[In Between] - Avicii & Martin Garrix (En Pausa)

Capítulo 15

Madox POV

Otras dos noches han pasado, tres eventos más en total. Multitudes locas y apasionadas al igual que yo por la música que tanto amo. Tim y Martin son geniales, debo decir, los mejores compañeros de gira que puedo tener.

Tim ha cambiado por completo, sigue siendo tan amable, que me parece casi imposible creer que apenas hace unos días me insultaba. Martín también ha cambiado, gracias al cielo que no me ha echo ninguna broma pesada en estos días.

Los pocos ratos libres que tuvimos nos la pasamos encerrados en su departamento viendo películas y comiendo todo el tiempo.

Me siento tan afortunada, los dos han demostrado que me aprecian como su amiga y me cuidan mucho, cuando estamos conociendo a los fans en el backstage no me dejan sola ni un momento y no se cansan de recordarme que no debo confiar tanto en los desconocidos y que por ningún motivo debo aceptar alguna invitación a comer o a pasear más si es un hombre el que me invita.

A veces siento que exageran y me tratan como niña chiquita, pero no me puedo quejar, prefiero eso a insultos o bromas pesadas.

Justo ahora son las 2:14 a.m. y estamos sobrevolando los Ángeles, por fin vere a Joe, aunque me siento un poco resentida con él, yo ya no intenté marcarle, me cansé de hacerlo y que nunca me conteste, y el tampoco me ha marcado para nada ni me ha escrito.

-Chicos, ¿Qué les parece Ustedes, mi esposo y yo comiendo hoy en la tarde en mi casa antes de la entrevista de esta noche?.- les pregunté mientras comía de una bolsita de cacahuates enchilados.

-Depende, si cocinas tu, ¿Me prometes que no moriremos intoxicados?.-me preguntó Tim.

-¡Baboso!.- le dije lanzándole un cacahuate.- De echo te sorprenderás al ver lo bien que cocino, te quedarás con ganas de más.

Tim solo comenzó a reirse.

-¡Yo me apunto!.- dijo Martin.- quiero ver la cara que pone tu esposo cuando le diga que tu y yo dormimos juntos una noche.

-En la misma cama, pero no pasó nada Garrix, puedes decirle, será tu palabra contra la mía. Además tengo a Tim de testigo.

-A mi no me consta nada ¡eh!.- respondió Tim y Garrix soltó una carcajada.

-¿Tim, podrías marcarme al rato para darme el nombre del Hotel donde se hospedarán?.- le pregunté.- Así vengo en la tarde por ustedes y los llevo a mi casa.

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Después de despedirme de los chicos y nuestros managers en el aereopuerto, tomé un taxi y me dirigí hacia mi casa.

Mi corazón se aceleraba a medida que me acercaba, ¿Como reaccionaría Joe al verme? ¿Me había extrañado tanto como yo a él?, no podía creer que estaba de nuevo en los Ángeles y que podría besarlo y abrazarlo.

Cuando llegué baje del taxi, abrí sileciosamente la puerta principal, entré y dejé mis maletas al lado de la puerta, solo quería una cosa en este momento, correr a abrazar a mi esposo.

Subí rápidamente las escaleras y caminé hacia nuestra habitación, sin hacer ruido abrí la puerta con una sonrisa de oreja a oreja, mi corazón latiendo a mil por hora, prendí la luz y estaba a punto a aventarme a la cama para abrazarlo, cuando mis piernas se negaron a responder, abrí los ojos atónita, no podía creer lo que estaba viendo.

Sentí como si mi estómago se cayera al piso y dentro de mí crecía una sensación de asco y repulsión hacia la persona que hace apenas unos segundos atrás moría por besar.