Cap 75

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Los fragmentos borrachos no dan miedo, lo que da miedo es que hay gente que te sigue ayudando a recordarlos.

Jian Songyi finalmente superó el obstáculo de afeitarse la cabeza y estaba a punto de armar un escándalo con Bai Huai para olvidar la vergüenza de ayer, como resultado, en medio del alboroto, se vio obligada a pensar en otro recuerdo que le hizo desear. para estrangularse. .

Olvídalo si revelas tu relación delante de tus padres.

¿Cómo te atreves a amenazar con fugarte sin casarte?

¿Cómo podría ser tan capaz?

Qué jodidamente vergonzoso.

Y Baihuai, el perro, en realidad hizo una grabación y guardó el certificado, deliberadamente quiso reírse de sí mismo y esperar a avergonzarse.

¡Basura!

¡Gran basura!

¡Perro intrigante!

Cuanto más pensaba Jian Songyi en ello, más avergonzada se sentía. Cuanto más avergonzada se sentía, más enojada se volvía. Se enojó tanto que su boca pasó de besar a morder.

Con un mordisco, el color de labios originalmente claro de Bai Huai se volvió rojo brillante por el mordisco.

Sentí un hormigueo en la comisura de mis labios.

Bai Huai pensó en comprar algunas bolsas grandes de piñones más tarde para rechinar los dientes del roedor en casa.

¿Por qué es tan rentable?

Estaba haciendo cálculos mentales, pero la abrazó con fuerza y ​​se negó a soltarla, engatusándola: "Esto no es un cálculo".

"¡No lo llames plan!" Las orejas de Jian Songyi se pusieron rojas de ira. "Dime, si no era un plan, ¿por qué estabas grabando? ¿Trátame como lo hiciste con Peng Minghong? ¿Soy tu enemigo de clase o algo así?" ?"

"Es un dulce recordatorio".

"¡Qué recuerdo! Solo quieres quedártelo para amenazarme, no creas que no lo sé" Jian Songyi apartó la mano de Bai Huai y estaba a punto de alcanzar el teléfono.

Bai Huai tenía brazos más largos y ojos y manos rápidos. Tenía el teléfono delante de él, lo sujetó con una mano para evitar que se moviera y mantuvo el teléfono lejos con la otra.

Jian Songyi quería agarrarlo, pero la diferencia física y la diferencia de altura de cinco centímetros entre el alfa y el omega estaban ahí. Jian Songyi luchó durante mucho tiempo, sonrojándose, pero no pudo alcanzar el costado del teléfono.

Estaba tan enojado que le dio un puñetazo a Bai Huai en el pecho: "¡Dame el teléfono! ¡Borra la grabación!".

"No puedo borrarlo".

"¡Bórralo!"

Jian Songyi estaba avergonzado, enojado y extremadamente feroz.

Bai Huai presionó directamente su cabeza, bajó y lo besó: "No lo borres".

"¡borrar!"

Bah.

"¡No creas que si me besas te dejaré ir!"

Bah.

"Qué demonios..."

Bah.

"Iré hacia ti ..."

Bah.

...

Un mordisco tras otro, el beso hizo que Jian Songyi perdiera los estribos, solo pudo patear a Bai Huai y enojado se levantó de él, apuntándolo con una mirada feroz en su rostro: "Si no lo borras por un día, Ni se te ocurra tocarlo." Yo."

CDASE,DHUODonde viven las historias. Descúbrelo ahora