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________________________________ •Autor Original: xx-lemon-drop-xx •Pareja: Vil x fem reader •Petición: Hey, ¿puedo pedir a un Vil x fem reader frente a un espejo, donde la reina mime y se ocupe de su princesa?. •Advertencias: espejo torcido, elogios, chupetones, digitación, lectora. ________________________________
-Eres hermosa, ¿lo sabías?.
Dedos sedosos juguetearon con tus muslos afelpados y tu piel suave mientras Vil murmuraba en tu oído, su otra mano agarraba con fuerza tu mandíbula para inclinar tu cabeza hacia el espejo sentado frente a ustedes dos.
Podías ver la formación enrojecida de chupetones que había succionado en tu piel de porcelana.
-Qué hermoso -murmuró de nuevo, como un tonto borracho de amor. Sus pálidos dedos pellizcaron tus pezones, pellizcandolos y girándolos delicadamente a su gusto mientras mordisqueaba tu clavícula nuevamente, su lengua deslizándose más allá de la piel magullada-. Estás goteando sobre mí.
Él gimió, abriendo más tus piernas para deslizar sus dedos contra tu clítoris hinchado, observando tu excitación babear por tu raja y mojar tus muslos internos. Vil soltó una carcajada ante el gemido confuso que dejaste escapar, manteniendo presionada la cadera que levantaste contra sus tentadores dedos.
-¿Ves esto?
Te vio levantar la cabeza para mirarte en el espejo, dejando escapar un gemido bajo cuando sus largos dedos se curvaron, empujando tu coño que palpitaba ansiosamente y apretaba alrededor de sus dedos intrusos.
-Esto es hermoso -dijo, en un susurro ansioso contra el lóbulo de tu oreja.
Arrastró sus dientes contra tu cuello nuevamente bajando su cabeza para enterrarla en tu hombro y dejar más mordiscos a su paso. La longitud de Vil era dura contra tu trasero desnudo, manchando el fino material de sus caros boxers.
Saltó ante el sonido de tus súplicas bajas por más placer mientras te abría con sus dedos, explorando el desastre que goteaba que era tu coño.
Su mano libre le dio un rápido golpe en la parte interna del muslo,
-No te muevas -murmuró, antes de arrastrar su mano libre hacia una de tus tetas. Vil empujó un tercer dedo dentro de ti, curvándolo contra tus paredes esponjosas en un intento de encontrar tu punto G-. Aquí vamos -murmuró, sintiendo que empezabas a apretar sus dedos. Se derramó contra tu garganta ante el sonido de tus gemidos sofocados de éxtasis.
-¡Ahh Vil~! -le advertiste de tu próximo orgasmo, arqueando la espalda y moviendo las caderas desesperadamente en busca de tu euforia.
-Ven por mí, niña bonita -hizo una seña, haciendo un movimiento de venir aquí con sus dedos, arrastrándolos y balanceándolos contra tu punto G hasta que te corriste alrededor de sus dedos con fuertes gemidos y piernas temblorosas.
Vil presionó un patrón de besos por tu garganta y clavícula, disminuyendo su ritmo mientras te llevaba a tu euforia.
Tu cuerpo se contrajo cuando él se apartó, y él apartó el cabello sudoroso de tu cara, presionando suaves besos contra tu frente.
-Estas bien. Te tengo princesa - murmuró, masajeando la piel de tu estómago y caderas mientras descansabas contra él, respirando suavemente.
-Vamos -la reina sobornó, poniéndose de pie contigo en sus brazos, llevándote hacia el baño al estilo nupcial-. Vamos a darte un baño y luego podré ejercitar esos músculos tensos tuyos cuando volvamos a la cama.
-P-Pero ¿y tú? -preguntaste en un susurro entrecortado, sintiendo su dura longitud presionada contra tu costado. Se rió entre dientes, abrió el grifo de la bañera y tapó el desagüe. Te colocó suavemente sobre la encimera del fregadero y arrojó algunas sales de baño en el agua.
-Esta noche se trata de ti. Lo dejé perfectamente claro, ¿no?
