memorias del ayer parte 1

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Corre Chase! Gritaron al perro mientras saltaban el alambrado pero uno de ellos quedó enganchado por la mochila. Las ramas se sacudian a pocos metros y no dudo en dejar la mochila atrás. Corriendo entre la maleza escucharon el grito aterrador de quien los perseguía. Los dos se agacharon y procuraron no hacer ningún ruido, el perro entendió esto y bajo las orejas preocupado. Las hojas de los árboles caían perturbadas cuando ella paso levitando entre los árboles, parecia solo una niña pero tenía un aura de desesperación que te erizaba los pelos con solo verla de lejos. Lloraba muy fuerte y en eso el perro pareció despertar sus instintos más territoriales y salió dando ladridos de advertencia. Su dueña trato de detenerlo pero la herida de su pierna no le permitía moverse. El espectro de la niña tomo una forma amenazante y grito con tal fuerza que el perro no pudo evitar sentirse amenazado y salir corriendo de ahí... La niña rodeada de ese aura brillante voló persiguiendolo hasta que solo se alcanzaba a ver un tenue resplandor verde perderse en la espesura del bosque. La mujer se puso a llorar por su mascota y el joven se acercó a abrazarla... "Te duele?" Le pregunto levantando la manga de su tobillo izquierdo. Lo tenía muy inchado pero eso no le importaba "lo tienes? Pregunto la mujer y el joven asintió con la cabeza mientras sacaba de su abrigo un libro viejo y degradado por el tiempo, manipulandolo con tanta delicadeza como si sospechara lo importante que es.

Salia el sol y ellos habían llegado a casa de la mujer allí pusieron hielo en su tobillo y mientras servían una taza de café amargo para mantenerse despiertos el joven exigió información de dicho libro, la mujer no mostró sorpresa ni enojo por dicha exigencia. De hecho tenia una mirada baja llena de culpa. Se sentó a duras penas frente a el y paso a relatar.
Cuando era pequeña mi madre no me hacía fiestas de cumpleaños, de hecho nisiquiera me dijo mi edad. Calculo que tendré entre 27 y 30 años o almenos así me siento. Vivíamos en una estancia cerca de donde fui a buscar este libro. Un día jugando con unas primas que venían de visita me preguntaron si quería ir un cumpleaños, a lo que voltee a ver a mi madre y ella me hizo una cara muy seria. Fue la primera vez que me explicaron lo que era un cumpleaños, yo le pregunté a mi madre que por qué no me hacía los cumpleaños como le hacían a los demás niños y ella me explico que en su religión no se festejaban los cumpleaños.

ellos tienen lo necesario para volver Donde viven las historias. Descúbrelo ahora