Jin kim-suong. Nacida en Corea pero acojida por una pareja latina, enfrenta una vida llena de desilusiones y problemas... pronto volverá a su amada Corea del Sur y ahí conocerá al irresistible Han Seojun, conocido como un chico rudo y rebelde. Podra...
La azabache se encontraba en un avión hacia Corea del Sur, al fin se largó de esa vida, quería iniciar de cero. Se estudio en todo el vuelo, sus heridas las trató como se debe, algo feliz con sus tarjetas de crédito las cuales no tenían límite, no podía sonreír por las puntadas, durante el vuelo reconoció que tenia algunos episodios de lo sucedido... No podía negar que sería algo que la marco para toda la vida pero no quería pensar en eso, mejor pensaría en qué haría llegando a Corea. No llevaba equipaje pues como antes lo pensó, quería iniciar de cero, portaba un cubrebocas y un conjunto holgado para que no le duelan los moretones. Se sentía relativamente bien, en calma, al fin pudo dormir más de 4 horas en un día.
La pequeña chica se despertó, para poder bajar y con calma esperó, ayudo a un señor a bajar su maleta pues no podía alcanzarla o le pegaría a una señora ya mayor.
- muchas gracias jovencita, es nueva? No la había visto por acá - dijo haciendo una leve reverencia y tomando su maleta.
- ah... Si, mucho gusto, soy Jin kim-suong, regrese a mi ciudad natal - exclamó cerrando los ojos como si sonriera, lo bueno que traía cubrebocas.
Pero una duda surgió en ella, ella llevaba cubrebocas por su herida pero, el señor en frente suyo, por qué estaba tan tapado? °sera una celebridad?° pensó pero eso sería imposible.
- Que lindo nombre señorita, mucho gusto. Soy Lee Joo-Hun - eso último lo dijo susurrando lo más bajo posible °espero no me conozca° pensó aquel señor.
- oh, que gusto señor. Disculpe, me tengo que ir, muchas gracias - dijo la chica desinteresada pero con la duda de porqué ese hombre lleva una gorra, lentes oscuros y cubrebocas como si fuese ladrón, aunque, no le importaba si no sabía la causa, quería ir a aprovechar el día y sin esperar respuesta, ella avanzó.
- gracias... - dijo viendo como se iba, algo decepcionado pero también aliviado de no haber hecho ningún escándalo.
∆ Narra Kim ∆
Heyyyy que feliz estoy, me siento bien, soy libre y con una tarjeta de crédito que no tiene límite. Cómo mi amor a esta hermosa Corea. Empezaré con una casa propia, ni tan grande, ni tan chica, muebles, decoración y al final cosas de primera necesidad.
Compré una casa hermosa, y ahora toca ir al mercado. Comprare lo necesario y luego acomodare mañana. Así me la pasé todo el día, de compras por todos lados y mañana tendré que limpiar y tramitar lo que haga falta.
°°°
Me desperté y me bañé con algo de dificultad, estoy cuidando mucho mi piel pues no me gustan los moretones, lo de menos son las cortadas y raspones, estoy mejorando notablemente en cuanto a los moretones, pero al ver cómo estoy me siento mal, hoy decaigo en todo a lo largo de mi vida... Me siento sola.
- este? O este? - pregunté para mí misma - este! - dije sacando un conjunto diferente a las otras dos opciones que había puesto en la cama.
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