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Simple pescador

*narra lumine*

Yo y ayaka subimos al cuarto en el que nos estábamos quedando.

Ayaka: bien cuéntamelo todo.

Lumine: me da vergüenza decírtelo.

Me tape la cara con las manos, no sabía ni por dónde empezar me quedé en silencio unos momentos antes de empezar, le conté todo lo que había pasado, obviamente sin demasiados detalles de lo que habíamos echo, pero debí contarle a mi mejor amiga sobre mi primera vez ¿no?

Ayaka: me esperaba todo menos eso.

Lumine: No le digas a mi padre o a Aether, por favor.

Ayaka: claro que no, de mí no saldrá una sola palabra.

Nos reímos un momento, yo aún muerta de la vergüenza así que quise cambiar el tema.

Lumine: ¿te la pasaste bien con Anton?

Mi amiga pareció alertarse un poco ante mi pregunta y me contestó e forma nerviosa.

Ayaka: bien.

Lumine: ¿qué hicieron?

Ayaka: nada importante.

Me extrañó que mi amiga contestara de esa forma pero supuse que no quería hablar sobre eso, así que no quise insistir.
Pasaron varios días en esa casa, días en lo que yo y Ajax nos la pasábamos juntos y días en los que veía como la prometida de mi hermano se escabullía con otro hombre, Ayaka nunca me contaba a donde iba o que hacía con Anton, pero siempre parecía llegar muy alegre, un día yo y Ajax estábamos en la cocina, todos estaban dormidos, él estaba preparando algo de tomar y yo estaba sentada en la mesa.

Lumine: ¿haz notado que Ayaka y Anton parecen llevarse demasiado bien?

Ajax: ¿eso no es algo bueno?

Lumine: Siempre que se escapan juntos Ayaka regresa demasiado feliz, ¿Anton no te ha dicho nada?

Ajax: mi hermano no suele hablarme mucho sobre las chicas con las que sale.

Lumine: ¿tú igual piensas que se traen algo más que una amistad?

Ajax: probablemente, pero es asunto de ellos, no de nosotros.

Lumine: ¿pero qué pasa con Aether?

Ajax: Lumine, en todo el tiempo que estuve en tu casa nunca vi que Ayaka y tu hermano se dijeran algo más que hola y adiós, deja que Ayaka disfrute el tiempo que le queda antes de casarse.

Lumine: me sentiré culpable de no decírselo a mi hermano.

Ajax: no lo veas como mentirle a tu hermano, velo como ayudar a una amiga.

Lumine: todo este asunto que estresa.

Ajax dejó la taza de té que estaba preparando y se acercó a mí para besarme agarrandome de la cintura.

Ajax: Yo sé cómo podríamos desestresarnos.

Lumine: ni lo pienses, no quiero que los demás nos escuchen.

Ajax: bueno, lo intente.

Ajax me abrazó y me beso en la mejilla.

Ajax: dime que aún que sea dormirás en mi habitación esta noche.

Lumine: ¿solo dormir?

Ajax: solo dormir.

*narra Ayaka*

Pasaron los días, Anton y yo nos la pasábamos juntos, éramos muy diferentes, pero cuando estaba con él sentía como el tiempo volaba.
Anton me daba la adrenalina que nunca me había permitido tener, besarnos a escondidas, escabullirnos juntos para tener un momento de intimidad, a simple vista parecía que lo de nosotros era una simple aventura sexual, pero, yo sentía que conforme más conocía a Antón, más miedo tenía que enamorarme de él.
Yo estaba sentada en un columpio de la casa de Anton dibujando algo.

Anton: ¿qué haces?

Ayaka: dibujaba el paisaje, falta poco para irme y quiero poder recordar este paisaje todos los días de mi vida.

Anton: No tienes por qué hacerlo, puedes quedarte aquí y verlo todos los días.

Ayaka: Desearía poder hacer eso.

Anton: puedes quedarte aquí, con un pescador que te echo el único ojo que le queda desde el momento en que pisaste este país, que hará todo por qué nunca te falte nada y te dará una razón para que sonrías todos los días o volver para atarte a un matrimonio que nunca podrá hacerte feliz.

Ayaka: Anton... tengo responsabilidades que atender, no es tan simple como eso...

Anton: olvídalo... lamento ponerte en esta situación, prometo que desde el momento en que dejes este país volverás a ser una desconocida para mí si es lo que deseas.

Ayaka: Anton...

Anton se fue del lugar, quería tener ese sentimiento que me generaba Antón, él tenía razón, Aether nunca podrá hacerme sentir igual.

*narra lumine*

Llegó el día de irnos, Ajax volvería a Fontaine conmigo y Ayaka, quería hablar con mi padre para asegurar que la boda salga bien.
Apesar de que Anton y Ayaka se despidieron aparentemente bien se podía notar una tensión entre ellos además ayaka apenas y hablo en los dos días que pasamos viajando.
Lleguemos a casa y mi hermano Aether nos recibió. Ajax y yo veníamos tomados de la mano.

Aether: Veo que les fue bien en el viaje.

Ajax: un gusto verte, cuñado.

Aether se acercó a Ayaka para saludarla, pude notar la incomodidad de Ayaka, no quería presionar a mi amiga pero sabía que había algo que no me estaba contando.
Así que fui al cuarto que mi padre le prestó para quedarse.

Ayaka: adelante.

Lumine: Tenemos que hablar.

Ayaka: ¿sobre?

Lumine: Sobre Anton y Aether.

Pude ver como en el rostro de mi amiga se pintaba una expresión de miedo.

Ayaka: ¿por qué tendríamos que hablar sobre ellos a la vez?

Lumine: Se que tú y Antón tuvieron algo.

Ayaka suspiro.

Ayaka: ¿te lo dijo el?

Lumine: No hizo falta, cualquiera con dos dedos de frente pudo haberlo notado.

Ayaka cubrió su cara con sus manos y empezó a sollozar.

Akaya: yo no quería hacerle daño a nadie, solo quería ser amada aún que sea una vez antes de casarme.

Me acerqué a ella para abrazarla.

Lumine: entiendo eso, no le diré nada a Aether pero puedes intentar hablar con mis hermano y mi padre, aún estás a tiempo.

Ayaka: Anton dijo que no insista más.

Lumine: Ay Ayaka...

Abracé a mi amiga buscando consolarla, ella me contó todo lo vivido con Anton, mi hermano nunca podrá amar a Ayaka, ellos no tuvieron la misma suerte que Ajax y yo.
Antón le dio a Ayaka lo que ella necesitaba
¿qué hay de malo en que Ayaka se haya enamorado de un simple pescadore?

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