Estoy enfadado, no puedo engatusar ese tipo de cosas.
a menos que me beses.
Luo Mio no pudo evitar reir suavemente, agarrando la ropa del hombre con una expresion de impotencia en su cara.
"Todavía es un niño, no me interesan los niños, sólo me gusta..."
Apretó los fuertes músculos del pecho bajo sus palmas, sus palabras eran ambiguas.
"Fuerte y muy valiente, y aún más guapo en apariencia, como tú".
Ello, que de repente se burló.
El corazón le latía con fuerza.
Como saltando.
Su cara también se puso roja, y parecía muy feliz.
Luo Miao se tapó la boca y soltó una risita.
Qué lindo.
Tan lindo.
"Tú, tú, no creas que voy a dejarte ir. No se te permite decir esas cosas a otros en el futuro, ¿me escuchaste?"
Ello deliberadamente hosco, tratando de mostrar su majestad.
Es solo Luo Mio con un filtro puesto.
Como lo ves, como lo encuentras lindo.
No tiene absolutamente nada que ver con la majestuosidad.
Cuando la otra parte estaba a punto de enfadarse, cambió de tema.
"¿Por qué estás aquí?"
Inconscientemente, volvió a revolverse el pelo, y vio con éxito que la punta de la oreja de Ello también estaba roja.
Ello se movió incómodo.
"Mi madre y mi padre me dijeron que volviera a cenar, y te espere".
Luo Miao levantó las cejas.
"El tío no me invitó, ¿verdad?"
La expresión de Ello no cambió y condujo a Luo Mio al aerodeslizador.
"No sabes cocinar. Si no te miro, no comerás. Te llevaré allí".
Luo Mio: "..."
Lo has dicho muy bien, ¿has considerado mis sentimientos?
¡Este tipo de hombre heterosexual no puede encontrar novio!
"Hehe..." El sistema que ha estado en silencio todo el tiempo hizo dos muecas.
Luo Mio también lo ignoró selectivamente.
Obedientemente siguió a Ello a la enorme villa señorial.
Al acercarse a la puerta, se oyeron risas alegres.
Eran las voces de la madre y el padre de Arlo que él había oído antes, y las de los otros dos.
Una más madura y otra algo más dulce.
Deberían ser un sireno de mediana edad y un pez joven.
Luo Mio pensó.
Y así es.
En el sofá beige de estilo europeo, estaba sentado un desconocido con el pelo rosa y cian.
El que daba la espalda era lavanda.
Eran la madre y el padre de Arlo, que él había conocido.
Es sólo que la foto de hoy parece un poco...
Ligeramente familiar.
El chico de pelo rosa vio al alto y guapo Ello.
Se levantó rápidamente y exclamó de alegría.
