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El chico nuevo.

Después de lo que paso en la cafetería, salí corriendo hacia el baño de mujeres con Megpoid siguiéndome preocupada y gritando mi nombre, estaba intentando no llorar, no quería enfrente de Megpoid pero las lágrimas estaban saliendo sin aviso. Cuando llegue al baño me quite el suéter de la escuela que estaba lleno de comida y me quede solo con la camisa de la escuela, luego me di cuenta que habían algunas manchas -en mi falda pero las logre quitar, por suerte no había nada en mis medias o zapatos, al final ella entró y me vio llorando enfrente del lavabo, se acercó a mí y me ayudo a quitar los restos de comida de mi suéter. El día pasó rápido, iba caminando a mi casa y escuchaba música con mis audífonos mientras pateaba cada roca pequeña que encontraba en la calle. Al llegar, mis padres estaban con sus "amigos" riendo y tomando, al verme todos se callaron y mis padres me miraron molestos.

¿Qué no sabes tocar niña estúpida?–Dijo mi madre molesta mientras todas las personas presentes me miraban, algunos de los hombres que se encontraban ahí me miraban de pies a cabeza, devorándome por completo en sus mentes, me sentí totalmente asqueada.

Lo-lo siento, mamá. –Dije agachando la cabeza.

– ¡Lárgate a tu cuarto Rin!–Obedecí lo que mi madre me ordenó, caminé hacia las escaleras para dirigirme a mi cuarto, pero un señor de los que estaba ahí me tomó del brazo, me asusté.

– ¿Por qué no la dejamos aquí? Es muy hermosa. –Dijo viéndome de pies a cabeza casi desnudándome con la vista, eso me repugnó.

Suéltala, y déjala que se vaya a su cuarto. – Dijo mi padre sin voltear a verme mientras los demás seguían tomando y mi madre encendía un cigarrillo.

Pero...– El tipo no terminó de hablar porque mi padre le grito.

– ¡Que la sueltes!–Gritó mi padre, el tipo le obedeció y yo salí corriendo a mi habitación. Me encerré en mi habitación y le coloque el seguro, no quería que alguien de sus amigos o incluso mi padre venga y me haga algo. Fui al baño de mi cuarto, abrí las llaves de la regadera y empecé a quitarme la ropa y la ropa interior, me observe en el espejo que había ahí, note que mis pechos y trasero habían crecido un poco, pero algo no estaba bien...mis brazos, tenía cortadas en ellos, cada vez que me ponía mal, me hacía mucho daño y después las tenía que ocultar con pulseras, camisetas de manga larga o incluso maquillaje cuando cicatrizan, suspiré y me metí a la ducha. Después de unos minutos terminé de ducharme, me envolví en una toalla y me dirigí a mi cuarto para colocarme mi ropa interior y luego mi pijama, un suave pijama rosa con conejitos blancos en ella, muy de niña pequeña. Me acosté en mi cama colocándome unas cuantas cobijas encima y le di play a mi música hasta quedarme completamente dormida.

Al día siguiente, hice mi rutina de siempre, bañarme, ponerme el uniforme con los zapatos y medias, cepillarme el cabello y los dientes, tomar mi mochila, mi barra energética e irme. Hoy decidí no llevarme el suéter del uniforme ya que no lo lave, solo lo deje en la ropa sucia y se me olvido por completo lavarlo, la ventaja era que hoy hacia calor. Caminé hacia la escuela, y escuché unos gritos chillones atrás mío, eran de Megpoid.

¡Ohayo Rin!–Dijo acercándose mi corriendo con una gran sonrisa. – Casualmente iba caminando por tu casa pero ya te habías ido, por lo que tuve que correr para alcanzarte e irnos juntas.

Ohayo Megpoid. –Dije seria. – ¿Cómo sabes dónde vivo?–Pregunté viéndola sin dejar de caminar.

Vivo a tres casas de la tuya. –Dijo sonriendo. – ¡Casi somos vecinas!– Lo que faltaba...

Ah. –Dije cortante, no entiendo como ella sigue a mi lado si soy una persona tan cortante y seria, la verdad nunca he tenido amigas, y es la primera vez que tengo una amiga tan sonriente y extrovertida como ella. Al llegar a la escuela, nos dirigimos al salón y el profesor Yukiteru, ya estaba en el salón pero por suerte la clase todavía no había comenzado, le pedimos pasar y nos dejó entrar, el grupito de Miku nos veía con sus caras de zorras necesitadas de atención que son mientras se reían, trío de hienas.

Clase, hoy de nuevo tenemos a otro alumno nuevo, adelante. – Dijo Kiyoteru, comenzando la clase, un chico de tez blanca, ojos azules claros, cabello rubio agarrado en una pequeña colita de caballo entro al salón, captó toda mi atención y la verdad que era exageradamente guapo, pero pude ver como Miku también estaba interesada por él, hasta se quedó atónita por su belleza, a decir verdad, parecía dios griego, un total Adonis.

Buenos días, mi nombre es Len Kagamine y...–Toda la clase me volteo a ver y eso interrumpió a Len, me quede impresionada, se apellidaba igual que yo y jamás había conocido a alguien con mi mismo apellido.

¡¿Kagamine?!–Preguntaron todos al unísono mientras comenzaba el alboroto, me empezaron a hacer preguntas si él era mi hermano o algún pariente mío, a lo cual respondía que no súper apenada.

¡CLASE, SILENCIO, BASTA!–Gritó Kiyoteru, todos volvimos a darle la atención a Len, que seguía parado con su mochila en la mano.

Mmm...Pues yo no soy pariente de esa chica...tal vez solo nos apellidamos igual.–Dijo soltando una leve risita.

Gracias Len, ve a sentarte donde quieras y escoge bien ya que ese será tu asiento todo el año.–Len empezó a mirar toda la clase, hasta que se sentó enfrente de mí y aun lado de Miku, voltee a donde Gumi ya que me estaba intentando decir algo, leía sus labios diciendo "Esta bien bueno" a lo que yo me sonroje. Me quede viendo a Len todo el rato, en un momento me volteó a ver y me sonrió, yo desvíe la mirada sonrojada. La clase pasó rápido, ya era hora de descanso, por fin. Fui a la cafetería con Megpoid, tome una charola y fui por mi comida. Cuando elegimos nuestra comida nos dirigimos a una mesa, por suerte Miku no me hizo nada esta vez. Estaba comiendo y entonces pasó el chico nuevo enfrente de nosotras, me le quede mirando un poco embobada, mierda, mierda, es muy atractivo.

Se nota que te gustó~ – Dijo Gumi viéndome con una ceja levantada y de forma burlona, yo me puse rojísima negando con la cabeza.

No...¿A mí? ¿Gustarme? Claro que no...Y además él nunca se fijaría en mí. –Dije triste mientras con el tenedor tomaba mi arroz.– A él le deben gustar chicas bonitas y de buen cuerpo, de seguro la estúpida arrastrada de Miku ya le echó el ojo también, no puedo competir contra ella.– Me dirigí el tenedor con arroz hacia mi boca y empecé a comer, un poco desanimada.

No seas tonta Rin, tu eres muy bonita, siento que terminaran juntos, lo presiento.–Dijo Megpoid muy segura ¿Cómo esta tan segura de eso?- Es más, me voy a hacer su amiga en este momento y haré que se enamoré de ti.-Dijo mientras se paraba y se iba corriendo a buscarlo y no me dejo pararla, iba ir tras ella pero era muy tarde, ya la había perdido, aproveché y me comí su arroz.

Llego unos minutos después, estaba sonriendo, como de costumbre, fruncí el ceño y ella se sentó.

¡Heee! ¡¿Y mi arroz?!–Dijo buscándolo en el piso y debajo del plato.

¿Qué le fuiste a decir?–Dije molesta y cruzándome de brazos. – En serio, Megpoid, que vergüenza.

Etto...es mi amigo., hablamos de muchas cosas y tiene mucho en común contigo, mañana se va a juntar con nosotras. –Dijo sonriendo, ¿Cosas en común? Pues ¿Qué tanto hablaron en 5 minutos?

¿Qué cosas en común?– Pregunté curiosa, quería saber que le dijo.

Le gusta el tipo de música que tu escuchas así toda rara y dar, es algo frío y cortante al principio, pero después que lo vas conociendo mas es divertido y amigable...– Me contó muchas cosas de él, hablo con el 5 minutos y ya sabía su tipo de sangre, pero en verdad tenía muchas cosas en común conmigo.

¿Me...me atrae?

–KM♥

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