Yo Tengo El Control ⛓️🥀•

Capítulo 44

Me encontraba en mi habitación mirando por la ventana.

Aún que no miraba nada exactamente.

Más bien trataba de poner las partes del rompecabezas en su lugar.

Si se podría decir así.

Chae-Ryo.

- Jungkook dijo que le dolía la cabeza cuando Chae-Ryo le dió ésa bebida -. Susurré para mí -. ¿Que tipo de bebida?.

Fruncí mi entrecejo.

¿Que era lo que hacia esa loca?.

Me quedé pensando por unos minutos más.

Hasta que mis ojos capturaron moviendo en la nieve.

Jungkook.

Iba caminando por la nieve.

No con un buen semblante.

Me quedé mirándolo atenta.

Cada paso de él.

Hasta que terminó por levantar su cabeza y mirar a mi dirección.

Me quedé en mi mismo lugar.

Mirándolo.

Bajo su cabeza y siguió caminando.

Por alguna razón... Me sentía mal.

•••

Solo me tocaba esperar a que todos se durmieran.

Suwon y yo estábamos en la sentados en el sofá de la sala mirando una película cualquiera.

Pusimos la película que fuera más aburrida para que los demás no se quedarán a verla.

Pero de verdad que era aburrida.

Me estaba aburriendo de verdad.

Los demás llegaban y miraban pero después se iban.

Mingi se había ido a acostar un rato.

Dijo que lo llamaramos una vez se fueran a acostar todos.

Si Mingi no se iba a "dormir", Chae-Ryo tampoco se iría.

Así que por eso Mingi se fué.

Pero también fue a descansar un rato.

Seguía con dolor de cabeza.

Pero está vez un poco más leve.

Le había dado unas pastillas para que se sintiera mejor.

Ahora mismo solo quedaban Mina y JaeMin.

— Bueno... Creo que nosotros ya iremos a dormir —. Hablo Mina levantándose del sofá—. Hasta mañana.

— Descansen —. Hablo ahora JaeMin con una sonrisa.

Nos despedimos de ellos con una sonrisa.

Mina y JaeMin subieron las escaleras y al ya no verlos nos esperamos unos minutos.

Esperamos alrededor de 5 minutos.

Apagamos la televisión y caminamos a la habitación de Mingi.

Cuando íbamos a abrir la puerta está se abrió.

— Demonios, me asustaron —. Dijo Mingi mientras nos miraba.

— Lo siento —. Reí por lo bajo.

— Bueno... Vayamos a la sala que mencionaron—. Dijo Mingi con una leve sonrisa.

Asentimos y apagamos todas las luces.

Caminamos a la sala de cámaras que se encontraba con llave debajo de la escalera.