Era un día más para tí
Caminas delante mío la brisa
Lenta sobaba tu cabello, y lo
Levantaba suavemente como quien
Roza los pétalos de una flor.
El tiempo era atroz para mí,
En mi mente divagaba, el estrés
Me llamaba y el odio, la presión
Y la arrogancia en mi predominaba.
Pasaste a mi lado y por fin
Entendí lo que Borges una vez
Escribió, pues mi reloj de sangre dentro
De mi pecho amante se detuvo,
Esperándote a tí.
Ver tus ojos color café, en los
Que destellaba el silencio y
La tranquilidad podía mantenerse,
Aunque, tuviera enfrente una tormenta.
Aquellos luceros no
temblaban por el miedo,
Solo saben brillar como
un faro, Frente la niebla
del mar turbulento.
ESTÁS LEYENDO
100 poemas para dedicar
PoetryDe la mano del amor está el odio, la rabia y la frustración. Hay tantos versos que no han Sido escritos, pero tienen su historia. A veces pienso que no son las palabras que escribimos, sino el corazón que las Lee quien le da significado.