The Blakk's And The Shane's [Bajoterra]

12

Tad continuaba su camino, se sentía perdido al estar tan solo en aquel oscuro pasillo, él y sólo él en la inmensa oscuridad.

Le recordaba un poco cuando exploró las cavernas profundas, vio como una oportunidad el tener un acceso directo a la mayor fuente de energía oscura en todo Bajoterra, hubiera sido un gran plan el retornar y simplemente poner a funcionar la maquinaria de su padre de no ser que descubrió que le estaba haciendo daño a su babosa y la verdad, no quería arriesgar su carta maestra por un capricho, no valía la pena.

Aunque en el fondo, lo hacía porque la quería. Era su única amiga después de todo.

Un absurdo recuerdo vino a su mente, cuando aún estaba con su madre, ambos solían cantar canciones de sus películas favoritas. Era de esos pocos bonitos recuerdos que traía consigo desde su partida. Le daba gracia que, aunque la voz de su madre fuese cautivadora, ella prefería escucharle a él.

—Feel the light~ Shining like the stars tonight~ —Taraeó, la ventaja de andar solo es que nadie le iba a oir, además, ya que no estaba Flautista, le tocaba distraerse consigo mismo— Remember what we forgot, I know it's a long shot~

Tad sabía que las cosas que hizo no fueron buenas, quizás quería llenar aquel vacio que sentía, destruir el mundo que le arruinó su vida siquiera antes de nacer, la enfermedad de su mamá, lo inútil de su padre y él, siendo una mezcla de todas esas pequeñas imperfecciones. Ni siquiera podía pensar que fue un hijo deseado, le partía el alma.

Por el otro lado, la de cabellos morados estaba exhausta de tanto correr, pues sus alas seguían atadas y no podía volar. Por momentos sentía que estaba afónica, pues llevaba cantando desde prácticamente todo el día, más su respiración irregular no le ayudaba. Pero debía continuar si quería llegar al final.

But we're bringing it all back, we're bringing it all back~

Mientras trataba de recuperar aire, a sus oídos llegó un zumbido que le hizo alzar la mirada rápidamente. Mirando a su alrededor tratando de localizar el origen del sonido.

—You and I can have it all tonight~ —Con ambas manos alrededor de su boca, cantó—... so let's bring it back it to light —Y esperó una respuesta.

Al otro lado, Tad creyó oir algo, más sólo pensó que era parte de su imaginación. Escucho que de repente una segunda voz le acompaño en la siguiente parte de la canción, y frenó.

—Now we have another chance to fly~ —Taraeó un poco más alto, guardó silencio, esperando el eco.

—Another chance to make it right~ —Flautista siguió la estrofa.

Ambos reconocieron el sonido del otro. Tad siguió su parte mientras que Flautista completaba la estrofa, creando asi un dueto. Ambos retomaron sus carreras para llegar con el otro, guiándose si se escuchaban más o menos conforme avanzaban.

No eran los únicos que se escuchaban, pues el grupo que estaba disperso en la caverna escucharon el cantar, aunque gracias al eco no distinguían al dueño de voz o letra en concreto, pero sí el sonido, y tomando en cuenta las palabras dichas anteriormente por la enigma, todos corrieron tras aquella voz que les guiaba a la entrada de la última caverna.

Tad y Flautista fueron los primeros en llegar, pero había algo que les separaba: un gran cañon que no se le permitía ver qué tan profundo podía llegar.

Flautista trató de avanzar, más un tirón le hizo retroceder.

—¡Ya fue suficiente niñita! —Blakk le apuntó con su metralladora mientras que con su otro mano tiraba de la telaraña que sujetaba las alas de Flautista.

—¡Suéltala! —Grito Tad.

—Tú no tienes nada que decirme —Escupió Blakk.

—Tú tampoco —Tad sacó su resortera y apuntó a su padre. Flautista forcejeaba desde su lugar, eso de ser prisionera no era lo suyo—, aléjate de ella.

Tad escuchó un par de lanzadoras detrás de su espalda, volteó de reojo  y notó a Goon con las lanzadoras de Pronto y Kord.

—Ya baja esa porquería niño —Hablo Goon, Tad lentamente alzó sus manos en defensa.

El pelirrojo no alcanzaba a localizar al Shane o al resto del equipo, momentáneamente dependía de si mismo, aunque no sabía qué tanto.

—Podemos conseguir tanto poder como queramos, sólo tienes que colaborar —Trato de negociar Blakk, sin aflojar su agarre con Flautista—, tú eres mi hijo ¿no? Entonces sabes bien lo que te conviene aquí. Los Shane's no han traido más que problemas hacia nosotros, podemos acabarlos hoy de una vez por todas con tu ayuda.

—El único que ha traído problemas aquí eres tú —Hablo Tad, enojado—. Yo no soy como tu.

—¿Crees que no sé de los estragos que causaste cuando llegaste aquí? Parecías un niño haciendo rabietas. Niegas ser como yo, pero la verdad es que si lo eres.

—Te equivocas —Interrumpio Flautista— él es mucho mejor que tú, imbecil.

—Me dejas sin opciones niña.

Blakk la tomo por la cabeza, la acercó al borde del acantilado y la golpeo contra el suelo. Goon empujo con una patada al chico hacia el borde igualmente. El par de jovenes se miraron, tratando de leerle la mente al otro, Flautista sonrió, pues si había una opción más.

—¿Qué tan profundo crees que sea?

Tad sonrió al escuchar aquella frase, se dio la vuelta y miró a Goon.

—No te atreverías ¿O si? —Exclamó Goon

Tad hizo un gesto de despedida y cayó al abismo. Más atrás, Flautista con una maniobra logro safarse rápidamente de Blakk y también se lanzó a la boca del lobo.

El Blakk mayor no lo quiso creer, pues no consideró lo tonto que podría ser su progenitor. A Goon le dio exactamente igual, nada más le importaba la babosa. Desde la oscuridad y con un vuelo veloz el par de jovenes emergieron desde las oscuridad con Tad siendo el más euforico, Flautista se limitó a reirse.

Con el impulso del vuelo Tad fue directo hacia su padre quien le esperaba con lanzadora en mano. El chico sacó su resortera y lanzó una de las canicas derecho al cañon tapandolo, en lo que su padre intentó abrir fuego su ametralladora explotó  haciendole retroceder. Tad se le abalanzo con el envión del vuelo y le pateó haciendole caer.

Flautista por otro lado fue con Goon, quien disparó las babosas que tenía a su disposición. La chica le esquivó con facilidad y se abalanzó contra él.

A Goon ya le daba igual si debía estar cuerda o no, solto las lanzadoras y le arremetió un golpe con energía oscura hacia ella quien apenas pudo esquivar, en defensa se alejó de él y con un fuerte cantar le hizo retroceder.

Una de las ventajas de Flautista es que sus alas le ayudaban a potenciar sus ondas, pero a su vez, su gran tamaño eran una desventaja. Goon la tomó por unas de estas y trato de doblarlas, Flautista chilló del dolor y trato de sacárselo de encima. Se detestaban el uno al otro al no poder controlarse.

Tad por otro lado veía como su padre se levantaba del suelo nuevamente, tenía que admitir que no era fácil derribarlo, pero no parecía cansarse de ponerse de pie nuevamente una y otra vez. Un trio de lanzadoras se escucharon cargarse a espaldas de su padre, reconoció el sonido.

—Ya se acabó ¿no te parece? —Habló Eli— Usted no parece entenderlo.

Blakk fruncio el ceño, aquella caverna y babosa eran su última carta de triunfo en su vida y no iba a permitir que un adolescente le ganara... otra vez. Que vergüenza.