Silenciosa, cautelosa, misteriosa, creemos que es injusta, que es cruel, casi siempre nos enojamos con sus actos.
Ronda las calles, buscando a su siguiente víctima, se lleva lo que más queremos en este mundo, se lleva a un ser querido, a nosotros mismos.
Una fría noche paseaba por las calles de una pequeña cuidada, va lentamente, se toma su tiempo, encuentra la calle que buscaba, encuentra la casa que buscaba, se queda pensando, hasta que decide actuar.
Entra con facilidad, entra en la habitación, lo ve dormir, se acerca y con suavidad se lo lleva.
