-¡Todo el mundo quieto y nadie saldrá herido! - El novato desenfunda su rifle y se pone en marcha el robo. Desenfundo mi escopeta y le apunto al guardia.
-¡Las manos donde las vea! ¡Vamos! - Lo derribo de un golpe con la culata cuando intenta sacar su arma.
-¡Quieto desgraciado! - replico para que entienda que debe cooperar o su vida llegará a su fin.
-¡Lobo! Controla a la multitud. Zack, ven conmigo y trae los explosivos. Novato, no te vueles la mano y ayuda a Lobo con la multitud. - Kyle había planificado cuidadosamente el golpe. Una sucursal de un banco pequeña, no habría complicaciones pero la ganancia obviamente dejaba mucho que desear. Todos sabíamos lo que debíamos hacer, era cuestión de escuchar a Kyle y mantener la calma. Lo que si, estoy un poco nervioso por el novato, su primo, es nuevo en esto y todavía no logra mantener la calma ante estas situaciones...
-¡Vamos, vamos! ¡Al suelo! ¡Que nadie se mueva! - los gritos del novato denotan su nerviosismo, puedo como le tiemblan las manos ya que el rifle tambalea. Por favor que no haga ninguna estupidez... Kyle y Zack están trabajando en la bóveda. Se supone que romperían con el taladro las primeras cerraduras, que según el tipo de bóveda, un modelo viejo, eran las más fáciles de romper pero luego venían unas más resistentes que el taladro no podría romper, para esas usaríamos explosivos livianos. Una vez abierta la bóveda, pondríamos el dinero en los bolsos y nos marcharíamos a pie una cuadra hacia el callejón de la calle Matthews donde esperaba nuestro vehículo de fuga.
-¡Quieto! ¡No te hagas el héroe muchacho! - Un joven intentaba sonar la alarma debajo del escritorio. ¿Acaso no se le ocurrió que sabríamos que había una alarma debajo de su escritorio? - Vamos, al suelo. No tienes porqué morir hoy. No me obligues a matarte. - Sorprendentemente, no veo temor en su rostro, parece... furioso, sé que terminará por hacer sonar la alarma pero, es muy joven para que le arrebate la vida, además... Nunca presioné el gatillo, no empezaría hoy por un joven arrogante con ganas de ser el héroe de la historia. Mejor que viva, siempre y cuando no de complicaciones hasta que tengamos el dinero...
Escucho el estruendo de la explosión. ¡Bingo! dinero fácil.
-¡Tenemos el dinero! ¡Nos largamos! - Kyle y Zack salen con cuatro bolsos llenos, me tienden uno a mí y otro al novato. El muchacho terminó por hacer sonar la alarma. Ah... Maldito idiota...
-Bien, no hay tiempo que perder. En marcha. - Zack comienza a caminar hacia la salida, seguido de Kyle y del novato, al final de la fila voy yo.
-¡Dense prisa muchachos! ¡La policía se aproxima! - Los ruidos de sirenas se hacen cada vez más audibles y con ellos, nuestra ventaja va desapareciendo. Los bolsos son más pesados de lo que pensamos, al menos, si salimos con vida de esto, disfrutaremos un buen botín. La gente se nos queda viendo, nuestras máscaras protegen nuestra identidad por lo que no representan una amenaza. Gracias a dios que no hay ningún uniformado patrullando por aquí, complicaría las cosas... Al fin llegamos al callejón, la Escalade de escape nos esperaba con Víctor, nuestro chofer.
-¿Estamos todos? - Pregunta Víc luego de que guardamos los bolsos en el baúl de la camioneta y tomamos asiento dentro de ella.
-Sí, estamos todos. Arranca, vamos, vamos, vamos. Ya están pisándonos los talones. Vamos. - Zack parece más nervioso de lo usual. ¿Qué le pasa?
-Ey Zack, hermano ¿Qué sucede? Nunca estás tan nervioso por esto... - Pregunto mirándolo con cara de preocupado.
-No es nada... Un pedazo de escombro se me incrusto en el tobillo, quiero llegar al refugio cuanto antes, me está matando. - Dice esbozando una sonrisa como para calmarme.
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Camino A La Cima
Novela JuvenilEl fin justifica los medios, eso cree Christian y así rige su vida. Un joven criminal decide que ya es hora de dejar el negocio delictivo y opta por desenvolverse en el ámbito empresarial, con tan solo veinticinco años, él comienza a emprender su ca...