Ven a jugar conmigo

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Niña de sonrisa ingenua,
no acudas a su llamado.
Por favor, no corras como yegua.
Haz como si no hubieses escuchado.

¿Cariño, qué te han hecho?
Tengo que quitarte ese mal hecho.
¡Ocultaré tus recuerdos!
Y también a los de los cerdos.

Será por un breve tiempo.
Pero quiero que sepas que no miento.
A pesar de que aún no lo entiendes,
ve y disfruta con los duendes.

¡Abracadabra!
El hechizo se ha roto y la pequeña creció.
Descubrió al demonio que la amenazaba
llevándose un gran desprecio.

Una gran guerra ha comenzado.
—¡No me toquen! —fue lo que dijo.
Todas las noches se la pasa sollozando,
cree que su memoria la maldijo.

Una mancha roja abunda en su piel,
siempre la cubre para no ser descubierta.
Teme dejar la puerta abierta
y qué la toquen como miel.

Insano Donde viven las historias. Descúbrelo ahora