La hija del presidente

33. Regreso

𝐏𝐨𝐯: 𝐁𝐞𝐜𝐤𝐲

Si Freen supiera lo doloroso que es para mí tener que separarme de ella, pero no quiero que le pase nada, esa persona me demostró que puede hacerle daño a mi chica y que en esto no puedo cometer errores.

Prefiero este dolor a qué por mi culpa la pierda para siempre, no puedo confiar en nadie, la casa blanca tiene a diario a tantas personas, cualquier persona sería un cómplice de ese secuestrador, por eso vine hasta aquí para que alguien en quien si confío me ayude a investigar, pero mientras esto ocurre mi chica debe pensar que en verdad no la amo.

Eso hará que la persona que me está amenazando crea que en verdad caí rendida a sus requerimientos.

-Bien, Becky, está persona podrá tener muchos contactos, pero no cuenta con que no todos se venden y con que no todos se quedan con la boca cerrada-

-¿Eso que significa, Ricardo?-

-Becky, para buscar contactos se necesita hablar con mucha gente y no todos dicen que si, siempre están los que rechazan el ofrecimiento y están los que por miedo después de hacer los tratos hablan como periquitos-

-Necesito proteger a mi novia y que el peligro que corre o yo pueda correr sea nulo-

-Tranquila me encargaré de eso, por ahora nadie más debe saber, hasta no estar claros de quién es el traidor dentro de la Casa Blanca-

Ricardo me ayudaría a conseguir con el cumplable, y lo principal con el autor intectual de todo esto, alguien está orquestrando esto así que debe pagar-

Comenzó a pasar el tiempo, una semana, dos semanas, cada vez encontrarme con Ricardo era ultra secreto, aún en París no sabíamos quién podría estar detras de todo, paso un mes y dos meses, las llamadas de mis padres ya eran reclamos y Irin vino dos veces a París, no podía ponerla en riesgo a ella.

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5 meses después

Hoy me desperté sin ánimos, mis días sin ella son un asco, la necesito, necesito a mi Freen, mi mimada, sus ojitos viéndome cada mañana al despertar.

Y mi día empeoró.

Abrí las redes sociales y veo por todos lados que mi chica se comprometió con Heng. No puede ser mi chica no me pudo hacer eso.

Mi corazón se me rompió al ver cómo Freen estaba en todos los medios del país como la novia del hijo del magnate.

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Regrese al país, ya no era necesario estar fuera, Freen y yo no hemos hablado más. Y ahora tiene novio, pero fui yo quien la dejó y ella está manejando su dolor de una manera diferente.

Ella me llamó muchas veces, no podía hacer que la maten diciéndole que la amo, Freen es muy transparente y la persona descubriría de inmediato todo, lo que no entiendo es que se enredo con ese Heng.

Mi amiga Irin me ha insistido para salir, me ha interrogado mil veces al respecto y solo le he mentido y ella lo sabe, pero que puedo hacer si la persona que está detrás de todo esto puede tener hasta mis guardaespaldas comprados, porque así fue que me secuestraron la primera vez.

-Hija, ¿No te gustó la comida?- Mi mamá preguntó después de verme mirar el plato sin probar un solo bocado y es que desde que llegué no quiero nada, ya no puedo vivir sin ella.

-No tengo hambre mamá, es solo eso-

-Rebecca, no entiendo que les pasó a ti y a Freen, pero cuando decidas pedir ayuda sabes que moveré las montañas si es posible para que vuelvas a sonreír-

-Lo sé, papá, pero está lucha es solo mía. Estaré bien. Solo es cuestión de aguantar un poco más-

-Bueno, mi princesa, espero que pronto vuelvas a vivir porque no lo estás haciendo- Decía mi mamá