Mientras huenigkai era muy amable con todos sin hacerle daño a nadie, soobin lo odiaba.
- ya detente soobin yo nunca te he hecho algo - decía huenigkai mientras lloraba por los golpes que Soobin le daba.
- no quiero - dijo Soobin mientras seguía golpeando a huenigkai, pero aun así nada dentro de él podía hacerlo sentir mejor.
El timbre que indicaba que las clases iban a comenzar sonó fue entonces cuando soobin lo dejo en paz.
Huenigkai se sintió realmente aliviado rápidamente, fue al baño después de la paliza que le dio soobin abrió el grifo del agua y se mojó la cara, tenía un moretón horrible que definitivamente no podía ocultar, pero que podía hacer tenía que seguir soportando los malos tratos de soobin al menos hasta que el año escolar termine.
Entro al salón de clases justo antes de que el profesor entrará.
- pro dios huenigkai, pero que te paso fue el mal nacido de Soobin verdad- dijo beomgyu completamente enojado.
- si fue él otra vez no pude defenderme - dijo con un tono triste.
- pero va a ver, yo no le tengo miedo, le voy a dar su merecido, no es justo que tú no le hagas nada y él te pegue cada vez que se le da su regalada gana- dijo beomgyu con rabia de ver a su amigo así de mal.
- no, si tú le haces algo a lo mejor después se pondrá peor todo- dijo huenigkai.
- pero él no se puede salir con la suya- dijo beomgyu.
- por favor esto no es nada, después puede que me pegue más feo si intervienes - suplicando a su amigo.
Los demás alumnos llegaron y a beomgyu no le quedó de otra más que respetar a su amigo y su decisión.
El profesor llegó, pero no solo había un chico de pelo castaño que lo acompañaba, se veía algo tímido.
- bueno, estudiantes les presento a taehuyn él es un nuevo estudiante, así que quiero que le den una calurosa bienvenida- dijo el maestro- siéntate al frente donde no hay nadie.
Después de eso las clases transcurrieron con normalidad, era la última clase, después de escuchar el timbre de salida los estudiantes salieron rápidamente de la clase del profesor más huenigkai no quería encontrarse con soobin a la salida por qué si no terminaría con otro moretón.
- ey a dónde vas que me tienes miedo por qué no te defiendes como los hombres - dijo Soobin acordando a huenigkai mientras se reía.
- ya por favor yo nunca te hice nada, te prometo que yo no diré nada - dijo huenigkai con voz de súplica esperando lo peor.
- déjalo- dijo una voz nada reconocida para ninguno de los dos.
Soobin voltio y ahí estaba el chico nuevo se veía enojado soobin no quería problemas así que simplemente dejo ir a huenigkai y se fue.
- tienes que aprender a pelear si no se van a pasar contigo - dijo taehuyn.
- gracias por tu ayuda - dijo huenigkai con una sonrisa.
- no es nada, pero tengo curiosidad, le caes mal o que - dijo taehuyn con curiosidad.
- digamos que sí, pero es una muy muy larga historia que Soobin no me dejaría contar - dijo huenigkai recordando el porqué de las acciones de soobin para con él.
Taehuyn no quiso seguir su interrogatorio para no incomodar al rubio.
- bueno, entonces el acoso no se acabará, así que te propongo enseñarte a defenderte - dijo taehuyn con una sonrisa.
- de verdad eso me sería muy útil - dijo con una sonrisa.
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Soobin había llegado a su casa enojado como siempre su mamá no entendía por qué su hijo actuaba de esa manera.
- hijo, podemos hablar, sé que el divorcio fue duro para todos, es por eso tu actitud - dijo su mamá intentando ayudar a su hijo.
- tú no sabes nada mejor déjame solo - dijo Soobin subiendo a su cuarto.
Ya en su cuarto soobin aventó todo lo que tenía a su alcance
- no, no estoy enfermo, no lo estoy - dijo Soobin mientras lloraba quería desaparecer, en ese momento aún en su mente seguían varios recuerdos que lo perseguían y lo hacían sentir mal, odiaba a huenigkai por lo que había provocado en el ser un enfermero que su padre despreciaría.
- definitivamente, estoy enfermo, te odio huenigkai por qué me haces sentir tan mal - dijo mientras lloraba.
Él no podía ser gay, no podía bajo ninguna circunstancia.
