𝐑𝐞𝐬𝐩𝐥𝐚𝐧𝐝𝐨𝐫 𝐍𝐨𝐜𝐭𝐮𝐫𝐧𝐨. ☽ [Kimetsu no Yaiba +18]

Primer Encuentro.

💐Capitulo 1.💐

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Muzan Kibutsuji, el rey demonio, se encontraba en su laboratorio, experimentando, su misión siempre había sido lograr sobrevivir ante los rayos del sol, creando demonios uno tras otro como sujeto de prueba, ninguno lograba los resultados deseados y simplemente eran dejados en libertad para tener más demonios a su mando.

Un día, Muzan, juntó varias partes de cuerpos humanos, teniendo listo un cuerpo armado a su gusto, solamente faltaba darle vida, dónde está vez, junto la sangre de las lunas superiores 3, 2 y 1 y la de él, por supuesto, qué, a pesar de que las lunas tienen parte de la sangre de él, cada sangre tenía de cada luna era excepcional y podría beneficiar aún más a aquel cuerpo que logré soportarlas.

POV's Muzan.

—No soportará la combinación de tantas sangres de gran poder.— Pensé mientras inyectaba las sangres, espero que este demonio sea distinto a los otros que he creado.

Me alejé del cuerpo inerte de la chica mientras esperaba en la reacción de su cuerpo, pues estaba la posibilidad que no podría soportar la sangre y su cuerpo explotaría.

Pasaron minutos bastante largos y la chica no reaccionaba en lo absoluto, me cansé, me dirigí a la puerta para salir del lugar y escuché un quejido, rápidamente voltee y era que la chica se había caído de la camilla donde estaba, intentaba levantarse, simplemente me acerque a ella y quedé parado frente a ella.

—¿Q-quien es usted?— Contestó muy nerviosa, observé de manera intimidante su cuerpo, debido a la sangre de lunas había desarrollado un cuerpo bastante seductor, a mí no me interesaba en lo más mínimo y no le veía mucha utilidad, pero a lo mejor y como demonio en batalla sea de mucha ayuda por la sangre que yacia en sus venas, intenté controlarla y ver sus pensamientos como lo he hecho como todos los demonios, pero, no pude con ella, haciéndome pensar en un plan.

—Mi nombre es Muzan Kibutsuji y soy tu amo y creador... Tu deber es obedecerme.— Contesté observandola a los ojos, ella se levantó y se inclinó demostrando respeto, cabe recalcar que ella se encontraba desnuda, pues ¿que esperaban? ¡¡Tenía que unir partes del cuerpo!!

Le dí ropa y cité una reunión con las 3 lunas superiores más fuertes.

Después de un par de horas las 3 lunas se presentaron.

—Amo Muzan, que bueno verlo ¿Porqué nos ha llamado hoy?— Contestó la luna superior 2, Douma, con su típica sonrisa cínica.