Welcome to my Life [EN CORRECCIÓN]

Capítulo 22

Me enfurecía con cada segundo que pasaba, pero trataba de controlarme, entonces dije -"Bueno, yo solo venía a hablar con Annie pero veo que está ocupada con su novio, con el cual me dijo que había terminado"-, ella no tenía idea de que decir, sin embargo él dijo apresuradamente -"Si lo hicimos, pero hace poco hemos vuelto"- no podía creerlo, no podía creer que haya sido tan idiota, no podía entender por qué me mintió, entonces dije -"¿A sí?, pues ese tiempo en el que tú no estuviste el que estuvo con ella fui yo. Yo fui su novio de plástico el poco tiempo que terminaron"- él estaba enfurecido y preguntó -"Annie ¿Tienes algo que decir?"-, su respiración se entrecortaba, podía notarlo por su cuello, y como a cada segundo remojaba sus labios, entonces por fin dijo -"George espera adentro un segundo, hablaré con Peter"-, raramente él idiota obedeció e ingresó cerrando la puerta. Yo tapaba mi boca reteniendo un furioso llanto, así que exploté -"No puedo creer que me hayas mentido, ¡Todo este maldito tiempo Annie!"- ella exigía -"¡¿Quieres calmarte?! No grites"-, me tranquilicé y dije -"Escúchame bien, no quiero saber de ti nunca más en mi vida. . . lo que hiciste es. . . es repugnante Annie, jamás creí que ¡Tú! Eras capaz de hacer algo así ¿Me oyes?, jamás"-. No le di tiempo de hablar y entré furioso a mi departamento, tal vez tenía alguna justificación pero no estaba apto para escucharla, sentía que iba a enloquecer pero tuve que entrar y tomar mi cabeza sentado en mi sofá para volver a reflexionar.

La Annie que yo conocía no sería capaz de hacer algo así, nunca lo haría, y mucho menos si me ama como decía amarme, era increíble para mí y para los que en realidad la conocen. Pensaba en la reacción de Brenda y en la de Jerry, moría de ganas de desahogarme con ellos y simplemente no podía ni salir de mi apartamento sin toparme con ella que por minutos estuvo afuera de mi puerta gritando -"¡Peter! ¡Peter por favor escúchame! ¡Te lo suplico!"-, sin detenerse. No quería escucharla, porque sabía que si la escuchaba le creería, después de todo, estaba enamorado de ella, y cuando te enamoras de alguien, a ese alguien le creerás todo lo que te diga, hasta la mentira más estúpida, se la creería solo porque la amaba.

Desperté por los golpes que daba alguien en mi puerta, en un principio creí que sería Annie pero no creo que se haya quedado todo el día allí. Ya era de noche y desperté un poco cansado, avancé a la puerta y miré para ver quién. Solo veía una cabellera rubia frente a mi puerta y una sonrisa que no quería desaparecer. Esos labios que a cualquiera le dan ganas de morder, marcados por un labial rojo suave. Abrí la puerta y me refregaba la cara completa, ella asustada preguntó -"Perdón, ¿Te desperté?. . ."- moví la cabeza diciendo no, mientras tenía una de mis manos en la cintura entonces dijo otra vez -"Bueno es que yo. . . yo solo. . . quería saber de ti y bueno mi hermano. . . mi hermano me aconsejó venir entonces. . ."- no dejé que terminara porque sabía lo nerviosa que estaba y para callarla, tomé su cara con ambas manos y la besé, no sabía porque lo hice pero ella respondió a mi beso como si lo único que también quería era besarme. La tomé de las piernas y la aferré a mi cuerpo levantándola y le dije -"No importa porque estás aquí. . . quédate conmigo esta noche. . . te necesito esta noche conmigo, aunque sea la última"-, sonrió y siguió besándome, cerré la puerta y la llevé a mi cuarto.

Quisiera decir que no pasó nada pero me estaría engañando a mí mismo. Había hecho justo lo que Jake me dijo que no hiciera, estaba engañándome una y otra vez, pero me encantaba estar con ella, ¡La quería maldita sea!, pero deseaba no quererla, al parecer la amaba ¿O tal vez no?, confusiones me invadían en mis sueños y por más que quería no podía evitarlo. Mi estúpida mente me decía "Si te enamoraste de las dos, pues quédate con la que te robo el corazón primero, porque si en realidad amaras a la segunda chica. . . a la primera ya la hubieses olvidado hace mucho tiempo", una reflexión con lógica, coherente y con un sentido que era reconocible.

Necesitaba destruir todo esto, necesitaba dejar que Alice hiciera su vida de una maldita vez y dejarla en paz, así que me levanté primero que ella y me marché a la universidad. Le dejé una nota que decía "Te dejé comida en el horno. Iba tarde a la universidad. . . Michael", no sabía si la había leído pero mientras caminaba hacia el salón me llamó y me dijo -"No acostumbras a dejar que Me levante sola, siempre me levanto yo primero"-, yo reí y dije -"Bueno, como me dijiste que hoy no tenías clases, no quise despertarte"-. Su respiración se sentía en el teléfono y entonces dijo -"¿Michael?. . ."-, a lo que respondí -"Dime"-, respiró profundo, como aparentando un suspiro y dijo -"¿Qué es esto?"-. No sabía que responder, y tenía pensado decirle la verdad pero no me atrevía a hacerle daño de nuevo. A veces todo empieza con un beso pero termina con un golpe, y este era uno de esos casos, algo que no quería pero que de una u otra forma iba a pasar, entonces dije -"No lo sé. . ."-.

Como ya iba tarde tuve que caminar más rápido pero para responderle me detuve afuera del salón. No había nadie allí, y sin embargo me sentía incómodo. Mis compañeros miraban por la ventana que estaba afuera y que aún no entraba, por lo que tuve que decirle a Alice -"Escucha Alice, ¿Podemos hablar después?, es que voy tarde a clases y no quiero que no me dejen pasar"-, ella decía que "Sí" repetidas veces, arrepentida y sintiéndose muy imprudente pero yo la tranquilizaba diciendo -"No te preocupes, tranquila. . . hablamos después, adiós"-, colgué y reía de la forma en la que se disculpaba mientras entraba a clases.

Fueron casi dos horas de clases en las que no pude quitarme de la cabeza la mirada de Annie durante toda la clase, era imposible negarle mis ojos, mi atención, sabiendo que no quería seguir pensando en que ella hizo todo esto.

Salía del salón dispuesto a irme, riendo mientras hablaba con Alice quien vendría a buscarme, me detuve solo porque vi a Annie parada en frente mío con la cara ahogada de nostalgia. La miré y mi risa desapareció, mi risa se volvió odio y de pronto todo lo bueno que pensaba se consumía en mi irá, en mi maldito dolor otra vez, en lo estúpido que había sido y en lo que me diría. -"Peter necesito hablar contigo por favor. . ."-, reí con sarcasmo y respondí -"¿Qué parte de "No quiero saber de ti nunca más en mi vida" no entendiste?"-, me marchaba para entrar al salón pero tomó mi brazo y dijo -"¡Por favor escúchame!"-, me volteó rápidamente y yo exhausto de todo le dije -"¡¿Qué?!"- en tono duro, no tan fuerte para no llamar la atención pero de igual forma se asustó al ver mi reacción, entonces dijo -"Te juro por lo que más quieras que no te he mentido. . ."- la interrumpí y dije -"No jures en vano"- pero ella me detuvo de nuevo y dijo -"¡Escúchame ¿Sí?!. . . cada segundo que pasaba contigo era hermoso, y me encantaba, pero no podía estar contigo e intenté alejarme pero no pude. . ."-, no me gustaba interrumpirla, pero lo hice -"¡¿Por qué?!"-, me miró, respiró profundo sin decir nada, entonces agregué -"¡¿Por qué rayos tiene que ser tan complicado?! Si quieres estar con alguien se lo dices y ya, ¡¿Por qué no me dijiste que no querías estar conmigo?! ¡¿Por qué?!"- me miró con tristeza, con mucha tristeza, una mirada que no podía ignorar porque me consumía por dentro con solo mirarla, la amaba y si seguía mirando a sus ojos como lo estaba haciendo, no podría controlarme, eso estaba claro, pero al final me dio una respuesta -"Porque te amo. . ."-.