4. Instinto

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Todos los seres humanos tenemos un instinto animal que nos llama en momentos de peligro, en momentos de desesperación, más cuando estás perdido en medio de un bosque en la nada, es cuando el miedo te atrapa y juega contigo.

Y eso sucedía con Hawk, mala suerte que tenía con su amiga Rose, había sido demasiado imprudente como para salir corriendo al bosque con su caballo y solo porque alguien grito en el mercado "Hoy descuento del 50% en zapatos en la aldea cercana". Ahora él estaba perdido en el bosque buscándola, cuando el sol estaba por ocultarse, se juró en silencio que si la encuentra y sale vivo de esa, la va a amarrar con una correa para evitar que salga corriendo nuevamente.

Entonces a la distancia pudo observar un corsé blanco acercándose, sonrió al descubrir que era el caballo de Rose y galopó a su encuentro, pero... el caballo venía solo, parecía asustado, agitado, parece que había visto a una bestia salvaje.

— Rose en qué problema te has metido — dijo al aire Hawk con clara preocupación en su rostro. Pensó en dejar los caballos y descansar, pero su conciencia no lo dejaría, necesitaba proteger a su amiga sin importar nada. — Muéstrame dónde está Rose.

El caballo relinchó, comenzó a correr a una dirección al norte, siendo seguido por Hawk de cerca, sentía que iba más y más lejos del límite del pueblo, pero aun así cuando el aire frío golpeó su rostro reaccionó rápidamente.

Era primavera ¿Por qué hacía frío? Comenzó a andar con más cuidado en ese bosque para poder salir en un claro que mostraba un imponente castillo al fondo, tragó grueso, definitivamente eso es un problema.

Lo que lo sorprendió verdaderamente era la escarcha que caía del cielo y le daba la bienvenida al lugar, todo dónde sus ojos lograron ver estaba cubierto de nieve, nieve blanca. Aunque grandes rosales le abrían el paso por un sendero, probablemente allí estaba su amiga.

El caballo de Rose se negó a seguir el camino igual que el suyo.

— Vamos, ya estamos cerca de Rose — las palabras salieron entrecortadas de sus labios, el frío abrazaba todo su cuerpo en un claro ejemplo de querer congelarlo y había logrado su objetivo. Tiritaba en su lugar aun queriendo encontrar a su amiga, si el caballo se negaba a seguir, él iría sin el caballo, se bajó de Snow, su caballo blanco. — Ya volveré

Les dedico una sonrisa para adentrarse en el sendero de rosas, todas esas flores estaban abiertas en su momento más hermoso, cada vez que se acercaba más y más al castillo las flores parecían manchas de sangre salpicadas alrededor, el miedo le estaba haciendo ver alucinaciones ¿Verdad?

Giró su mirada para buscar los caballos, pero ya no estaban.

— Cómo... — Camino de retroceso un poco antes de toparse con algo duro, volteo rápidamente y miro las enormes puertas de roble que estaban enfrente suyo. Una pequeña ráfaga de viento pasó dejándole un amargo frío en el cuerpo, sin ninguna alternativa tocó.

La puerta se abrió en un chirrido retorcido haciendo que el chico temblará.

— Disculpe por... las molestias — no había nadie del otro lado, entró rápidamente al lugar cerrando la puerta despacio, no había ni siquiera un alma en el interior, pero sí un vivo fuego en la sala, no enseñar mucho para acercarse y lograr calentar sus huesos. El frío era mortal.

Suspiro cansado cuando se dio cuenta de que probablemente no encontraría a Rose ese día. Iba a acercarse al fuego más, pero se detuvo abruptamente, sentía una mirada fija en él, como si alguien lo estuviera estudiando a la distancia, su presencia era fuerte, su primer instinto fue escapar del lugar, pero sabía que ya había caído en las fauces del lobo.

El Príncipe y la Bestia ( Omegacember 2023) [ Travis x Hawk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora