¿Un ciclo de calor?
me pregunté, luego miré los ojos helados de William y me di cuenta.
Me di cuenta de que William había sabido todo el tiempo que estaba pasando por un ciclo de celo y había fingido no saberlo....
Se me encogió el corazón y luché por mantener la compostura. Si pudiera fingir que no lo sabía, o al menos que no sabía que estaba pasando por uno, sería suficiente.
"Un ciclo de calor, ¿qué quieres decir, estás... dudando de mí?".
William no dijo nada a mis preguntas. Su falta de respuesta me inquietó aún más. Un sudor frío corría por mi cara.
William me robó la frente con la palma de la mano.
"¿Qué demonios, estás en un ciclo de calor o algo así? ¿Por qué sudas así?".
"...No, no es eso, es sólo que dijiste algo raro de la nada que me asustó".
"¿Hmm?"
William me lanzó una mirada socarrona. Fingí no darme cuenta y bajé la cabeza para evitar su mirada. No tenía tiempo para pensar en lo sospechosa que parecía ahora mismo.
Si me pillan, se acabó todo.... Mantén la calma, Seo Ah-joon. Por suerte, él no parece saberlo.
Me mordí el labio nerviosamente y esperé las siguientes palabras de William. Me observó durante un largo momento antes de hablar finalmente.
"¿No te parece sospechoso que no puedas establecer contacto visual y que estés sudando frío?".
"¿Qué quieres decir con que hay algo sospechoso? Estoy tan relajado que ni siquiera sé si soy un Omega, ¿y por qué mencionaste de repente los ciclos de calor?".
Dijo William, como si no fuera para tanto.
"Sólo lo dije porque me preocupaba si esto era o no una buena idea".
"¿Qué importa...."
Intenté protestar con voz rastrera, pero William saltó.
"¿De qué estás hablando? Pensé que habías dicho que esperarías hasta el ciclo de calor, ¿no crees que deberías darme un poco de calentamiento antes para que no me asuste?".
"Aaah...."
Así que por eso dijiste ciclo de calor.
Me sentí a la vez aliviada y preocupada por no haberle revelado mi estado a William.
Me preocupaba porque él me había dicho que el ciclo de celo de un omega dominante ocurriría alrededor de los veinte años, como muy tarde, así que tendría que practicar antes de esa edad.
No sabía si debía alegrarme o preocuparme por la palabra "practicar". Sonreí torpemente, confuso.
"Así que por eso te asustaste".
Sonriendo ante mi comentario, William me rodeó la cintura con un brazo y me abrazó. Por un momento, sus feromonas parecieron golpearme, pero pronto se calmaron.
"Hay muchas sorpresas. Es imposible que mi omega me engañe, ¿verdad?".
Sentí una punzada de dolor en el pecho, como una estaca atravesándome la conciencia. Incapaz de mantener la cara seria, enterré la cara en el pecho de William. Él me susurró al oído con un atisbo de risa.
"Tendré que aguantar hasta que el calor cicle....".
"Vete, gracias".
"No deberías provocarme así, Danny".