Bajo las sombras [ Asakaru ]

Capitulo 014

─── ∙ 「カルマ」 ∙ ───

Sería poco aclamar que el tiempo se fue volando, después de la conversación que conllevó a esa pequeña prueba de voces de alfas en mi, dónde no cedi ante Nagisa y mucho menos ante Terasaka, esa prueba nos limito bastante las posibilidades y ciertamente es un alivio, las voces de alto grado no son muy comunes, siempre debo estar alerta pero las posibilidades de encontrarme con ese problema son bastante escasas.

Nos sumergimos en un tema totalmente diferente al que habíamos abordado minutos atrás, repasamos la planificación de nuestros actos en este altercado que llevaremos a cabo, el objetivo principal es encontrar a esa persona que probablemente carga un pecado en su alma, para eso debemos conversar con la mayor cantidad de individuos posibles, si alguno muestra rechazo por las prendas de oro que todos estamos obligados a portar, tendremos un sospechoso.

La familia de Gakushū también fue invitada a ese acto al ellos ser un linaje vampirico bastante antiguo, el señor Asano no iba a presentarse por tener que atender otros asuntos y Gakushū no tenía ganas de asistir a un evento tan discriminatorio y excesivamente clasista, prefirió ayudarnos con el trabajo que Koro había encontrado, si salíamos victoriosos antes de la dichosa fiesta pensaría si iba a asistir. Es gracioso pensar que al final fue obligado a ir, por lo que Nagisa me informa ya los Asano se comunicaron con la familia principal del evento indicando la presencia de Shu, motivado a eso, el grupo Jelavic le ha dado parte de su personal a Gakushū para que pueda dar una buena fachada, él no puede llegar solo a un evento de ese tipo.

De eso estuvieron hablando mientras yo me encontraba inconsciente, si no hubiera tenido esa pelea con Gakushū o si hubiera aceptado sus disculpas estaría con ellos y no con el jefe andrógino que tengo a mi lado. Me siento un poco infantil en estos momentos, actúe muy poco profesional, hice exactamente lo que Gakushū hizo cuando rompió el pacto que teníamos entre ambos.

No tengo moral para quejarme de la planificación, no estuve presente y se tomaron las decisiones a mis espaldas. Mi papel en todo esto será el de un regalo, los Jelavic van a fingir formar una alianza con los Asano y yo participaré cómo moneda de intercambio, por eso mi vestimenta es incluso más llamativa que la del mismo Nagisa y por eso tampoco buscaron ocultar mi cabello, su color singular servirá para llamar la atención de los otros peces gordos.

Mi papel es sencillo, solo debo seguir la corriente y no verme arrogante en ningún momento, esto último si no es sencillo, es tedioso. Me están pidiendo que actúe como una propiedad y que mantenga la cabeza gacha, agradezco que tengo que actuar así con alguien a quien le tengo aprecio y no con un asqueroso extraño que cuyas intenciones no conozco, quizás exagero pero estoy acostumbrado a la paranoia.

—Estamos llegando

El silencio que se había implantado desde hace varios minutos, fue perturbado por la voz de Terasaka, ante eso comenzamos a agrupar los papeles con el informe de la misión, se les fueron entregados a Nagisa y este con un movimiento de manos los hizo desaparecer en medio de una energía celeste. Era de esperarse que el manejara magia también, su hipnosis debe venir de sus conjuros.

Revisamos que nuestra imagen estuviera bien presentable, nos aseguramos de no dejar ningún documento incriminatorio por si llegan a revirar el vehículo, la precaución jamás estará de más y menos cuando se trata con gente peligrosa. El auto se fue adentrando en un gran jardín principal, que más que un jardín parece una pequeña plaza, mis ojos se perdieron entre la vegetación que tan cuidada se ve, las flores rojas vibrantes resaltan entre todos los arbustos de hojas oscuras casi tocando el guinda, una especie de rojo muy oscuro.