Alice.
Me desperté por la alarma para ir a clases, otra vez. Me levanté, me dirigí al baño para hacer mis necesidades y me fui a la cocina a desayunar. Cuando terminé, volví a mi habitación a buscar la ropa que me voy a poner. Antes de salir de casa, cogí todas mis pertenencias y me dirigí al instituto.
Mientras os hablaré de mi. Me llamo Alice, pero mis amigos me llaman Lice. Tengo 18 años. Soy muy sociable y cuando llego a coger mucha confianza, soy una persona muy extrovertida. Tengo un hermano mayor de 19 años llamado Carter, que pasamos la mayor parte del día jodiéndonos, pero nos llevamos gratamente genial y nos queremos a más no poder. Es un hermano muy sobreprotector y celoso, pero esta contigo siempre que lo necesitas.
Ya había llegado al colegio y estaba en las taquillas esperando a mis dos mejores amigas, Phoe y Kate. Saqué los libros que me tocaban las tres primeras horas, y metí lo que no iba a necesitar.
Como aún no llegaban, les esperé sentada en las escaleras del aparcamiento donde me encontré con mi novio Taylor.
-Hola, mi amor.-Le saludé con un beso en los labios.
-¿Qué haces aquí sola, princesa?-Me preguntó devolviendome el beso.
-Esperando a Phoe y a Kate.-Le contesté.
-Vale, pues me quedo aquí contigo a esperarlas.-Me dice dandome un beso en la mejilla y yo me sonrojo.
Taylor es un chico muy dulce. El problema que muchas veces solemos tener ambos, son los celos. Es un chico muy gracioso y vacilón, pero le quiero.
Mientras esperabamos, nos encontrabamos haciendo el tonto juntos, hasta que por fin aparecieron.
-¿Qué horas son estas de llegar?-Grité en un tono de burla mirandolas mal ya que estaban aún lejos de nosotros.
-Phoe, que es una lenta en vestirse.- Responde Kate mirando mal a Phoe.
Cuando ya se encontraban a nuestro lado, nos fuimos los cuatro a nuestras respectivas clases.
