El Afecto del Rey Demonio

Parte 12

Jixiang no pudo dormir. Tampoco era capaz de concentrarse en su trabajo ese día.  Cepilló el cabello de su señora lentamente, mientras ella hablaba de cosas a las que Jixiang no ponía atención.

"Jixiang, te estoy hablando." Dijo Ning YingYing, sacando a su doncella de sus pensamientos.

"¿Mi señora?"

"¿Escuchaste lo que dije?"

"Mi señora no quiere salir, tiene los pies hinchados, ¿quiere que llame al médico para que le de algo que la relaje?"

"Jixiang, ¿en qué piensas tan detenidamente?"

"No sé a qué se refiere, mi señora."

Ning YingYing suspiró, se levantó con dificultad y fue a sentarse en su cama. No estaba cambiada ya que pensaba quedarse en cama todo el día de hoy. Estaba cansada.

"¿Cuánto tiempo has trabajado para mi, Jixiang?"

"Respondiendo a mi señora, esta Jixiang ha trabajado para usted por más de tres años."

"Y en ese tiempo has sido muy leal conmigo."

"Así es, mi señora."

"Nunca te he invitado a comer conmigo en mi mesa, ¿verdad?"

"No, mi señora."

"Y no hemos encontrado un buen prospecto para que te cases, casi estás en edad."

"Aún no, mi señora. Todavía me falta un año para la mayoría de edad."

"Bien. Entonces, ya que eres muy leal y trabajadora, me preocupa que estés tan distraída, ¿acaso hay alguien que te gusta?" Ning YingYing sonrió ampliamente. "¿Estás pensando en algún muchacho?"

"¡N-no, mi señora! ¡No tengo ningún prospecto todavía!"

"Entonces, ¿hay algún problema con tu familia? Eres del clan Mobei, ¿no es así? Bixia me habría contado si hubiera algún problema con el clan Mobei." Ning YingYing se preocupó entonces. "Si es un problema con tu familia, si necesitas ir a ver a tus padres, puedes decírmelo, yo no te obligaré a quedarte si es una emergencia."

"No, mi señora, es solo que... No sé cómo decirlo. Es algo que realmente no es de mi incumbencia, y no sé si es apropiado decírselo."

"Si te tiene tan nerviosa, debe ser algo importante. Pidamos un poco de té y hablemos."

Jixiang le contó todo lo que había visto en el pabellón abandonado, y cuando terminó, Ning YingYing derramó su té sobre la mesa.

"¡Mi señora!" Jixiang se levantó rápidamente y comenzó a limpiar la mesa.

Al hacerlo, no notó la mirada de Ning YingYing. Se había tornado algo siniestra de pronto. Jixiang volvió a sentarse y Ning YingYing le sonrió.

"Jixiang, no necesito decirte lo importante que es que no le digas lo que viste a nadie más, ¿verdad?"

"Mi señora... ¿No se lo dirá a Bixia?"

"De todas maneras no servirá de mucho... Sha Hualing está esperando un hijo de Bixia y la posibilidad de que Liu Mingyan espere uno también es alta. Vamos a quedarnos calladas por ahora, hasta que nazcan sus príncipes o princesas, ¿entiendes?"

"Sí, mi señora."

"Ve a descansar, Jixiang. No saldré el día de hoy. Tampoco recibiré ningún visitante."

Jixiang se marchó, dejando a Ning YingYing sola. Una vez que la puerta se cerró, Ning YingYing sonrió.

Esto era realmente increíble, y en las narices de todo mundo. Ella estaba segura de que para los demonios no era gran cosa, para ellos no importaba el género de sus amantes realmente, pero Luo Binghe no se había criado con demonios. Además sería menos problema si fuera una consorte con alguna criada, pero dos consortes imperiales enredadas en ese tipo de relación...