𝖺𝖿𝗍𝖾𝗋 𝖺𝗅𝗅 𝗍𝗁𝗂𝗌 𝗍𝗂𝗆𝖾, 𝗂 𝗅𝗈𝗏𝖾 𝗒𝗈𝗎 | 𝗝𝗢𝗛𝗡𝗦𝗛𝗜 𝗔𝗨

where's my love

Este capítulo es un flashback desde el punto de vista de Kenshi.

Advertencia del capítulo, ataques de ansiedad y lenguaje explico y escenas explícitas.

Recomiendo escuchar "where's My love" de SYML y "Not Allowed" de TV Girl ya que tuve mucha inspiración con ambas canciones.

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Kenshi hizo una reverencia hacia su Oyabun, el jefe de la Yakuza, la reunión por fin había terminado y el yakuza era libre, al menos por unos días. Había hecho un buen trabajo al encargarse de unos pequeños problemas, Kenshi podía sentir aún como la sangre de aquel hombre manchaba su rostro y sus manos ya estaban completamente llenas de sangre, no disfrutaba de hacer el trabajo sucio de la Yakuza, pero era necesario si quería salir por completo de ese lugar, según ellos no existía otro hombre mejor para hacer el trabajo que Kenshi y aún así, él no lo disfrutaba.

Repudiaba la idea de asesinar a las personas, claro que algunos se lo merecían pero él no era nadie para terminar con sus vidas, solo seguía las órdenes y si se negaba a aceptar cualquier trabajo, su familia podría estar en peligro, la Yakuza eran personas peligrosas y odiaba no poder protestar contra ellos. Tenía a su familia en constante peligro y Kenshi tuvo que agachar la cabeza muchas veces para que su familia estuviera a salvo. Él estaba cansado de toda esa mierda.

Salió de la oficina y soltó un suspiro pesado, no supo en qué momento sus pulmones retuvieron todo el aire y ahora podía disfrutar de unos días tranquilos o eso quería pensar. Aún tenía una misión que hacer y ahora que no tenía ningún trabajo asignado, podía enfocarse en su tarea para liberar a su clan. Su familia necesitaba desligarse de la mafia y Kenshi había aceptado su destino hace tantos años, era el único que podía liberarlos, años atrás sus familiares intentaron de muchas maneras escapar pero el resultado siempre era el mismo.

Alguien tenía que morir y Kenshi no quería ver la sangre de sus familiares derramada nuevamente. Si tenía que arriesgar su vida para que su clan fuera libre, no importaba lo demás, no importaba si tenía que asesinar a personas o meterse en peleas, si al final podía liberarse, lo haría mil veces si fuera necesario.

Caminó por los pasillos de aquella casa, la mayoría de los miembros estaban descansando y otros estaban lejos en algun lugar de Japón. Kenshi simplemente paso de largo y salió de la casa, tenía mucho trabajo por delante y no iba a arriesgarse a ser descubierto, no ahora que tenía una pista sobre el paradero de Sento.

Las calles de Japón eran frías en esa época del año, las luces iluminaron la ciudad y las personas caminaban sin preocupaciones, Kenshi los envidiaba. Observó por unos segundos aas personas que caminaban por las calles antes de unirse a ellos, caminando a una distancia prudente. La zona estaba repleta de restaurantes y pequeños bares donde la gente disfrutaba de los pequeños placeres. Kenshi sacó un celular del interior de su saco y comenzó a teclear un mensaje, solo había una persona en todo el mundo en la cual confiaba, ambos eran miembros de la Yakuza, Raiden se consideraba el único amigo leal de Kenshi y el japonés siempre agradeció tener su apoyo.

Mando un pequeño mensaje a su amigo y continuo su camino. Según la pista que obtuvo gracias a Raiden, un contrabandista de armas tenía información sobre Sento y era lo más cercano que estuvo durante estos años de búsqueda. La espada parecía haber desaparecido del mundo y ahora había una luz de esperanza para él, no importaba las consecuencias. Caminó por las calles, evitando siempre las grandes multitudes, no podía pasar desapercibido, no cuando sus manos estaban marcadas y era fácil reconocerlo. La gente no era muy amistosa con los miembros de la Yakuza y muchas veces estuvo involucrado en discusiones gracias a eso.