Primerizos ☘ ChanIn

❥ 39

Siguió a Hyunjin por los pasillos de la casa. Estaba demasiado nervioso y caminaba lentamente.

"No vamos demasiado rápido".

Se dijo así mismo, sin embargo, se dio cuenta de que lo suyo con Chan no había funcionado precisamente, por lo contrario.

Chan era demasiado lento.

Ni siquiera habían llegado a una habitación cuando sintió los besos de Hyunjin en su boca y luego bajar por su cuello.

—Eres precioso, ya quiero tenerte.

Jeongin rodeó con sus manos el cuello del rubio sólo porque no quería quedarse todo nervioso sin hacer nada.

Las manos de Hyunjin acariciaron sus nalgas y las apretaron con fuerza.

Jeongin se quejó.

Entonces Chan apareció en su mente.

¿Chan se lo haría así?

En una fiesta, después de haber bebido demasiado alcohol y fumado, en medio de los pasillos.

Probablemente no.

Sus pantalones se deslizaron por sus piernas y Hyunjin atrapó una de sus manos para llevarla a su entrepierna.

Se sentía dura debajo de la ropa.

—Acaríciame —le susurró en el oído.

Jeongin movió su mano con suavidad y lentitud.

Sintió a Hyunjin cargarlo de repente y caminar por los pasillos, sus pantalones aún seguían colgando por sus piernas y terminaron de caerse cuando la puerta de una habitación se cerró.

—Qué desconsiderado he sido, no quiero hacerlo contigo en un pasillo —le dijo y lo recostó en la cama, terminó por quitarle los pantalones.

—Hyun... Yo no creo estar...

Sus palabras murieron en los labios del rubio.

Lo apartó.

—Yo de verdad... ahh.

Una mano se deslizó por su entrepierna haciéndolo temblar.

—Shuu, tranquilo será fantástico.

—Oh... Mierda... ahhh... —separó las piernas ligeramente y estas se movían temblorosas por la cama—. Hyunjin...

De nuevo su mano fue atrapada por la de Hyunjin y llevada a la erección contraria, pero esta vez sin ropa de por medio.

Se sentía caliente en su mano y pegajosa.

Cerró los ojos mientras su mano se movía de arriba a abajo.

¿Así se sentiría la de Chan?

¡Mierda!

Tenía que dejar de pensar en el menor, tenía que dejar de pensar en él, tenía que...

—No puedo —apartó a Hyunjin suavemente—. Lo siento, de verdad no puedo.

Hyunjin lo miró con la frente fruncida, a Jeongin no le importo, busco su ropa y empezó a vestirse de nuevo.

—¿Te vas, así como así? —le dijo—. Fui demasiado rápido, ¿quieres esperar?

—No, no se trata de esperar, simplemente no eres a quién yo amo, lo siento, fuiste una experiencia increíble, pero sólo me hiciste confirmar lo perdidamente enamorado que estoy de Chan.

Jeongin se quitó el reloj y lo dejo en el buró.

Salió en busca de un baño donde se lavó las manos, el pecho y la boca.