𝕋𝕨𝕚𝕤𝕥𝕖𝕕 𝕎𝕠𝕟𝕕𝕖𝕣𝕝𝕒𝕟𝕕 +21

♡ 𝕃𝕚𝕝𝕚𝕒 ♡

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•Autor Original: xx-lemon-drop-xx
•Pareja: General Lilia x fem reader.
•Petición: Me preguntaba si podrías escribir una historia de General Lilia x fem read nsfw.

La trama es; que los dos tuvieron una gran discusión y su pareja dice que no debería haberse enamorado de alguien como él. Esto enoja a Lilia y él la devuelve a su lugar. Entonces, como Lilia es un general, él es mucho más rudo y despiadado y no muestra tanta misericordia.
•Advertencias: Lilia, general de guerra, severo, lectora femenina. Asfixia, mordisco, palmadas en el trasero una o dos veces (creo), ataduras, dedos, chuparse los dedos, degradación (zorra, puta, etc.), elogios, llamarlo señor.
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Lilia podía sentir tu pulso latiendo violentamente bajo sus dedos mientras te estrangulaba, observando con adoración la forma en que tus ojos se pusieron en blanco.

Sus colmillos brillaban con saliva, las caderas se alzaban para clavar su polla dentro de ti y arrastrar esos irresistibles maullidos que fluían de tus labios como agua.

Su lengua se movió para recoger las lágrimas que goteaban de tus pestañas y bajaban por tus mejillas.

Te haría arrepentirte de cada maldita palabra que alguna vez haya salido de esos patéticos y dulces labios tuyos.

—¡Nunca actúas como si mis sentimientos fueran válidos! —tus palabras cayeron en oídos sordos mientras Lilia se alejaba de ti, con el largo cabello balanceándose detrás de él por su fuerte paso.

Sabías que te había escuchado, su mandíbula estaba tensa, como si estuviera a tres segundos de arrancarte la yugular y ver tu sangre manchar el suelo debajo de ti.

La espada que sobresalía de su cadera era un claro recordatorio del daño que podía causar.

El daño que ha hecho.

—Baja la voz, humana —en realidad, no eras completamente humana. Más bien una media hada, pero se negó obstinadamente a reconocer tu parte hada.

Para Lilia Vanrouge, eras humana.

—¡No bajaré mi vo-mmmph! —su mano enguantada cerró tu boca y en cuestión de segundos quedaste atrapado entre él y la pared, obligadote a mirarlo a los ojos que atravesaban tu cráneo y estaban llenos de matanza.

—Escucharás a tu superior —él te ordenó, moviendo su mano para pellizcar con fuerza tus mejillas y forzar tu boca a abrirse ligeramente. Lilia te miró como si fueras un insecto al que él aplastaría con esas botas de tacón.

Y probablemente él también lo disfrutaría.

Lilia gruñó cuando le mordiste la mano, los dientes se hundieron en sus guantes y dejaron pequeñas marcas de las que él se habría reído y habría llamado "lindo" si su sangre no hubiera estado hirviendo.

—Nunca debí haber estado con un a...

—¿Un qué? —él te espetó, desafiándote a terminar incluso esas tontas palabras que estaban a punto de caer de tus labios como rocas y tallarse en su sólido corazón.

No estabas retrocediendo.

—¡Un hada tonto, brutal y atroz como tú! ¡Ni siquiera sé qué vi en un asesino como tú! ¡Nunca debí haberme enamorado de ti! —un fuerte empujón contra su pecho lo hizo retroceder como para dejarte ir.

Tus palabras fueron una daga que se hundió en su piel como hierro candente. La mano de Lilia agarró tu muñeca con la intención de aplastar los huesos de tu brazo mientras te golpeaba contra la pared, con los colmillos picando contra la piel de tu cuello.