Míos, no importa qué

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Sergio estaba que se hacía vapor del enojo y los celos enfermizos, recibió a sus compañeros con ojos que no demostraban ser bienvenidos del todo.

- ¿Y Özil? - Preguntó Luka.

- ¿Qué te importa? - Recibió de respuesta por parte de Sergio.

- Ni le hagas caso, está ahí durmiendo. - Se metió Ángel para responderle a su compañero y amigo.

Luka pasó por al lado de Sergio sin querer hablarle y se acostó en su cama. Sergio miraba a Ángel con una expresión de querer asesinarlo, y Ángel le respondía la mirada con una expresión confundida.

El baño de la habitación estaba poblado de olor a sudor y a intimidad, pero los chicos le dieron poca importancia.

Esa noche la pasaron en la habitación, no tenían ganas de salir y soportar afición y culés. Quedaban dos días para que se devuelvan a Madrid y a los entrenamientos.

A la mañana siguiente, bajaron a desayunar como los días anteriores. Ramos y Modrić seguían aplicando el contacto cero y Di María y Özil ya se estaban cansando de aquello.

Al mediodía, decidieron almorzar en el mismo restaurante del hotel, al ser los últimos días, no les daba tantas ganas de salir. Su almuerzo fue interrumpido porque Modrić se levantó de la mesa.

- Ya vuelvo, iré al baño.

Detrás de él salió Ramos, y obviamente con una cara poco simpática.

El más bajo de adentró a un cubículo, y antes de cerrarlo, un largo pie trabó la puerta. Sergio entró, y se encerró con su compañero de equipo dentro.

Luka lo miró con disgusto en lo que trataba de estar lo más distante del más alto en ese pequeño espacio.

- ¿Cuándo vas a parar de ignorarme, chiquillo? - Preguntó mientras apoyaba su mano en la barbilla del contrario con fuerza.

- Pusti me. Misliš da je to velika stvar, ali ti si idiot. - apartó la mano ajena de su rostro, pero su mano fue apretada por la mano contraria.

- Deja de hablar así, habla en español y deja la estupidez.

- Isti tip koji me je došao zaključati u kupaonicu priča o tome da ne radim gluposti.

- Bueno, si no vas a hablar en español, yo lo haré. - Se aclaró la garganta y acorraló al otro contra la pared. - Que me dejes tiempo para aclarar mis pensamientos no significa que me tengas que hacer la ley de hielo, ¿Escuchaste, idiota? Y además, no te creas que me puedes reemplazar, porque sé que todavía piensas en mí, y a que de seguro dejaste que ese estúpido de Di María te folle, como la perra entregada que eres.

- ¿Me vas a dejar orinar?

- ¿Ahora sí hablas español?

- Y, si no me dejas orinar, pues claro.

- ¿Quién dijo que no podías mear si yo estoy aquí?

- ¿Acaso tú eres idiota? - Lo miró con odio, luego de eso se dio la vuelta, se bajó el pantalón y se puso a orinar.
- Qué pelotudo que sos, para la próxima te meo la espalda.

- ¡Pero esto ya es el colmo! ¡Ahora te crees argentino también!

Sergio estaba enloqueciendo de celos. Esperó a que el otro termine de hacer lo que estaba haciendo para volver a hacer que lo mire.

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⏰ Última actualización: Mar 17 ⏰

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¿A quién eliges? |• Mesut Özil, Sergio Ramos & Luka ModrićDonde viven las historias. Descúbrelo ahora