MIDORIYA SHINDEN 25

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Pocas cosas eran tan satisfactorias como la venganza bien aplicada. La mayoría de personas tienen en la mente que la venganza es mala pero en ciertos casos, como lo era el actual, se consideraría justicia poética , una retribución merecida por un comportamiento altamente cuestionable. Katsuki bakugou estaba sufriendo las consecuencias de su propia estupidez pues se estaba retorciendo en el suelo tras una descarga eléctrica computada por la anteriormente silenciosa Sanae Hibiki, no era secreto para nadie que Bakugou era una mala persona en términos generales, aunque lo que en realidad pocos sabían era que su particularidad era la causante de ésto, por lo tanto básicamente era alguien que no tenía la capacidad física, emocional y mental para controlar sus acciones así que lo de ser malo era debatible. ¿Con quién? La verdad a nadie le importaba, pues ni el propio Bakugou lo sabía así que se podía decir que no había motivos para dudar de que Bakugou estaba escrito con "B" de "Basura de persona".

—Maldita bruja!— Gruñó Bakugou en el piso de la casa de Sanae.

—Oh, espera, creo que he escuchado mal, ¿Podrías ser tan amable de repetir eso último?— Dijo Sanae fingiendo ser alguna clase de dama británica de la aristocracia.

—Dije que eras una... (¡Descarga!)... Ahhhhhrrrggg!—

—Caballero debe aprender a comportarse, por si no lo sabía, los modales hacen al hombre— dijo Sanae tomando una taza de té mientras levantaba el meñique con elegancia. Todo mientras sostenía un control remoto en su mano libre y Bakugou sufría la fuerza de la electricidad.

—Eres una....— Dijo Bakugou apretando los dientes con rabia.

—Ehp-p-p, te recuerdo que si tienes una oportunidad es por mí así que será mejor que empieces a hablar con propiedad o de lo contrario te ganarás un saludable y conciso shock eléctrico.

Bakugou gruñó y luego sonrió de una forma aterradora para los estándares generales. Tomó una tetera en la mesa y preguntó —¿Puedo servirle un poco más de té... Maldit- digo señorita?

—Oh cuánta caballerosidad. Me encantaría—  dijo Sanae acercando su taza a la tetera que Bakugou sostenía torpemente además de parecer que iba a romper su asa por la forma en la que apretaba la mano.

Bakugou sirvió el té en la taza de la chica la cual se rió de él, lo que solo lo enfureció más.

Mientras Sanae se mofaba del rubio cenizo un "bip" dió la indicación de que un proceso se había terminado.

—Creo que tu bebida está lista!—  dijo Sanae tomando el contenido dentro de una especie de microondas y vertiendo su contenido en una taza del conjunto que ella misma estaba usando.

—¿Gusta usted acompañarme a beber el té, caballero?— preguntó la chica sonando Totalmente burlona.

Bakugou tenía un tic en el ojo y tuvo que responder con un "sería un placer" tomando asiento mientras Sanae le entregaba la bebida.

El olor del té era extraño y algo conocido pero definitivamente nada apetitoso. Bakugou puso una mueca de asco cuando lo acercó a su rostro y vió a Sanae para preguntar —¿Qué es esto?—

—Es una bebida que definitivamente te ayudará con tu problema así que bébelo— ordenó la chica.

Bakugou vió la taza y con toda su voluntad bebió el contenido y justo antes de tragar casi lo escupió pero Sanae lo reprendió.

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⏰ Última actualización: Dec 25, 2023 ⏰

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