Todo empezó en Brasil - Interludio | Chestappen

Dudas

Hola!!!! Aquí tienen el segundo capítulo del interludio, espero lo disfruten.

Atención: hay escenas +18, si te sientes incomode no dudes en saltarlas.

El próximo será el último capítulo y ya de ahí voy con la segunda parte.

Un abrazo!!!

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Dia 3

Ya había pasado medianoche. Me quedé sentado en uno de los sofás mientras Max ordenaba el bar y yo le contaba anécdotas de mis hijos y Carola.

―...así que no sé, como Checo jr va en los kartings, no me sorprendería si termina corriendo a futuro en la F1.

―Bueno, si le enseñas tu secreto sobre la manipulación de los neumaticos en carrera no dudo que sería incluso mejor que tú ―Me dijo Max mientras terminaba de botar algunos limones a la basura.

―¿Mezclado con el método Verstappen?

―Pues claro, lo terminamos dejando en otra gasolinera abandonado y estaría listo.

―Maxie...

―Es broma, lieferd.

Cerré mis ojos mientras el sueño me embargaba, iba a ponerme de pie cuando Max se subió sobre mí, abrí mis ojos y su boca ya estaba a centímetros de la mía.

―Hoy día podemos cambiar las reglas de juego, lieferd.

Su propuesta me quitó todo el sueño. Le quité la camisa mientras él me ayudó con la mía. Lo atraje hacia mí mientras comenzábamos a besarnos. Besé su pecho con deseo mientras me detenía en sus pezones lamiéndolos y luego dando pequeños mordiscos. Max daba pequeños saltos de placer mientras yo bajaba mis manos por su espalda hasta llegar a sus gluteos, desde ahí lo atraje más hacia mí, sentí su erección junto a la mía, lo miré y noté que sus mejillas estaban completamente sonrojadas. Lo levanté en mis brazos y él entrecruzó sus piernas alrededor de mi cintura. Lo llevé a la habitación y lo dejé sobre la cama mientras aprovechaba de sacarle su pantalón y él me ayudaba con el mío. Me puse sobre él, sentí mi pecho sobre el de Max mientras nuestros corazones latían con fuerza.

―Max... ¿Estás seguro?

Max me miró y me atrajo a su boca. Nos besamos, él tomó mi mano y chupó dos de mis dedos con el mismo ahínco con el que me hacía sexo oral, no pude evitar excitarme aún mas. Max llevó mi mano abajo mostrándome como lubricarlo y en segundos sentí como perdía la cabeza, quería hacerlo mío, solo mío, dominarlo. Tomé su pene y empecé a masturbarlo, estaba tan húmedo que aproveché de introducir uno de mis dedos húmedos en su trasero. Max se encorvó de placer mientras con mi otra mano no dejaba de masturbarlo. Metí otro dedo abriéndome paso, estaba estrecho pero el suplicaba por más, solo obedecí mientras cada vez nuestra excitación subía más y más. Un tercer dedo ayudó a los otros a expandir más el interior de Max. Los saqué con delicadeza mientras detuve el jugueteo con su pene. Lo tomé por la cintura y él se volteó mostrándome todo. Me acomodé tras él y puse mi pene en su entrada, no mames, que exquisita sensación fue poseerlo, entré despacio y gimió de placer de inmediato, oh Maxie estaba dentro tuyo como nunca hubiese imaginado, tus gritos de placer me llevaban a aumentar mis movimientos. Tomé su cintura y la atrajé con más fuerza hacia mi cadera, mientras él no dejaba de pedirme más, aumenté mis movimientos mientras lo abrazaba por el pecho. Saqué mi miembro y max me empujó sobre la cama, se subió arriba mio y con su rostro más ardiente me miró mientras él mismo introducía mi pene dentro de él. Grité de placer con sus movimientos, lo tomé por la cadera mientras el vaivén de su cadera aumentaba más y más.