Ustedes pensaron la desempleada eterna, ya se suicido, no aqui estoy con cara de espanto, pero aun viva.
Otro año y yo sin empleo, por Dios, yo creó que aunque sea a putear me voy a ir, ¿como voy a sobrevivir?
Ya volví a mandar la solicitud para subgerente de Pizza Hut, quien quita que a la segunda lo logre, ¿porque no me lo dan pues?
También hize un sigilo para conseguir el trabajo que de verdad siempre he deseado y por lo que estudie ocho años derecho, en los juzgados.
¿Que es eso de sigilo vos, se han de preguntar? Es magia del caos, ¡chist!, los medios justifican los fines, dijo el que fundo los jesuitas.
Hice la figura, lo firme con sangre y lo enterré, eso es magia negra me dirán, a saber, yo ya no tengo dinero para sobrevivir.
Le he rezado por 20 años a Jesus que me de un trabajo y nada, ustedes me dirán, por alguna razón será que por 20 años no te ha respondido, pero yo ya estoy desesperada.
En esa magia del caos, dicen q entre mas desea algo, tu mente lo bloquea, quizás eso es lo que me ha pasado, porque como he buscado empleo y nada.
Mi otra esperanza es que el mundo se acabe, pero a saber, la guerra en Ucrania se ha puesto más fea desde el atentado que hizo el Zelensky a Belgorod.
Hoy si se están dando allí los rusos han hecho bombardeos masivos y los ucranianos han vuelto atacar Belgorod.
En Gaza ya los bombardeos son menos, pero el exterminio sigue y bombardearon Beirut.
Pero creo que lo del fin del mundo aun esta lejos y el dinero se me va acabando.
La cabeza me da vueltas y todo esta tan caro en este país, a veces me siento que me volveré loca.
¿Que haré? No ...no tengo idea, mañana otra vez al super a gastar más, la otra semana me viene el recibo de la luz y ya siento que me viene por lo menos de $30 dólares, por las luces de navidad y porque he tenido las luces varias horas.
Para variar para mi mala suerte el 31 de diciembre perdí creo que como $20 dólares, me fui donde mi amiga a cenar y de regreso cuando le pague al uber creó que lo vote.
Mala suerte, con gran tristeza recibí el año nuevo, $20 dólares que me hubieran servido para comprarle la comida a los perritos, sus pastillas desparisantantes, sino en cuanto baje al centro me voy a comprar ruda, porque una mala suerte que nunca se me acaba.
Bueno ya no los pongo triste con mis desgracias
ESTÁS LEYENDO
Diario de una desempleada eterna
Non-FictionAlgo me dice que un dia antes de morir he de obtener un trabajo