Que está guapo, ¿ no?
Un poco.
¡¿Un poco?! No suelo decir esto pero si que está guapo, se te empañaron los lentes o que putas?
A pues perdón, pero disimula un poco, ¿no puedes?
Pues no, para que tengo ojos, yo miro para donde quiera.
- Reímos -
Aquel chico voltea repetidas veces hacía nuestra mesa tirándole miradas coquetas a Anne a lo cual ella corresponde.
Deslicé mi mirada hacía la biblioteca, ahí estaba aquel chico con el cual me encontré en las escaleras hace dos horas, ¿Que hace aquí? - me preguntaba.
Retiré mi mirada sintiendo un cosquilleo que recorría mi cuerpo, dicen que las miradas no se cruzan por casualidad, cuando lo hacen simplemente algo buscan pero yo no buscaba nada, ¿por qué se hace difícil dirigir mi mirada hacía otro lado cuando esté está cerca?, su mirada se posa en mí nuevamente atrayendo de a poco la mía, caí en el magnetismo de su mirada.
¿Podría el percibir esto?
¿Por qué el causar tanto alboroto?
Desearía saber por qué es inevitable mirarlo y cuál es la respuesta de esté cosquilleo que inquieta mi cuerpo.
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~ Un día a la vez ~
Romance𝗣𝗿ó𝗹𝗼𝗴𝗼: Fueron enemigos sin darse cuenta que cada uno era la debilidad del otro, como es que dos adolescentes transcurso a vías diferentes lográn ser tan cercanos. Mirar es amar y contigo lo he aprendido.. ¿Tus ojos? Algo imposible de olvidar...