Pov Marcela
Baje del coche para encontrarme con Freddy, uno de mis guarda espaldas, sosteniendo a la muchacha con cara de impaciencia. La pequeña no paraba de retorcerse y gritar, de vez en cuando un solloza
-Dámela - Freddy me miró con
agradecimiento infinito en sus ojos
y tome a la muchacha en brazos,
cargándola como un saco de papa.Ante el cambio de posición, comenzó agritar con más fuerza.
-iPor el amor de Dios niña! Nadie va a hacerte nada, puedes callarte ya.
-¿¡Como puedes decirme que nadie
me hará nada!? iMe van a obligar a
prostituirme! chillidos, chillidos y
más chillidos.¿Quién carajos te dijo que te voy a
prostituir? - pregunte pasmada.Sonreí al sentirla tomar aire
desesperadamente luego de gritar
durante un minuto sin pausa, y comencé a caminar hacia mi casa
ante la mirada divertida de mis
empleados.¡Tú!, ¡tú! dije que no era un puta y me dijiste que si no lo era lo sería muy pronto iNo voy a dejarla convertirme en una puta! -¿Puedes dejar de gritar? Gracias al cielo, los oídos todavía me funcionan, a pesar de que tú estés atentando en su contra - la muchacha se quedó callada, a pesar de sus gritos
fueron remplazados por sollozos, lo
cual era mucho peor - prefiero que me grites dije en un suspiro.Los sollozos se hicieron más intensos. de pronto sentí una presión en el pecho.
¿Que era eso? Yo no sentía culpa, ni
remordimiento, ni pena. Marcela
Valles no sentía.-Oye tranquila - intenté suavizar mi
voz para no asustarla más, y abrí la
puerta de mi habitación en el tercer
piso - Todo va a estar bien.⁃ Seré una prostituta, nada va estar
bien - más sollozos, su voz sonaba
ahogada. Y una terrible sensación de
responsabilidad me invadió.Deposite a la muchacha sobre mi
cama, y al separarme para mirarla
sentía como le corazón se me partía
en mil pedazos. Sus ojos estaban rojos e hinchados, las mejillas bañadas en lágrimas. Sus hombros estaban caídos y sus labios lastimados de tanto mordérselos.Me permití pasar mi vista por su
cuerpo. Era un cuerpo perfecto.Casi suelto una carcajada al mirar su
pijama de osito. A todas luces parecía no ser más que una niña pequeña, pero una niña. No podía tener ese cuerpo ¿O sí? Sin poder contenerme, me puse en cuclillas frente a ella y aparte un mechón de pelo tras de su oreja.⁃ No serás una prostituta, la hubieras sido si te hubiera dejado ir con Wilson, pero aquí no. No te obligaré a hacer algo que no quieras, deja de llorar.
Dejo de sollozar pero las lágrimas
silenciosas seguían viajando por sus
mejillas.-Si no me obligarás a hacer nada
¿Porque no me dejas ir?suspire, y baje la vista. No podía
dejarla ir.-Porque sabes demasiado.
Pov Beatriz
¿Porque se.. demasiado? - la mire
con los ojos entrecerradosSi-se limitó a responder para
pararse y caminar hasta la puerta.iPero no sé nada! - me pare y segui
sus pasó - iNo se una mierda! ioye!Se giró antes de salir por la puerta
rascándose la frente. Parecía agotada y bastante enfadada.Pensé que ya habíamos superado la
maldita etapa de los gritosMe paré en seco, a sólo un metro de ella y fruncí el seño.
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SUYA- Marcetty
FantasyElla era una mafiosa. Ella solo era una universitaria. Beatriz al se secuestrada termina en manos de Marcela, una mujer terriblemente poderosa, posesiva y seductora. Marcela no sabia por qué la había aceptado como un "regalo", pero al ver esos aterr...