Deku, el Cascanueces [DekuKatsu]

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El entusiasmo que trae consigo la víspera navideña se podía sentir con bastante intensidad entre las paredes del complejo de dormitorios dentro la prestigiosa academia de héroes y es que la razón por la cual el salón 1A no podía dejar de transmitir su felicidad, era porque sería su primera navidad celebrando como un bonito grupo de amigos.

En el interior se podía percibir la buena vibra y la magia navideña en cada gesto feliz de los estudiantes quienes días previos se habían organizado para crear el tan conocido ambiente navideño, no solo se cenaría deliciosas comidas sino que también habría intercambio de regalos, decoraciones por cada rincón y trajes conmemorativos a juego.

Todos reunidos en sala común, cada aspirante realizaba su tarea encomendada, como por ejemplo, Sato, Hagakure, Ojiro y Koda se encargaban de la cena, Uraraka, Asui y Aoyama decoraban el árbol, Momo se encargaba de diseñar los trajes navideños y Kyoka los repartía a cada uno junto con Mina. El resto de jóvenes se habían distribuido para decorar cada zona del salón principal.

Los murmullos alegres, las risas y las historias tradicionales de cada uno creaban una amistosa convivencia, les hacía pensar en la bonita experiencia que iban a compartir. Todos participaban con pasión y regocijo, todos menos uno.

Katsuki Bakugo era la excepción, estaba recostado sobre uno de los sillones con un semblante aburrido y cansado, su actitud tan indiferente causaba sorpresa en la mayoría de sus conocidos.

—Hombre, no puedo creer que incluso en estas fechas te comportes tan gruñón—

Comentó Kirishima mientras sostenía unas guirnaldas que Denki colocaba sobre los bordes de las paredes.

—¿Te sorprende? Si Bakugo fuera un personaje representativo de la navidad sería Ebenezer Scrooge o el grinch, por lo feo...—

Acotó Denki con un tono de burla. Katsuki gira en su dirección y deforma su rostro en una mueca disgustada.

—Te estoy escuchando, estúpido... y a comparación de ustedes no exagero con la estúpida festividad..para mi es un día como cualquier otro...—

Volvió a acomodarse en su sitio y se cruzó de brazos, imaginó que se había escuchado con mucho sentido pero solo logra una risilla del otro rubio

—Espera... te faltó decir pamplinas...—

Denki usó una voz más rasposa simulando a un abuelo cascarrabias y provocó una carcajada a la mayoría de sus compañeros.

Bakugo chasqueó la lengua, harto de todos ellos y su maldita magia navideña. De verdad ¿Que tenía de bueno la navidad? Hace muchos años que no se emociona por la fecha, desde hace un tiempo que dejó de significar algo para él.

Denki sigue bromeando con su nula emoción por la celebración hasta que Katsuki deja escapar un gruñido que es la señal para que el rubio baje de las escaleras donde está subido y se oculte tras Eijiro.

—¿Por qué no te unes a nosotros, Bakugo? Verás que es más divertido compartir entre amigos..—

Kirishima intentó tomar el brazo del pelicenizo pero él lo evitó de forma grosera, el pelirrojo sonríe y niega con la cabeza en desaprobación, acostumbrado a su temperamento.

—Ni te esfuerces, Kirishima... Bakugo es un amargado que no entiende lo que significa el espíritu navideño—

El rubio le sacó la lengua y Katsuki solo chasquea la lengua con fastidio. Izuku observó aquello con una sutil sonrisa mientras se acercaba a Denki para entregarle más adornos.

—No siempre fue así. Recuerdo que cuando éramos niños, Kacchan siempre era de los primeros que participaba en las actividades por las fiestas, hasta una vez armamos un muñeco de nieve afuera de la escuela, le agradaba probar el chocolate y los dulces....aunque solo los picosos...—