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.-𝐄𝐥 𝐬𝐨𝐧𝐢𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐬𝐮𝐚𝐯𝐞𝐬 𝐭𝐨𝐪𝐮𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐩𝐮𝐞𝐫𝐭𝐚 𝐥𝐨 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐭𝐨́, 𝐜𝐨𝐧 𝐜𝐮𝐢𝐝𝐚𝐝𝐨 𝐚𝐛𝐫𝐢𝐨́ 𝐥𝐨𝐬 𝐨𝐣𝐨𝐬 𝐞𝐧𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐮𝐧 𝐟𝐢𝐧𝐨 𝐭𝐞𝐜𝐡𝐨 𝐛𝐥𝐚𝐧𝐜𝐨 𝐣𝐮𝐧𝐭𝐨 𝐚 𝐥𝐚𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐞𝐝𝐞𝐬, 𝐝𝐞𝐜𝐨𝐫𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐜𝐨𝐧 𝐠𝐫𝐚𝐧 𝐯𝐚𝐥𝐨𝐫 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚𝐧 𝐚𝐥𝐫𝐞𝐝𝐞𝐝𝐨𝐫 𝐝𝐞𝐥 𝐥𝐮𝐠𝐚𝐫 𝐲 𝐟𝐢𝐧𝐚𝐬 𝐬𝐚𝐛𝐚𝐧𝐚𝐬 𝐜𝐮𝐛𝐫𝐢́𝐚𝐧 𝐬𝐮 𝐜𝐮𝐞𝐫𝐩𝐨-
- 𝘚𝘳. 𝘐𝘬𝘢𝘯 ¿𝘗𝘶𝘦𝘥𝘰 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘳?. - 𝐋𝐚 𝐯𝐨𝐳 𝐬𝐮𝐚𝐯𝐞 𝐝𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐦𝐮𝐜𝐚𝐦𝐚 𝐬𝐞 𝐝𝐢𝐨 𝐚 𝐧𝐨𝐭𝐚𝐫 𝐥𝐥𝐚𝐦𝐚́𝐧𝐝𝐨 𝐥𝐚 𝐚𝐭𝐞𝐧𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞 𝐢𝐤𝐚𝐧.
- 𝘤-𝘤𝘭𝘢𝘳𝘰, 𝘱𝘢𝘴𝘢. - fingió un tartamudeo mientras se sentaba.La misma mujer que lo atendió al despertar entro junto a un carrito lleno de postres y un juego de te.
≪¿Esto que?≫
La peli-castaña, al sentir el peso de su mirada explico con tranquilidad.
─ El emperador Sovieshu lo mando. Dentro de unos minutos vendrá a almorzar con usted.─ Ikan asintio viendo cómo la sirvienta se retiraba con una reverencia.
una vez se fue, el moreno se levantó sin mucha dificultad y camino hacia la mesita. Tomo una de las galletas cubiertas en glaseado de chocolate y se la metió a la boca.
≪ Que asco. ¿acaso no saben hacer galletas decentes? ≫
Pensó Ikan y se movió al balcón, dónde finalmente escupió la galleta.
"─ Las de hirrum eran muchísimo mejores.─ "
Murmuró aún con una mueca asqueado al seguir sintiendo el sabor. En un intento de sacarse el sabor dea boca, sirvió un poco de te en la tasa de porcelana y dió un sorbo.
≪ No todo tenía que ser malo.≫
Trago despacio y lo poco que quedó lo tiró en el balcón. Sacudió un poco la taza y volvio a acostarse.
≪ Si ese imbécil aparece de la nada, no se cómo le explicaré como estoy parado. Supuestamente no puedo mover ni el dedo.≫
Justo después, el Emperador cruzó las puertas y rápidamente Ikan cambio su semblante a uno más "tierno" e "inocente", ya le conocía sus fetiches.
Fingió temblar ante la presencia de sovieshu y mordió su labio con "miedo" bajo la cabeza y oculto sus ojos, o bueno, el que tenía libre.
≪ ojalá se la crea entera.≫
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𝐓𝐫𝐨𝐧𝐨 𝐌𝐚𝐫𝐜𝐚𝐝𝐨
Romance¿Otro concubino? . . . . . . . . . . El emperador encontró a otro concubino.