weird - lh

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Camine hasta el supermercado mas cercano que había... estaba a 13 cuadras, puesto que esto no era una ciudad; Tenia mis audífonos puestos mientras caminaba por los pasillos buscando mi objetivo: Sour Patch Kids, mis dulces favoritos. Cuando los visualice corrí hacia ellos y tome 6 cajas, no podría vivir sin ellos, fui hacia las bebidas y cogí un te helado, me dirigí hacia las cajas para poder pagar los productos, las filas no eran muy largas por lo que salí rápido de ahí.

Camine un par de cuadras mas y me encontraba en un parque grande, con niños jugando alrededor y parejas tomadas de la manos, eso me recordó a que debo conseguir un "novio"...

Un moreno, no funciono.

Un chico bajito, no funciono.

Un aparente nerd, no funciono.

Un tatuado, no funciono.

¿Que carajos tengo que hacer para que alguien se enamore de mi en solo 3 segundos?

ϟ ϟ ϟ ϟ

Después de 4 intentos fallidos me di por vencida y me senté en una banca, mientras comía mi segunda caja de sour patch kids, estaba justo enfrente de un juego para niños, que estaba solo, por cierto. Recargue mi cabeza en el respaldo y cerré los ojos, quería relajarme...pero, un sonido espantoso se cruzo por mis oídos, abrí los ojos de golpe y me encontré con un rubio tirado en el pavimento. Tenia dos opciones:

1: Burlarme de el mientras lo señalaba.

2: Ayudarlo a levantarse y que sea el amor de mi vida.

Escogí la primera; Mi estomago no podía mas y mi risa era muy escandalosa, el rubio estaba sonrojado y apenas podía levantarse. ¿Que rayos hace un grandullón de 2 metros arriba de un juego para niños? mi "caja de la risa" iba a explotar, eso era seguro. Volví a reír por 1 minuto, las lágrimas ya salían de mis ojos, mire la cara del chico quien pareciera que iba llorar, pare.

—¿Estas bien?. —Contuve mi risa. El levanto su cara, tenia unos grandiosos ojos azules.

—¿Tu crees que lo estoy?. —Resoplo frustrado, yo ladee mi cabeza. Le ofrecí mi mano pero se levanto por si solo y se fue caminando por la acera, yo fruncí el ceño, nadie le dice que no a Juliette. Lo iba a joder, oh claro que lo haría, rubio descerebrado.

—¡Oye, jirafa! Tienes sucio el trasero. —Le grite y reí, el se toco el trasero y se lo sacudió mientras me miraba, dio la vuelta y siguió su camino. —¡Tu cartera, rubio, tu cartera!. —Le grite y se toco las bolsas mientras me miraba confundido, corrí hacia el y saque su cartera. —¡Ya tengo para mi helado!.— Reí y corrí mientras el se ponía rojo de la furia, corrí lo mas que pude pero caí en el césped. Me había doblado el tobillo.

—¡¿Cual es tu jodido problema!?, devuélveme la cartera, la necesito, estas loca. —Me grito, yo lo mire mientras las lágrimas caían por mis mejillas. Su cara cambio. —¿E-estas bien?.— Pregunto tartamudeando, yo negué. —¿Es por lo que d-dije?. —Yo no respondí, quería jugar.— Oh joder, lo siento, no era mi intención hacerte sentir mal, solo quiero que me devuelvas mi cartera, eran simples palabras, ¿que tengo que hacer para que me disculpes?. —Eso no era verdad, yo no estaba llorando por el, estaba llorando por mi tobillo y se mezclaron con lágrimas de risa, "¿Que tengo que hacer para que me disculpes?" mi pequeña mente malévola se prendió y lo mire.

—¿Me puedes hacer un favor? solo así te disculpare. —Hice puchero, mientras sonreía mentalmente.

—Por supuesto.—Dijo el rápidamente, pobre, estaba apenado.

—¿Te parece si te explico mientras me acompañas devuelta a casa? me he perdido. —Le pregunte amablemente. El asintió.