Capítulo único.

2.3K 195 8
                                    





Últimamente, JungKook había notado ciertas cosas, especialmente durante el "PERMISSION TO DANCE On Stage", donde quedó impresionado por la nueva masa muscular de su hyung. Aunque JiMin le había dicho que ahora estaba enfocado en ganar músculo y no solo mantenerlo, fue en el escenario donde JungKook pudo apreciar el cambio de manera visible por primera vez. No entró en pánico porque claramente debía mantener las apariencias enfrente de las cámaras, sin embargo por dentro era otro asunto. No podía dejar de pensar en eso de vez en cuando.

JiMin lucía caliente, sí. Era muy caliente.

Tal vez demasiado para su pobre concentración.

En el escenario pudo mantenerse a raya con sus impulsos —o al menos lo menos evidente posible—, pero tan pronto bajaron al backstage fue más difícil. Estando rodeados del staff ayudándoles con los micrófonos y vestuario, JungKook inquieto vagó la mirada por los distintos miembros agotados pero su atención se centró en JiMin.

Estaba sudado, con los largos cabellos oscuros pegados a su rostro y la agitación evidente en el movimiento de su pecho. Tragó saliva al ver cómo Park se quitaba la chaqueta caqui, revelando sus brazos tonificados desnudos bajo la camiseta blanca sin mangas; ahora más musculosos debido al reciente trabajo en el gimnasio. Mentiría descaradamente si dijera que no le gustaba en absoluto ese cambio.

Ama a su apreciado novio de todas formas, eso era indiscutible, pero este nuevo aspecto lo sintió como un ataque personal.

JiMin lo atrapó mirándolo, y el calor subió rápidamente a su rostro al ver la sonrisa sutil del mayor. Volteó la cabeza, escapando de la intensidad de esos pequeños ojos que parecían reducirlo. Podía sentir que aún lo observaban, y sabía perfectamente de quién se trataba. Ahora, sintiéndose más inquieto, deseaba que la chica del staff terminara pronto su trabajo para poder ir a casa y descansar, quizás obteniendo algo más que solo dormir.

No obstante, no obtuvo nada de lo que sus anhelos más profundos sugerían, ya que tan pronto como ambos tocaron la cama, se quedaron dormidos debido a su agotamiento evidente. La tensión se acumuló en los días siguientes, con escasas oportunidades de pasar tiempo a solas. Sus únicas opciones eran estar acompañados por los demás chicos practicando la coreografía del reciente sencillo o reflexionando sobre los próximos singles que vendrían.

JungKook llegó a un punto de frustración, donde incluso un roce durante los ensayos hacía que su piel anhelara un contacto más intenso. Y aunque lanzaba miraditas sugerentes, JiMin aún no respondía a sus deseos.

Nunca pensó que tanto músculo podría gustarle tanto.

Quería hacer tantas cosas con ellos… sí.

Este era uno de esos días en lo que se la habían pasado más en el salón de prácticas, terminando exhaustos luego de un arduo trabajo y NamJoon cerca de la noche decidió que sería mejor volver a casa para descansar lo adecuado. El resto estuvo de acuerdo, levantando sus pulgares desde sus posiciones en el suelo.

El miembro más joven del grupo optó por quedarse a solas con JiMin, observando cómo TaeHyung se iba rodeando los hombros de un YoonGi que se quejaba por la cercanía, seguido por HoSeok con Jin y, por último, el líder. Se dio cuenta de que faltaban dos personas y no dudó en preguntar si se quedarían. JungKook, anticipándose a cualquier movimiento de su querido hyung, lo tomó del brazo y le ofreció a Nam una sonrisa llena de falsa inocencia.

«Nosotros nos quedaremos un rato más, iremos detrás de ustedes, no se preocupen.»

NamJoon los observó brevemente, lanzando su mirada típica cuando quería que se comportaran, y JungKook no tuvo problema en asentir como si nada. JiMin a su lado lucía más confundido que otra cosa, pero no dijo nada. Tan pronto la puerta se cerró y quedaron solos en el lugar, JungKook se volvió hacia él. JiMin arqueó una ceja en el momento en que sus ojos se encontraron, retirando un mechón de cabello oscuro de su frente.

Hard Guy┃JiKook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora