Frases y relatos

Inesperado

Me enseñaste para que es la vida y cada momento cuenta
una nueva esperanza rumbo a la magia que se esconde a
través de las cosas simples y inesperadas.
Como un día muy oscuro que de pronto se torna en gris y tú
llegas para cambiarme los latidos y las nubes desaparecen
con el viento y se detiene el tiempo, veo azules cristalinos en
el cielo y no quiero parar de sonreír y evitar parar ya no me es
posible.
Como una porción de aliento que cubre todos mis sentidos
y que corre por mis venas como diminutas capacidades que
cuentan historias magníficas y infinitas.
Momentos que se sienten con el alma solo cuando son admirados
por la forma con la que se mira, donde los sueños son caminos.
Como un soñador despierto que baila al son de la letra y la ilusión
es el despertar de la felicidad de un mañana que nunca sabemos
que va a pasar sin dejar morir la fe la que nos mantiene vivos
y atentos todo el tiempo.
Siento las olas de un mar flotando en mi cabeza y mis pies a veces me
arrastran hasta ese lugar llamado fronteras y una vez en ese lugar
quiero ir más allá y ver que es lo que ahí y que más pasará.
Nunca sabremos el final de nada, ni cuanto tiempo nos queda, como
no somos dueños de la voluntad pero podemos hacer de ella un hogar
y saber que allí será siempre nuestra casa. Lo que cuenta es un capítulo
que escribimos diariamente lo que verdaderamente nos iremos a llevar
y de eso no me cabe la menor duda porque solo tú logras hacerme descansar.
Y reposo en tus brazos hábiles que me acarician el rostro y el pelo todo revuelco
donde me encuentro recostada y la brisa acaricia mis pies descalzos.
Mi alma se convence de que siempre luego de una tormenta lo siguiente que viene es la
calma y vuelve a salir el sol y que solo el día que no vuelva a verlo  sabré
que hice todo lo que pude estando completamente viva y la esperanza intacta
en cada satisfacción que me producía el amanecer porque la vida es un regalo
y un preciado legado, que aunque esté lleno con miles de desafíos que no esperé
afrontar nunca hubiera sabido que tan fuerte fui o todo ese potencial que adquirí
de no ser porque siempre mantuve esa mirada puesta en lo más alto del cielo.
Todo me prepara para un lugar, un momento, una persona.
Soy el milagro que siempre estuve esperando pero que jamás me di cuenta y hoy
que lo sé agradesco que así sea.