Our Son 『NOMIN』ADAPTACIÓN

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Era hora de que Jeno diera las buenas noches a Jisung. Estaba triste, pero al mismo tiempo se sentía mucho mejor que Jisung se sentía más exuberante. El hecho de que él y Jaemin finalmente hubieran hablado y expresado le dieron una sensación de alivio y paz. Aunque sabía que todavía había un largo camino por recorrer. Pero tenían que empezar en alguna parte.

Una vez en la puerta principal, Jeno se volvió hacia Jisung, agachándose para encontrarse cara a cara con su hijo. Él sonrió, pasando la mano por las mejillas regordetas de su bebé -Bueno, papá tiene que irse ahora, hijo. ¿Serás un buen chico, sí?

Jisung asintió con la cabeza -Sí, papá, quiero hacer algo para papá.

-Bien gracias bebe. Y te amo ok. Te veré el sábado.

Jisung mostró una amplia sonrisa dentuda, mostrando todos sus lindos dientes de leche, y al mismo tiempo se lanzó contra los brazos de Jeno, enterrando su cabeza entre la unión del cuello de Jeno -Yo también te amo, papá -Jeno luego se retiró, dando un beso en la nariz de su padre -¡Te veré el sábado donde nos divertiremos mucho!

Jaemin observaba con cariño. Realmente disfrutó de este increíble y precioso tiempo de unión. Él le sonrió a su hijo, que llegó levantando las manos con ganas de ser recogido. Levantó a su hijo en sus brazos, besando sus mejillas rosadas. Él se enfrentó a su ex -Gracias Jeno por venir. Te veo el sábado.

-Nos vemos Jae -Jeno sonrió y dio un breve suspiro antes de alejarse.

Esa noche, Jaemin se sintió muy a gusto. Desde que Jeno se había ido, había una inquietud y miedo subyacentes. Ahora parecía haberse desvanecido un poco. Sí, aún pensaba cómo podrían haber sido las cosas, lloró algunas noches después de que él y Jeno se separaron porque pensó que era él quien había alejado a Jeno. Debido a su rareza, lo que significa ser un portador masculino. Pero ahora, después de tener lo que esperaba, era la primera de las muchas conversaciones, después de descubrir que Jeno se había ido por el amor que sentía por Jae y su hijo por nacer, parecía que se tranquilizaba un poco. Sin embargo, todavía no confiaría en Jeno, pero pudo ver que había progreso. No pudo evitar pensar. ¿Qué pasaría si Jeno hubiera sido honesto cuando estaba embarazado? ¿Y si las cosas estuvieran bien entre ellos, dónde estarían ahora? Una familia feliz. Y mientras pensaba en diferentes escenarios, así se quedó dormido.

Jaemin se había despertado en una habitación iluminada. Gimió y se estiró sobre el suave colchón. Una vez que su brumosa visión se despejó, Jaemin tuvo una mirada adecuada a su entorno. La habitación era de color crema, tenía cortinas de encaje blancas, un armario de caoba, retratos en las paredes. Volvió la cabeza para ver el otro lado de la cama. Había una rosa y una nota en la almohada.

Él sonrió y levantó la rosa, acercándola a su nariz y olfateando. Oh, fue tan refrescante y dulce. Su flor favorita. Miró la nota y leyó:

Hola Jae

Te ves tan tranquilo y hermoso durmiendo.

Dios, no tienes idea de cuánta fuerza se necesita para evitar saltarte mientras duermes.

De todos modos no pude despertar a mi hermoso esposo.

Nuestro hijo y yo decidimos que deberíamos dejar tu flor favorita en tu almohada y cito con las palabras de Jisung -Hará sonreír a papá-.

Él es un amor tan grande y tiene un buen corazón.

De todas formas, cariño, ven a buscarnos a la cocina cuando te levantes. Estamos haciendo tu desayuno favorito, panqueques de arándanos.

Te veo cuando despiertes cariño.

♡ Jeno & Jisung

PD: Nos robamos un poco la rosa del jardín de flores de la Sra. Park shhh no se lo digas. Jisung dice que le haremos un pastel como disculpa.

Jaemin se rió entre dientes. Su esposo y su hijo fueron increíbles. Estaba un poco cómodo y no quería levantarse, pero luego el olor a panqueques llenó sus fosas nasales. Él zumbó en agradecimiento y se levantó. Se dirigió al baño y se lavó los dientes. Él salió de la habitación para encontrar la fuente del olor glorioso. Bajó a la cocina y, mira, Jisung y Jeno se estaban riendo alegremente y haciendo panqueques.

Jaemin se aclaró la garganta -Buenos días mis amores.

Tan pronto como Jeno y Jisung escucharon a Jaemin, ambos se volvieron y lo vieron sonriendo. Jisung corrió hacia él -¡Papá, despertó!

Levantó a su hijo y lo besó en la mejilla -Bebé, buenos días.

Jeno caminó hacia Jaemin y envolvió sus brazos alrededor de su cintura desde el frente con una risita de Jisung entre ellos. Dio un suave beso en los labios de Jeno -Buenos días mi marido.

Jeno le devolvió una sonrisa -Buenos días amor. Espero que hayas dormido bien

-Oh sí, te lo agradezco.

-¿Papá? -Jisung intervino.

-¿Sí bebé? -Jaemin miró a Jisung sonriendo.

Jisung ahora tenía una mano enganchada en el hombro de Jeno y otra en Jae para que pudiera mirarlos a los dos -¿Te gusta papá y mi rosa? Fueron los más brillantes en los jardines.

Jaemin sonrió -Realmente lo amo y la rosa de papi. Muchas gracias por ser tan dulce y reflexivo. Los amo a ambos.

-Yo también te amo -Jeno y Jisung respondieron alegremente.

(Papá despierta).

Jaemin entrecerró los ojos y le preguntó a Jeno y su hijo: -¿Oyen eso?

(Papá te quiero... despierta)

Jaemin sintió que alguien lo sacudía. Su visión de Jeno y Jisung comenzó a ponerse borrosa.

(¡Papá!)

Esta vez, Jaemin gimió cuando sus ojos se abrieron a una habitación luminosa. Gimió ante el dolor en sus ojos antes de que su entorno se aclarara. Estaba de vuelta en su habitación y allí, suspendido sobre él, con los ojos completamente abiertos y sonriéndole. Jisung chilló, aplaudiendo -Buenos días... tienes un buen sueño... sonríes... tengo hambre... ¿Podemos desayunar?

Jaemin sonrió. El sueño era muy vívido y lo hacía sentir feliz. Él preguntó: -¿Qué quieres para desayunar, bebé?

-Panqueques de arándanos ... ¡tu favorito y el mío también! -Jisung saltó arriba y abajo con entusiasmo.

-Ok, bebé, vamos a hacer el desayuno -Jaemin se rió y le revolvió el pelo a su bebé ligeramente.

A lo largo del día, Jaemin no pudo evitar seguir pensando en el sueño y parte de él esperaba que pudiera ser verdad.