𝙈𝙚𝙚𝙩𝙞𝙣𝙜

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AHHHHH

¿QUÉ HAS HECHO DRACO IDIOTA MALFOY?

Si su rostro no fuera tan importante en su trabajo, ya lo hubiera golpeado su cabeza contra algo por tomar decisiones tan impulsivas.

Caminó por los pasillos de la empresa con la carpeta en la mano y se detuvo ante la pared con fotografías de los rostros de los actores que trabajaban en la empresa. Estaban acomodados por el número de ganancias, algunos rostros eran conocidos para él, ya que eran sus amigos o había trabajado con ellas.

Él es de los mejores, pero hay una persona sobre él y la única que le importa por el momento. Harry Potter. Un antifaz completamente negro cubría la mitad parte superior de su rostro, resaltando esos ojos verdes que parecían llamarte.

Ni siquiera grababan el mismo contenido, así que nunca se pensó en la posibilidad de trabajar juntos y tampoco le prestó atención.

Potter se dedicaba principalmente a las transmisiones en vivo, de él solo, donde le iba muy bien. Pero para obtener algunas ganancias más estables, grababa de vez en cuando videos para subirlos después a la plataforma.

Y aunque su contenido es meramente homosexual, tenía fans femeninas. Al parecer, las mujeres amaban la forma en la que el castaño trataba a sus parejas...

Draco quería aventarse del balcón de su departamento. Cuando aceptó el trabajo no se detuvo a leer hasta que llegó a casa.

POTTER SERÍA QUIÉN SE LA METIERA.

No, definitivamente no estaba preparado mentalmente para entregar su florcita. Pero ya había aceptado.

Y supo que no había marcha atrás cuando su mánager llegó con una bolsa de objetos que necesitaría. Cortesía de Zabini.

—Draco, necesitas irte preparando.

Malfoy sentía que no podía respirar cuando vio los objetos en la bolsa. Objetos que estuvieron por un tiempo en la bolsa porque no los quería ni ver.

Pero tenía el tiempo encima y pronto se vería con Potter para organizar las cosas.

—Vamos, Malfoy. Debes ser profesional- se dio ánimos a sí mismo cuando vio la bolsa.

Se acercó y la tomó con la punta de los dedos, alejándola de su cuerpo como si de una bolsa de basura se tratase, y cerrando sus ojitos.

Vació la bolsa sobre su cama. Un dildo pequeño, un enema, algunas notas y lubricante.

Por lo menos sabía que Zabini y su mánager se preocupaban por su anito.

Normalmente, en sus trabajos anteriores con mujeres, se dedicaba a ver el contenido de las actrices con las que trabajaría para conocer la forma en la que trabajaban y poder sacar todo el potencial, y aunque le parecía raro, se dio la tarea de investigar cosas que le ayudarían a él como bottom y de ver el contenido de Potter.

Le dio clic a una de las pocas transmisiones en vivo resubidas. Sus ojos verdes resaltaban bajo el antifaz negro que siempre llevaba en sus transmisiones y la camisa blanca se ajustaba a su trabajado pecho.

El hombre utilizaba un tono tranquilo para explicar la dinámica del día y para contestar comentarios.

Draco sintió sus orejas y mejillas calientes cuando las voz agitada y las respiraciones de Potter empezaron a salir de las bocinas de su computador.

Había sujetado un vibrador al gran pene erecto, haciéndolo temblar y que el líquido preseminal empezara a salir de la punta enrojecida. El nivel aumentaba dependiendo de las donaciones, pero su público parecía gustarle que sufriera, haciendo que el nivel bajara por momentos y subiera de golpe de un momento a otro.

Gotas de sudor escurrían por el rostro y el cuello de Harry, cayendo sobre su, ahora descubierto, pecho.

Malfoy salió del video con prisa cuando una conocida sensación empezó a formarse en su vientre y en su pene. Se dio unas palmaditas con ambas manos en las mejillas sonrojadas en un intento de calmarse.

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Era de noche y el viento frío corría, congelando lo poco que su cubrebocas y abrigo no lograba tapar. Abrió la puerta del restaurante y se apresuró a entrar. Un suspiro se escapó de sus labios cuando sintió el calor del lugar.

Preguntó por la reservación que Potter había hecho y lo llevaron hasta la mesa reservada. Agradeció que estuviera un poco alejada de los demás comensales y de la entrada. Era un actor, porno, pero era un actor, y era fácil ser reconocido, además de que tampoco quería que descubrieran a Potter, el moreno ocultaba su identidad para mantener su privacidad.

Ordenó una bebida caliente para mantener el calor de su cuerpo mientras esperaba al moreno. La comida la ordenaría cuando Potter llegara.

Le molestaba la impuntualidad, pero Zabini le mandaba mensajes diciéndole que no podía irse y tenía que esperar.

Se preguntaba si la forma en la que iba vestido era demasiado formal u ostentoso, pero rápidamente borró esa idea de su cabeza, porque aunque siempre cubría su rostro para evitar que lo reconocieran, le gustaba verse atractivo o bonito aún sin mostrar su rostro.

—¿Malfoy?— Una voz gruesa llamando su apellido hizo que quitara la vista de su celular.

—Sí...

—Soy Harry, Harry Potter— extendió la mano en forma de saludo en cuanto se sentó, mano que Draco no tardó en tomar— Lamento llegar tarde.

El par de ojos verdes eran aún más llamativos sin el antifaz. Sus cejas eran gruesas, su mandíbula marcada y su cabello algo despeinado le daban un aspecto rebelde.

—No te preocupes.

—¿Te parece si ordenamos primero?

Ambos ordenaron bajo la intensa mirada de la mesera. Era poco común ver a dos hombres atractivos juntos, sobre todo del tipo de bellezas contrastantes. Harry tenía era más grande de altura y corporalmente, con un aire rebelde, todo lo contrario a Malfoy, quien era más delgado y con una apariencia más delicada, elegante.

—Eres mucho más lindo en persona— comentó Harry una vez que la mesera se retiró.

—Gr-gracias— respondió torpemente. Malfoy siempre sabía responder a estos comentarios de forma natural, estaba en su personalidad, pero esta vez había algo diferente que lo hacía ponerse tímido.

𝘼𝙙𝙪𝙡𝙩 𝘾𝙤𝙣𝙩𝙚𝙣𝙩 [Harco]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora