33- "CUMPLEAÑOS FELIZ"

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Anabelle Collins.

  Mi día había llegado, al fin el momento que tanto anhelaba llego.

¡Es mi cumpleaños, número dieciocho!

Estos días, habían sido una total locura, entre mis últimos parciales del semestre, las salidas raras de Christopher y las cosas en casa. Casi no había tenido tiempo para pensar en ella, pero si me preguntan, la verdad es que no me apetecía hacer nada más que pasar el día con Chris, mis amigos y mi familia.

Al despertar, baje en pijama a la cocina, dónde me encontré a Imelda con una torta de chocolate y una vela con el número dieciocho.

__¡Ay por dios!__chille de la alergia.__¡Gracias, gracias, gracias!

__¡Feliz cumpleaños Anne!__. Recibí sus felicitaciones, mientras me abrazaba con una sola mano. Ya que la otra estaba sosteniendo la torta.

__Gracias Imelda.

__Te la hice de chocolate, porque alguien me dijo que era tu favorito.

__Sí, lo es. ¡Muchas gracias!__. Le agradecí,mientras ella encendía las velas.

__Muy bien, sopla las velas y pide tu primer deseo de cumpleaños.

   Al ver las velas, lo único que pude pensar era en Chris. Lo quería todo con él, asi que mi deseo fue estar juntos por siempre.

  Aunque, pensándolo bien. ¿Dónde está él?

  Sople las velas, y procedí a partir dos rebanadas para probar esa divinura junto con la hermosa mujer que la preparo.

  Partí un trozo con el tenedor y al llevarlo a mi boca, sentí mil sensaciones, esa torta estaba súper buena.

__¡Está buenísima!__dije, relamiendo mis labios__. Necesito que me enseñes a hacerla.

  Imelda me sonrió, mientras servía dos vasos de jugo para acompañar.

__Tenemos que programar esa clase entonces__, bromeó sonriente__. Me alegro que te haya gusto Anne.

__Obvio que me encantó. Gracias Imelda.

  Ambas comimos el pastel, mientras veíamos el noticiero. Cuando terminamos ayude a Imelda a lavar lo que habíamos ensuciado, y no se me pasó desapercibido preguntarle por Chris, últimamente había estado muy distante, salía y no me decía y hasta lo había notado algo nervioso y preocupado.

__Oye Imelda__, se giró para verme__. No sabes a dónde fue Chris?

__Me dijo que iría a la oficina y que no sabe cuándo volvería__. Y sin más, salió de la cocina como si se le estuviera olvidando algo.

Yo me quedé viendo la puerta con el ceño fruncido, y cuando volví a girarme, apareció ella con un enorme ramo de flores, y un peluche gigante. Deje caer el plato que tenía en las manos, y casi lo parto, pero sin importarme corrí hacia a ella con una sonrisa de oreja a oreja.

__Casi se me olvidaba, Chris dejo esto para ti Anne.

__Que lindo de su parte, me encantan las margaritas__. Olí las flores y tome la nota que estaba en ellas.

"Feliz cumpleaños amor de mi alma, hoy que cumples tus dieciocho quiero recordarte que siempre serás mía jajaja, te amo Collins, nos vemos en la noche amor"

Sonreí como una tonta al leer la nota, tomé el oso de peluche y me senté con el en la encimera de la cocina, mientras Imelda terminaba de lavar los platos.

  Estuvimos un rato hablando, cuando el timbre sonó y yo fui a ver quién era.

  Pero que buena sorpresa me lleve al abrirla, ahí paradas estaban Fannie y Nessa con unas bolsas de regalos, no esperarán mucho saltaron sobre mi, y todas caímos al suelo inmersas en risas y chillidos.

__¡FELIZ CUMPLEAÑOS ANNE!__gritaron las dos, apenas volvimos en si, después de la caída.

__Gracias chicas, las quiero mucho.

__Y nosotras a ti linda, es por eso que hemos venido a buscarte__. Dijo Nessa, muy emocionada.

__Me encanta, y adónde vamos?__.Pregunte.

__Vamos a qué nos consientan bebé, iremos al spa, reserve una cita para todo el día.

__Enserio?__me alegraba poder pasar el día con dos de mis chicas favoritas__. ¡Ay chicas gracias!

__No hay que agradecer Anne, así que muévete a arreglarte.

  Sin darle respuesta a Nessa, cerré la puerta y las tres subimos a mi habitación para poder alistarme y salir con ellas a nuestro día de spa.


Christopher Davis.

   Me había dolido en el alma, no poder ver a Anne despertar y darle un beso de feliz cumpleaños. Pero debía salir para entregarle el dinerito a los dichosos amigos de Fermín.

  Estaba en mi oficina esperando al hijo del viejo jefe del cartel, mi firma estaba técnicamente sola, puesto que era sábado y solo estaban algunos de mis abogados atendiendo casos de extrema urgencia, además Fannie estaba con Vanessa buscando a Anne para llevarla al Spa, me convenía tenerla ocupada, así no se pondría a sacar conclusiones acertadas de mi aptitud con ella.

  Estaba mirando por la ventana, cuando sin tocar ni pedir permiso. Alguien entro a mí oficina, me imaginé quién podría ser, ya que tenía una hora esperando a dicho personaje.

  Lo que me sorprendió al voltear, fue que todas mis especulaciones sobre aquel individuo, estaban erradas y lo que más mr impacto fue quien era el personaje.

___¡Buenos días, Davis!

»¡Maldición! Esto debe ser una broma.«

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Nota de la escritora: Hola de nuevo, volvimos con este capítulo algo cortito. Pero es que falta muy poco para que llegue el fin, por eso iré por fragmentos para hacer de esta lectura un tanto más emocionante.😁

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